Aleñá y Puig, al primer equipo

Y mientras en el filial... Brutal pase de Riqui Puig acaba con golazo de Collado

 El de Sabadell definió a la perfección en una jugada en la que intervino el de Matadapera / FC Barcelona

Carles Aleñá y Riqui Puig formarán parte de la plantilla del primer equipo del Barcelona de la próxima temporada. La decisión está tomada. Solo la llegada de una oferta muy elevada por parte de alguno de ellos podría cambiar una medida tomada por la dirección deportiva, el entrenador y el presidente azulgrana.

El Barcelona considera que los dos jugadores están listos para aportar al equipo mucho más de lo que hacían hasta ahora y tendrán rango en una plantilla en la que se intentará combinar los cracks que vienen de fuera con jugadores canteranos. Formarán parte de la plantilla de Quique Setién, tendrán dorsal del primer equipo y se pondrán en la pelea para ganarse un puesto y un nombre.

El Barça siempre ha tenido a jugadores de la casa siendo el corazón del equipo, que han llevado el peso de la temporada, que han transmitido a los nuevos cual es la realidad de la entidad y de su entorno, a veces, complejo. Ocurre desde tiempos remotos pero especialmente en las últimas décadas con jugadores que han acabado siendo capitanes: Guardiola, Amor, Puyol, Xavi, Iniesta o Messi. La plantilla del equipo se encuentra ahora sin esta correa de transmisión pues tras los veteranos como Piqué, Busquets o Messi solo está Sergi Roberto (26 años). Luego, ningún canterano se ha consolidado, razón por lo que la apuesta por Aleñá y de Riqui Puig es de club. Ellos son el relevo, los que deben aprender para que en un futuro lleven el peso del equipo. Es una decisión estratégica. De club.

UN primer caso

Carles Aleñá (22 años) tiene más recorrido que Puig. En la temporada 2016-17 ya hizo sus pinitos en el primer equipo disputando tres partidos. La siguiente tuvo el reto con el Barcelona B en Segunda División. Allí se ganó los galones porque lideró al equipo, asumió el peso del grupo y se echó en numerosas ocasiones en el Barça B a sus espaldas. Se había abierto la puerta del Camp Nou. En la temporada 2018-19 tuvo dorsal con el primer equipo. Fue una etapa de aprendizaje a una nueva dimensión. Participó hasta en 17 partidos. Esta última temporada ha sido  atípica porque empezó con el equipo de Valverde pero a mitad de curso fue cedido al Betis. Era una nueva prueba para constatar si daba un salto más adelante y se asentaba en la categoría. Y logró su reto. Jugó en ocho partidos, en casi todos como titular. Aleñá certificó que es un jugador de primera División. A partir de ahora le tocará demostrar lo más difícil, que es un hombre para el Barça. Capacidades tiene porque Aleñá no es de los que se arruga.

Puig aprieta

El caso de Riqui Puig (20 años) es parecido al de Aleñá, con una larga trayectoria en la cantera azulgrana, donde llegó a los 14 años procedente del Jabac. Ha ido saltando categorías hasta proclamarse campeón de Europa juvenil la temporada 2018-19. Señalado por ser un producto típico de la Masia, Riqui Puig se ha tenido que ganarse a muchos incrédulos que le acusaban de poco físico para rendir a un alto nivel, una situación que ya vivieron Iniesta o Xavi. Riqui Puig ha jugado esta temporada en el Barcelona B en Segunda División B. Ha sido una de las piezas claves para que el equipo de García Pimienta se asiente en los primeros puestos de la clasificación hasta que se paró por el coronavirus. Puig ha tenido algunos minutos en el primer equipo pero jamás ha tenido continuidad. Solo ha estado llamando a la puerta del Camp Nou con insistencia y ahora es cuando se abre. Durante estos últimas semanas ha recibido varias ofertas pero su apuesta es clara: Solo Barça.

Ahora, estos dos jugadores tienen la oportunidad de dar un nuevo salto en su carrera, en su sueño de consolidarse en el Camp Nou. Es una tarea compleja y solo los elegidos logran su propósito.