El Barça salva de penalti el estropicio ante el Levante

Coutinho rescata al Barça en una noche negra

 Coutinho anotó de penalti el 2-1 que da opciones el Barça para pasar la eliminatoria / LALIGA

Los octavos de final de la Copa del Rey se complicaron para un Barça poco inspirado, que salvó los muebles con un penalti transformado por Coutinho. Fue un calvario para la apuesta rotatoria de Ernesto Valverde en el Ciutat de València, frente al Levante de Paco López que también rotó, pero que puso más ganas que los barcelonistas y de momento manda en la eliminatoria.

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Copa del Rey

2
1
Alineaciones
Levante UD
Aitor Fernández; Coke, Postigo, Cabaco, Chema (Jason, 69'); Prcic, Campaña, Rochina (Doukouré, 75'), Simon; Boateng (Morales, 62') y Borja Mayoral.
FC Barcelona
Cillessen; Semedo, Murillo, Chumi (Lenglet, 58'), Miranda (Sergi Roberto, 46'); Sergio Busquets, Aleñá, Arturo Vidal; Coutinho, Dembélé y Malcom (Denis Suárez, 67').

Entre las cábalas sobre quién haría de ‘nueve’ y las dudas en una defensa de estreno, el Barça se diluyó en un primer acto que se complicó para los de Valverde en muy poco tiempo. Concretamente, 18 minutos horribles, aprovechados por la ilusión y la pegada de un Levante que salió a hacer lo que debía.

Fue un homenaje a todos aquellos que, llevados por ese vicio llamado oportunismo, criticaban hace poco menos de un año que el Barça no hubiera hecho como el Madrid y tirara la Copa para apostar por la Champions. Sí, aquellos comentarios que se oían después de la debacle de Roma. Pues dicho y hecho. Piqué, Alba, Rakitic, Messi y Suárez pudieron ver por la tele cómo el Levante mandaba por 2-0 sin paliativo alguno a la indolencia blaugrana.

DOS MAZAZOS

Primero fue el uruguayo Cabaco quien apareció de la nada para rematar a la red un saque de falta del que fuera canterano del Barça Rochina. Sergio Busquets y Chumi vieron cómo el charrúa se levantaba más que ellos. Nada que hacer para Cillessen.

Después, el propio Cabaco interceptó un pase de Miranda y originó otro estropicio en la zaga del Barça. Envió a Boateng, este conectó con Borja Mayoral y el exmadridista, con ese 2 ‘contra natura’ que luce, alojó el balón entre las piernas del debutante Jeison Murillo y lejos del alcance de Cillessen.

Dos boquetes de agua en el barco blaugrana, achicados a veces por el portero holandés, como en dos ocasiones ante Boateng. El Barça no lograba salir de su campo, aunque intentaba aprovechar la alegría granota para sorprender a la contra. Mucha velocidad pero poca precisión, como la de Malcom en una carrera desde el centro del campo. Dembélé se quedó con las ganas de rematar un servicio peligroso de Semedo y también de asistir a Malcom en una acción al filo del descanso en la que el brasileño no llegó por poco.

BUSCANDO SOLUCIONES

Con el viento a favor del 2-0, el Levante amarró un descanso que era más necesario para el Barça. Valverde debía buscar soluciones y la primera de ellas fue dejar en la caseta a Miranda. Sin relevo natural, decidió cambiar de banda a Sergi Roberto, el hombre orquesta de la plantilla blaugrana al que solo le falta jugar de portero o -¡ay!- de ‘nueve’.

Coutinho, una vez más examinado, tampoco pasaba del suficiente, pese a que intentaba romper entre líneas e inquietó a Aitor en un mal despeje del portero. Mientras, los de Paco López seguían a lo suyo y Boateng, rozando el fuera de juego, puso a prueba a un Jeison Murillo que resolvió con solvencia.

MÁS SUSTOS

Valverde movió pieza de nuevo para quitar del campo a Chumi y sustituirle por Lenglet. El de Viandar de la Vera solo veía problemas en defensa, mientras Paco López echaba leña al fuego llamando a formar al comandante Morales. En su primera acción, ganó la partida a Murillo tras un pase de Mayoral pero envió el balón alto. Otro susto para el Barça.

El esfuerzo granota empezaba a notarse cuando Chema tuvo que ser atendido, coincidiendo con el último cambio de Valverde, con 23 minutos por delante. Esta vez sentó a Malcom y dio minutos a Denis Suárez. El tiempo pasaba y ni rastro de reacción blaugrana. Sergi Roberto haciendo de Alba en su versión más ofensiva, pero sin acierto. Aleñá buscando animar la sala de máquinas, sin alegría. Arturo Vidal, bregando como él sabe. Y el Levante, presionando en ataque siempre que podía.

MILAGRO DENIS

Las cabalgadas de Dembélé acababan sin el fuelle necesario para inquietar a Aitor Fernández, ante la euforia de la hinchada granota. Pintaban bastos, pero al Rey de Copas le quedaba una carta inesperada. La lucha de Denis Suárez tuvo premio forzando un penalti de Coke que De Burgos Bengoetxea no dudó en pitar. El cuestionado Coutinho asumió la responsabilidad y acertó a batir a Aitor, pese a que este había adivinado sus intenciones.

Un gol que da aire al Barça pensando en la vuelta, para no ver el panorama tan negro como apuntaban los nubarrones desde el minuto 18. En una semana, la eliminatoria se resolverá en el Camp Nou. A Valverde le queda decidir si dando descansos o apostando por quienes dejó en su casa. Cuestión de prioridades…