El Barça hace los deberes y se afianza en 'zona Champions'

No fue una goleada estrepitosa para olvidar las penas, pero sí una victoria relativamente solvente. Al final, de eso se trataba. El FC Barcelona superó al Mallorca para poner fin a la desastrosa e histórica racha negativa de tres derrotas consecutivas en el Camp Nou y amarrar la segunda posición de la clasificación de la Liga. Los culés cerraron un buen fin de semana, en el que sus rivales directos ‘pincharon’, con un triunfo vital para encarar las últimas cuatro jornadas de la competición doméstica con buenas sensaciones. Y con una sonrisa. Porque en el fútbol los tres puntos son sinónimo de felicidad y porque Ansu Fati reapareció 101 días después.

Barça-Mallorca, 01/05/2022

Liga Santander

FCB

2

1

MAL

Alineaciones

FC Barcelona
Ter Stegen; Dani Alves (Clément Lenglet, 88'), Ronald Araujo, Gerard Piqué (Eric Garcia, 28'), Jordi Alba; Frenkie de Jong, Sergio Busquets, Gavi; Ferran Torres (Ansu Fati, 75'), Pierre-Emerick Aubameyang (Ousmane Dembélé, 75'), Memphis Depay.

RCD Mallorca
Sergio Rico; Pablo Maffeo, Franco Russo, Martin Valjent, Antonio Raíllo, Brian Oliván; Rodrigo Battaglia (Kang-in Lee, 70'), Dani Rodríguez (Clément Grenier, 60'), Antonio Sánchez (Salva Sevilla, 70'); Fer Niño (Takefusa Kubo, 60'), Ángel Rodríguez (Matthew Hoppe, 89').

Goles

1-0, Memphis Depay (min. 25); 2-0, Sergio Busquets (min. 54); 2-1, Antonio Raíllo (min. 78).

Árbitro

Pablo González Fuertes (comité asturiano). Amonestó a Gavi (min. 35) y Jordi Alba (min. 90) para el Barça y a Raíllo (min. 63), Grenier (min. 64) y Maffeo (min. 90) para el Mallorca.

Incidencias

Partido correspondiente a la 34ª jornada de la Liga Santander, disputado en el Camp Nou ante 62.789 espectadores. Antes del encuentro, los equipos de hockey hielo y voleibol ofrecieron los títulos de Liga y Superliga-2, respectivamente. Además, se guardó un minuto de silencio por Josep Palau, jugador del FC Barcelona la temporada 1968/69.

Memphis Depay fue la principal novedad en un once inicial de Xavi que, más allá de ser el más veterano del curso (28,3 años de media), evidenció que la confianza del técnico vallesano en Adama Traoré sigue cayendo en picado. El delantero neerlandés tuvo una nueva oportunidad para demostrar su valía y la aprovechó. También fue de la partida Gerard Piqué pese a las molestias musculares que le acompañan desde hace varias semanas y que, de hecho, le obligaron a abandonar el césped a la media hora de juego. Ousmane Dembélé, con amigdalitis, y Ansu Fati empezaron en el banquillo. Ferran Torres ocupó la banda derecha del ataque. Aubameyang, algo lento, se movió bien y tuvo buenas ideas, pero no acertó a la hora de la verdad. En el momento de dar el último pase y de rematar a la portería contraria. En la asignatura de marcar diferencias.

La primera mitad azulgrana fue buena. Sin más. La imagen fue mejor que la mostrada ante Cádiz, Real Sociedad y Rayo Vallecano. El Barça de Xavi recordó en cierto modo al Barça de los primeros compases de la temporada. Un equipo contra el que todo el mundo se siente capaz, encomendado a los destellos de Memphis, protagonista principal de la obra, y con poca contundencia en las dos áreas. Los culés concedieron dos oportunidades claras a los de Javier Aguirre, las acciones que abrieron y cerraron respectivamente los 45 minutos iniciales. Fer Niño perdonó a placer primero y, después, Antonio Sánchez no finalizó bien una jugada en la que Eric Garcia resbaló de la forma más inoportuna.

Entre ambas ocasiones, el dominio fue claramente barcelonista. Busquets ejerció de director de orquesta, Gavi se adueñó del centro del campo con su tradicional cóctel de garra y magia y Depay, desencadenado, compensó la evidente pérdida de confianza de Ferran y ‘Auba’. Se puso el equipo a sus espaldas, participó muchísimo y no perdonó cuando la tuvo. Jordi Alba le encontró y el ‘9’ definió con un disparo imparable para batir a Sergio Rico. Un tanto de cabeza de Araujo anulado por un fuera de juego muy justo y un tacón de Raíllo que a punto estuvo de convertirse en gol en propia fueron las otras llegadas más peligrosas antes del descanso. El Mallorca, que se había plantado en Barcelona con las ideas muy claras y encomiable valentía, se desmontó. La ilusión balear se desvaneció a medida que el conjunto local fue creciendo. El tercer peor equipo de la Liga a domicilio no pudo hacer nada para evitar la novena derrota consecutiva lejos de su templo.

Sufrimiento inesperado

En la reanudación, el Barça dio un paso adelante y disputó sus mejores minutos en el último mes. Encerró al Mallorca y generó un puñado de ocasiones para sentenciar el encuentro. Tras un disparo tímido de Gavi y un rechace al palo de Raíllo, Sergio Busquets se apuntó la segunda diana de la apacible noche. Los de Xavi Hernández convirtieron el Camp Nou en una fiesta con buen fútbol y personalidad. Ferran Torres las tuvo de todos los colores y, de hecho, en una acción embarullada superó a Sergio Rico, pero su gol fue anulado por el VAR por fuera de juego. El barcelonismo disfrutó y recibió con una ensordecedora ovación a Ansu Fati cuando volvió a vestirse de corto, pero su ingreso en el ‘verde’ se vio completamente marcado por una diana de Raíllo. Aguirre y los suyos recortaron distancias en una acción que manifestó una vez más la fragilidad blaugrana. Ter Stegen hizo la estatua.

Aunque el gol instaló el miedo en el cuerpo de los futbolistas locales, el Barça no permitió que los atacantes mallorquines volvieran a acercarse a su portería y los tres puntos no se escaparon. No fue una victoria contundente, pero al fin y al cabo permitió al conjunto catalán afianzarse en 'zona Champions' y recuperar la segunda posición de la tabla de la Liga. De eso se trataba.