Balonmano
El Magdeburgo se proclama nuevo campeón de Champions
El conjunto del guardameta español Sergey Hernández pasó por encima de un gris Füchse Berlin para sumar la cuarta corona europea de su historia
Sergey Hernández, uno de los protagonistas del partido / EFE
El Magdeburgo, verdugo del Barça en semifinales, se convirtió en el nuevo campeón de Champions, tomando el testigo de los azulgranas, gandores en la edición pasada. Los hombres de Bennet Wiegert ejercieron su dominio desde los primeros compases para anular a un Füchse Berlin que nunca dio muestras de poder pelear por el título europeo (26-32). Con el guardameta español, Sergey Hernández, como uno de los protagonistas, el Magdeburgo se llevó el duelo alemán para sumar la cuarta Champions de su historia (1978, 1981, 2002, 2023).
CHAMPIONS LEAGUE
BER
MAG
| FÜCHSE BERLIN, 26 |
|---|
| (12+14): Milosavljev; Litchlein (3), Andersson (1), Marsenic (2), Freihofer (5, 4p), Gidsel (7), Hav Teigum (7) -siete inicial- Wiede, Darj, Prantner, Strlek, Langhoff (1), Beneke, Grüner, Herburger y Ludwig (p.s). |
| SC MAGDEBURG, 32 |
|---|
| (16+16): Sergey Hernández; Mertens (2), Claar (6), Kristjansson (8), Magnusson (6, 5p), Petterson (3), Saugstrup (3) -siete inicial- Zechel, Serradilla (1), Hornke, Weber (1), Lagergren (2), O’Sullivan, Damgaard y Bergendahl y Portner (p.s). |
Pese al desgaste del duelo de semifinales contra el Barça, el Magdeburgo apenas se resintió ante un Füchse algo más fresco. En un inicio muy igualado, los de Bennet Wiegert no tardaron en imponer su dominio y con una diana desde los siete metros de Magnussen y un tanto de Serradilla pusieron el +3 en el marcador (8-11), sentando las bases del encuentro.
El Magdeburgo seguía crecido, centrado en ataque y muy sólido en defensa, mientras que el Füchse no conseguía encontrar la manera de dar la vuelta a la situación. Al acierto ofensivo de Kristjansson se sumó la actuación del español Sergey Hernández que, con cinco, paradas, la última en el lanzamiento final, mantuvieron la hegemonía del Magdeburgo. Así, el duelo se fue al descanso con un 12-16 en el marcador.
Sin cambios a la vista
La dinámica no cambió en el inicio del segundo tiempo, con Sergey de nuevo como protagonista, aunque el partido pronto sufrió un primer golpe de efecto con la expulsión de Serradilla. Como en el duelo contra el Barça, el sevillano vio una roja que le dejó fuera del partido, privando a su equipo de una pieza clave en defensa.
La ausencia del español no pareció afectar al Magdeburgo que, con un guion de partido claro, mantuvo su renta de cuatro goles, gracias al acierto de Magnussen y Kristjansson que compartieron el trabajo ofensivo.
Kristjansson fue uno de los máximos goleadores del partido / AP
Sin noticias de reacción por parte de un Füchse gris, los de Wiegert avistaban ya en el horizonte un nuevo título. Más aun cuando Mertens anotó a portería vacía para poner la renta en un casi inalcanzable +6.
Ya en el tramo final, el Füchse consiguió recortar distancias, pero el Magdeburgo, haciendo gala de una impecable gestión del tiempo, mantuvo distancias con protagonismo para un Claar que firmó tres dianas consecutivas (25-30). La estocada, a cuatro para el final, llegó de la mano de Sergey Hernández que, con dos paradas consecutivas, la segunda a Gidsel, encarriló definitivamente el triunfo del Magdeburgo.
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