Historia SPORT

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Así supo Bartomeu que Neymar se iba del Barça

Bartomeu sospechaba que Neymar se iba a ir

Bartomeu sospechaba que Neymar se iba a ir / AFP

Javier Giraldo

Javier Giraldo

El 'caso Neymar', que ha marcado el verano en Can Barça, vivió un punto de inflexión el pasado 22 de julio, en Nueva York, cuando el presidente del club, Josep Maria Bartomeu, pidió reunirse a solas con Neymar para intentar aclarar el futuro del jugador brasileño.

Con los rumores ya disparados sobre el interés del PSG, Bartomeu decidió verse cara a cara con el brasileño: ni siquiera estuvo en la reunión el padre del jugador, uno de los personajes clave en el culebrón que se viviría poco después.

En aquella reunión, de unos quince minutos, Neymar intentó tranquilizar al presidente Bartomeu asegurándole que pese al interés del Paris Saint-Germain, su prioridad sería el Barça. El brasileño dijo que quería quedarse en el Barça, a pesar de reconocer que el club francés le ofrecía una ficha mucho más alta que la percibía en el Barça.

Pero Bartomeu supo entonces que Neymar no estaba diciendo la verdad. "No me miraba a los ojos y eso me hizo ver que ya estaba más por la labor de irse que de quedarse", confesó poco después el presidente. A Bartomeu también le mosqueó que en solo quince minutos, Neymar fuese capaz de rechazar el interés del PSG y de apostar por el Barça. 

El presidente lo tuvo tan claro que salió de la reunión con Neymar decidido a poner en marcha la maquinaria para suplir al jugador brasileño, hasta el punto de que pocos minutos después, se reunió con el director deportivo, Robert Fernández. 

"Hay que buscarle un sustituto, se va a ir", le dijo Bartomeu a Robert en Nueva York, ese mismo 22 de julio. Apenas diez días después se confirmaba la marcha de Neymar al PSG. 

el error de 'ney' en los plazos

Uno de los motivos por los que el Barça está especialmente dolido con Neymar, más allá de la denuncia por la prima de renovación, es que la decisión del brasileño y su anuncio de irse se dilataron demasiado en el tiempo. El club lamenta que cuando su traspaso se hizo oficial, buscarle un sustituto ya supone una inversión mayúscula. 

El Barça hubiese preferido que los plazos hubieran sido diferentes: "Lo ideal sería que Neymar nos comunica en privado que se va, nos ponemos a buscarle un sustituto sin problemas de mercado ni de inflación y cuando lo tenemos apalabrado, entonces sí que podemos comunicar públicamente que Neymar se va. A veces las cosas se hacen así, para no perjudicar al club, pero en este caso no ha sido así", lamentan desde las oficinas de la entidad.