Barça: Calma antes de la tormenta

La crisis del Barça se agudiza tras perder la Copa

 Directiva, secretaría técnica y plantilla buscan culpables del mal final de curso del equipo / sport

Toni Frieros

Toni Frieros

Consciente del ruido que hay en el entorno de la entidad, el presidente del FC Barcelona impone la reflexión, el análisis y el diálogo con sus más cercanos para estar seguro que las decisiones que debe tomar sean las correctas.

"No hay crisis”. Así de contundente se ha mostrado un directivo del FC Barcelona. “Cuando has ganado una Liga con la autoridad con la que la ha conquistado el Barça es que algunas cosas sí se han hecho bien. No se trata de quemarlo todo.Esa no es la solución”, recalca.  

Sin embargo, reconoce que “ha  sido una gran decepción caer como caímos en semifinales de la Champions en Liverpool y perder la final de la Copa del Rey en Sevilla”. A pesar de esa lectura tan prudente, coincide con el sentir general del barcelonismo: “Se han de cambiar cosas y hay que tomar decisiones en la parcela deportiva”.

Información y reflexión

En las últimas horas el presidente del FC Barcelona ha hablado personalmente con muchos de sus compañeros de junta y también con ejecutivos del club. Y a todos ellos les ha transmitido el mismo mensaje. Comparte con ellos el malestar general y la decepción por las derrotas de Champions League y Copa del Rey, pero les ha pedido a todos, calma y reflexión.

Bartomeu considera que sería un gravísimo error tomar decisiones en caliente, dejándose llevar por el impulso o para contentar a determinados sectores del barcelonismo que piden “sangre”. Piensa que, en las circunstancias actuales, su responsabilidad es ser reflexivo y tener en cuenta, sobre todo,  que no se debe pensar solamente en el mañana, en el corto plazo, sino en el Barça del futuro. 

La primera decisión que debe tomar Bartomeu es qué profesional ha de ser el responsable de confeccionar la plantilla 2019-2020. Es decir, quién asumirá las bajas que se tengan que negociar y los fichajes que se han de llevar a cabo.  Hasta que nadie diga lo contrario, esa misión recae en la figura de Pep Segura, mánager  deportivo del club. Son muchos los compañeros de junta que le han pedido al presidente un relevo en esa parcela.

¿Y Valverde? También, si debe ser Ernesto Valverde el técnico que debe continuar liderando el proyecto deportivo. El presidente le ha reafirmado públicamente y en el Senado del club.  Por lo tanto, no parece probable que se desdiga. Y tampoco parece probable que sea el propio entrenador quien renuncie a su cargo.

Sin embargo, la obligación de club es tener opciones en el mercado porque si hay un cambio de opinión o por si fuera el propio Valverde quien renunciara. En ese sentido, ayer volvió a surgir el nombre de Ronald Koeman y también, según ha podido saber SPORT, se ha sondeado la opción del técnico catalán Robert Martínez.

En el club hay una corriente de opinión que incide en que “hay que volver a ilusionar al barcelonismo con un proyecto deportivo ambicioso”. Bartomeu quiere tener en sus manos un exhaustivo informe donde se detallen todos los aspectos que han provocado la debacle del equipo en el mes de mayo. Ese informe lo tiene que confeccionar Segura. Está por ver si lo presentará personalmente a Barto o en el seno de la próxima junta directiva, prevista para mediados de junio.

Aunque a título personal más de un directivo era partidario el domingo de convocar una junta de urgencia esta misma semana para valorar el momento deportivo del club, Bartomeu, desde el primer minuto, descartó esa posibilidad, siendo partidario de la calma y la reflexión.

En la cúpula de la entidad se insiste en que tomar decisiones de forma inmediata, sin analizar los pros y los contras, es contraproducente.También se hace hincapié en que acaba de finalizar la temporada 2018-2019 y queda todo el verano para negociar las bajas y trabajar en las altas. No hay prisa en ese sentido. Solo hay que definir muy bien cuales han de ser esas acciones a emprender y las prioridades. De Jong ya está fichado, De Ligh tiene muchos números y Griezmann es otra opción. Hay otras. Por eso, lo esencial  es estar cien por cien seguro de quienes han de pilotar ese cambio.  

En el campo y en los despachos.