El año de la resurrección empieza con 'circo'

El partido que no debería jugarse dará inicio a las 21:00 (salvo giro de guion) en el Visit Mallorca Estadi con un Barça muy poco reconocible

Xavi tendrá que formar un once inédito para hacer frente al aluvión de bajas

Un Barça asolado por las bajas se entrena antes del Mallorca

Un Barça asolado por las bajas se entrena antes del Mallorca / Efe

Sergi Capdevila

Sergi Capdevila

Un 2022 ilusionante que empieza de la forma más rocambolesca. Ese sería el titular de la previa del encuentro que esta noche (21:00) disputa el FC Barcelona en el Visit Mallorca Estadi (Son Moix de toda la vida). 

Es innegable que el culé se ha reenganchado de lleno al equipo después del aterrizaje de Xavi y de las llegadas de Dani Alves y, sobre todo, Ferran Torres. Curiosamente, ni uno ni otro estarán en este primer partido del año en Palma. Son solo dos de las 16 bajas con las que deberá lidiar el técnico egarense en el, probablemente, choque más estrambótico de su incipiente carrera como entrenador. 

UN PANORAMA COMPLICADO

Con solo 11 futbolistas del primer equipo disponibles, el Barça que veremos esta noche en suelo balear será poco menos que irreconocible. Para empezar, ocho de los 10 jugadores de campo que tiene con ficha de la primera plantilla Xavi tendrán que jugar. Mínimo siete tienen que estar sobre el césped y no puede arriesgarse el de Terrassa a que se produzca una expulsión. Así pues, además de Neto, Umtiti y Lenglet (dieron negativo ayer y tienen el OK para viajar, pero hay que recordar que vienen de estar más de una semana sin entrenarse con sus compañeros) apuntan a ver de inicio el duelo desde el banquillo. 

Junto a ellos, una delegación muy numerosa de jugadores del Barça B. A Nico González (no olvidemos que tiene todavía ficha del filial) ya ni lo metemos en ese saco. Otros como Ferran Jutglà, Álvaro Sanz o Ilias Akhomach (debutó en el primer partido oficial de Xavi en el banquillo) son más habituales. De hecho, salvo sorpresa, tanto el de Sant Julià de Vilatorta como el extremo de edad juvenil apuntan a acompañar a Luuk de Jong formando tridente ofensivo. Precisamente esa parcela de ataque es la más mermada con las ausencias, por diferentes motivos, de Coutinho, Ansu, Memphis, Dembélé, Ez Abde y Ferran Torres. 

ENTRE OBLIGACIÓN Y REALIDAD

Sobra decir que la situación clasificatoria del Barça es bastante comprometida. Actualmente el cuadro azulgrana está fuera de posiciones europeas y a 18 puntos del líder Real Madrid. El objetivo más palpable y realista es entrar entre los cuatro primeros y asegurar plaza Champions. Y para ello hay que empezar a sumar de tres en tres, empezando por este estreno del nuevo año en Mallorca. El 2022 de la ‘resurrección’ empieza con un partido que, como dijo Xavi ayer en rueda de prensa, “nunca deberia jugarse”.

Por sentido común. Porque con 16 bajas un equipo no está en condiciones de competir. Sea el Barça, el Cádiz o el Gratallops. Pero la normativa es inflexible y la expedición azulgrana aterrizará este mediodía en Palma con lo puesto y con una camada de chavales del filial dispuestos a aprovechar la oportunidad.

Un contexto complicado por la mencionada plaga de ausencias y por la situación de incertidumbre total con Ousmane Dembélé. Xavi ha intentado por activa y por pasiva convencer al galo para que renueve y aún alberga alguna esperanza. No será lo que veamos esta noche seguramente un dibujo de lo que tiene que ser el Barça 2022, pero sí puede servir como un buen espaldarazo para poner la primera piedra del año de la esperanza.