Ansu, dispuesto a dar guerra

Ansu Fati ha jugado solo dos partidos completos esta temporada con el Barcelona. Muy poco para un delantero de 20 años que sale de un proceso traumático de cuatro operaciones seguidas. El internacional vive su primera temporada post lesión con un sentimiento ambiguo. Por un lado, a nivel físico se encuentra en un perfecto estado, muestra de ello es que solo se ha perdido una semana de entrenamientos durante toda la temporada por culpa de unas molestias sin gravedad. Entiende que el mal sueño quedó atrás.

Ahora, está siempre disponible para Xavi y es un fijo en las convocatorias. Pese a ello, Ansu no ha tenido la continuidad que se esperaba y no recuerda una racha de tres titularidades seguidas, algo extraño teniendo en cuenta de que se trata del jugador que lleva el '10' en la espalda. Y si le dieron el '10' fue gracias a sus actuaciones antes de la lesión, cuando deslumbró al mundo con su voracidad y su frescura que le valió ser considerado como el 2º en la clasificación del Golden Boy 2020 por detrás de Haaland.

Ansu, sin embargo, todavía no ha podido recuperar las sensaciones de entonces, en parte porque ha carecido de la continuidad necesaria para ir ganando la confianza necesaria. Lejos de preocuparse por los rumores de una posible salida, Ansu está convencido de que encontrará el camino que le convirtieron en alguien señalado y en alguien destinado a escribir una de las páginas más bellas de la historia del fútbol. "Llegará", dice tanto a sus próximos como en el vestuario, seguro que paciencia volverá donde estaba.

Cuenta, como decíamos, del handicap de no tener esa plena confianza de Xavi para que estas sensaciones vuelvan cuanto antes. Ansu es el delantero que menos minutos ha tenido esta temporada, y eso que compite con jugadores que han estado de baja (Dembélé) y otros que atraviesan una crisis de juego (Ferran). El delantero ha sido el último opción para Xavi y esto acaba afectando a un jugador que busca reencontrarse con su camino.

Sin embargo, Ansu deja claro a quien se le acerque que no se va a rendir, que no va a tirar la toalla y que dará lo máximo para que Xavi le otorgue más minutos y que le permita recuperar sensaciones. Está dispuesto a dar guerra pese a que vayan en aumento los rumores de una posible salida. Ansu llegó al Barcelona hace una década, cuando solo tenía diez años, una larga trayectoria en las categorías inferiores persiguiendo un sueño del que no piensa olvidarse por vivir una parte de la temporada a medio gas.

Durante todo este tiempo, se ha dedicado a callar, a trabajar sin abrir la boca, sin una mala cara, esperando ver finalmente la luz al final del túnel. El propio Xavi admitió que "Ansu es un activo espectacular del club. Confiamos muchísimo en él, está trabajando muy bien", dando muestras del valor que supone para el barcelonismo. Ansu precisa de un click y es Xavi quien debe dárselo.