Barça-Raiola: una relación de amor y odio

El agente italiano regresa al escaparate mediático con un periplo por Europa a la búsqueda del mejor postor por Erling Haaland

El vínculo entre el famoso representante y el club azulgrana está marcado por muchos contactos, pero pocos acuerdos y menos éxitos

El padre de Haaland, cazado en Barcelona

El padre de Haaland, cazado en Barcelona / Marc Vinyals

Jordi Carné

Jordi Carné

La historia entre Mino Raiola y el Barça es una relación de amor y odio; un vínculo propio de esas parejas que no han funcionado demasiado bien cuando han estado juntas pero que saben, sin tener pruebas pero tampoco dudas, que en algún momento u otro se van a reencontrar y lo van a volver a intentar. El periplo del afamado representante por Europa a la búsqueda del mejor postor por Erling Haaland, que efectuó su primera parada en Barcelona, ha permitido al italiano volver a entablar contactos con la entidad culé y, por ende, regresar al escaparate mediático después de unos meses de protagonismo secundario.

El primer episodio de la relación entre Raiola y el Barça se produjo en 2009, con la llegada de Zlatan Ibrahimovic al Camp Nou en los últimos compases de la primera presidencia de Joan Laporta. El agente se llevó tres millones de comisión y un 10 por ciento de la ficha anual del delantero sueco; el club azulgrana traspasó al futbolista al cabo de una temporada, pero tuvo que pagar al representante su porción correspondiente hasta la finalización del pacto que habían firmado ambas partes. Mientras el contrato estaba en vigor, y en los primeros meses de su mandato, Sandro Rosell decidió congelar los pagos pendientes a Raiola por sus “inadmisibles” declaraciones contra Pep Guardiola, en aquel momento –finales de 2010– primer entrenador azulgrana. Mino se acabó embolsando unos 9 millones de euros por la operación y su relación con la nueva directiva culé no empezó con buen pie.

De hecho, la próxima vez que Raiola se dejó ver en la escena barcelonista fue en las elecciones de 2015, cuando aseguró que si Laporta regresaba a la presidencia “Pogba tenía muchas posibilidades de fichar por el Barça”. La victoria electoral, sin embargo, fue para un Josep Maria Bartomeu que ‘reforzó’ la medular del equipo de Luis Enrique con Arda Turan. Del mediocampista francés, por quien el Manchester United reembolsó más de 100 millones, no se supo nada más en el Camp Nou. “La dirección deportiva nunca quiso fichar a Pogba. Me dijeron que no tenía perfil Barça”, ha explicado en más de una ocasión Ariedo Braida, exasesor internacional del club catalán.

Mino Raiola y Zlatan Ibrahimovic, durante la presentación del delantero sueco con el Barça

Mino Raiola y Zlatan Ibrahimovic, durante la presentación del delantero sueco con el Barça / Marc Casanovas

Pocos acuerdos y menos éxitos

En verano de 2017, el interés del Barça en Marco Verratti volvió a unir los caminos de la entidad culé y Raiola. En ese caso, sin embargo, las piedras en el camino las puso el PSG. El club francés se negó a vender a la que en ese momento era su principal estrella y ni el mejor agente a la hora de ‘mover’ a jugadores fue capaz de modificar la posición de la cúpula parisina. Dos años después, con De Ligt, regresaron unos contactos que, una vez más, no fructificaron. El central holandés no siguió los pasos de su fiel amigo De Jong y se decantó por la propuesta económica y deportiva de la Juventus de Turín. Dicen que el tiempo pone a cada uno en su lugar. Las situaciones actuales de Frenkie, triunfando en Barcelona, y Matthijs, planteándose un cambio de aires, evidencian la importancia de tomar buenas decisiones en los momentos oportunos.

Antes de la ‘gira’ de Mino –que tiene muy buena relación personal con Laporta– para encontrar el mejor destino posible para Haaland, el italiano protagonizó un nuevo episodio amargo en Barcelona. En 2017 ‘fichó’ a la mayor promesa de la Masia por aquel entonces, Xavi Simons, y menos de dos temporadas después lo ‘empujó’ hacia el PSG, archienemigo del Barça en los últimos años tras los casos de Thiago Silva, David Luiz, Marquinhos, Verratti, Rabiot y, evidentemente, Neymar.