Ansu Fati: El niño que hizo su primer balón con calcetines

¿Quién es Ansu Fati?

Todo lo que debes sabre sobre Ansu Fati / Marta Fernández

Josep Capdevila

Josep Capdevila

La historia de Ansu Fati es de aquellas que, a poco que le vayan bien las cosas en el futuro,   puede dar para una serie de televisión o, incluso, para una película. Niño de origen muy humilde llega a la cima del fútbol mundial.Con serie o sin ella, ojalá eso sea una realidad.

Ansu Fati es el segundo de los hijos del matrimonio formado por Bori Fati  y María de Lurdes Vieira, una humilde familia de Guinea-Bissau. Ansu nació un 31 de octubre de 2002. Allí estuvo viviendo hasta los ocho años.Desde hacía tiempo, el padre se había trasladado a Portugal a trabajar, pero a la que pudo se llevó a toda la familia a España, en concreto a la población sevillana de Herrera.  De hecho fue entonces, cuando Ansu tenía ocho años, cuando en realidad conoció a su padre, porque hasta entonces lo había visto en contadas ocasiones.

Y fue en Herrera donde dio Ansu sus primeros pasos futbolísticos. En Guinea ya había jugado a fútbol, pero no de manera oficial.Jordi Figueroa, que fue su primer entrenador en la Escuela de Fútbol Herrera, cuenta que “cuando llegó, Ansu me explicó que allí no tenían ni balones y él se los hacía uniendo calcetines. Desde Herrera, al saberlo, incluso mandamos balones y camisetas a los primos y otros familiares que Ansu aún tenía en Guinea-Bissau”. Figueroa quedó impresionado con Ansu desde el primer momento. “Su calidad era innata, ya la traía. Tanto es así que en realidad para sus compañeros era un maestro. Él solo quería jugar, nada más. Y era muy solidario: hacía las jugadas y les daba el gol hecho a sus compañeros. Y si marcaba él, siempre lo hacía bonito”. Era un jugador diferente. Por eso pronto jugó con el Peloteros, un equipo formado por jugadores de los 20 equipos de la comarca. De allí ya se fue al Sevilla y de allí al Barcelona, con tremendo enfado incluido del entonces presidente sevillista, José María del Nido.

Llegó al Barça en categoría benjamín, pero pasó directamente al alevín A, que entonces entrenaba Marc Serra.“Era un jugador diferente. Ya nos habíamos enfrentado a él cuando jugaba en el Sevilla y se veía que a pesar de su gran físico, no se aprovechaba de él. Le gustaba más dar el último pase que marcar”.

Serra tiene buenas anécdotas de Ansu. “En un torneo en el que estaba a prueba tiró muy mal un penalti.Casi sin ganas. Le dije que si lo volvía a hacer le mandaba a Sevilla de nuevo.En el siguiente partido marcó ocho goles”. Serra también destaca que Ansu “aparecía siempre cuando se le necesitaba. En un torneo podía jugar mal los primeros partidos, pero en los decisivos era siempre el mejor”. Marc, que es el actual entrenador del cadete B, sentencia: “Es el jugador más talentoso que he visto en el fútbol base del Barcelona”.

Desde ese alevínA, Ansu Fati fue creciendo, jugando siempre en categorías superiores a la de su edad. Franc Artiga le tuvo en el cadete A y, muy poco, en el juvenil B.“Es un jugador técnicamente excelente, que puede jugar en las tres posiciones de ataque. Empezó de 9, pero ha ido derivando a 9 falso e incluso extremo. Tiene llegada y es de los jugadores más completos que han pasado por La Masia”.

Artiga destaca, además, que es un futbolista muy exigente consigo mismo. De hecho, hay una anécdota significativa. En uno de sus partidos en el fútbol base, no diremos la categoría, estuvo fatal. Y este es el mensaje que le mandó al que era entonces su entrenador. “Hola.Ya estoy en el AVE. Lo siento mucho por la mierda de partido que he hecho. No volverá a pasar nunca más”. Ese equipo no volvió a perder en toda la temporada.

Aunque de pequeño Ansu ya tenía un físico envidiable, en los años siguientes se estancó un poco. Solo había una solución: machacarse a tope en el gimnasio. Y vaya si lo hizo. “Es siempre el primero en llegar”, explica el propio Franc Artiga.

Pero no todo ha sido de color de rosas en su carrera futbolístico. Su peor momento lo vivió en un partido contra el Infantil A del Espanyol, disputado en la Ciutat Esportiva Joan Gamper. Sufrió una durísima entrada. Quedó tendido en el suelo con claros signos de dolor. Tuvo incluso que ingresar una ambulancia en el terreno de juego para llevárselo a un hospital. Tenía fractura de tibia y peroné. Se perdió el resto de la temporada y la primera parte de la siguiente. “Eso le hizo aún más fuerte mentalmente”, aseguran los técnicos que han trabajado con Ansu hasta llegar a este momento histórico: su debut con el primer equipo del FC Barcelona.