La última oportunidad para Joan Peñarroya

Después de cinco meses de competición, el técnico del Barça, Joan Peñarroya, es más consciente que nunca que su continuidad en el banquillo azulgrana pasa por lo que suceda este domingo en el Gran Canaria Arena (13.00).

El conjunto azulgrana, después de una mala trayectoria en la Liga Endesa, se juega sus opciones de estar en la Copa del Rey, una cita a la que nunca ha faltado en los últimos 50 años, en el duelo que vivirá el Barça ante el conjunto de Jaka Lakovic.

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Al cuadro de Peñarroya, tras caer de manera sorprendente –un partido más- en la pista del Bàsquet Girona, ya no tiene cojín de seguridad y solo le vale la victoria ante el DreamLand Gram Canaria y otro triunfo más en el Palau, ante el Surne Bilbao Basket.

Dos finales para cerrar la primera vuelta

Unas cuentas fáciles para este Barça que está pasando un autentico ‘calvario’ en las dos principales competiciones. En la Euroliga, sigue dando bandazos con victorias combinadas con derrotas, aunque con tiempo a rectificar el camino.

En la Liga Endesa, malvive por la mitad de la table y ahora con la obligación de ganarse la plaza para la Copa del Rey que se jugará, precisamente, en el escenario donde Peñarroya tiene el primer ‘matchball’ para seguir al frente del equipo.

El propio técnico de Terrassa es consciente de lo que se juega este domingo, y más después de conocer de boca del propio general mánager, que su recorrido en el banquillo blaugrana llegaría a su fin si el equipo no se mete en la Copa.

Con los que cree

Por ello, Peñarroya, consciente de que solo le vale el triunfo para salvar el cuello, aplicará sus criterios que considera necesarios, y entre ellos, prescindir de un jugador que solo le ha dado decepciones como Willy Hernangómez.

Con la duda de Vesely, que continúa entre algodones con molestias en su rodilla, el entrenador blaugrana confía en la capacidad de Metu para las posiciones de ‘cuatro’ y ‘cinco’ junto a los minutos que le pueda aportar Youssoupha Fall, que incluso ha pasada por encima del madrileño.

Tras la dolorosa errota ante el Bàsquet Girona, la dirección deportiva sospesó el cambio de entrenador con Pesic en la recámara como primera opción, pero la vorágine de partidos no lo aconsejaba. En Mónaco, con un Brizuela estelar el equipo respondió con un Peñarroya más valiente que nunca a nivel táctico, y seguro que también buscará sacudir al equipo ante el Gran Canaria. Le va el puesto en el intento.