El Ajax pone precio

El Ajax de Amsterdam es tradicionalmente un club vendedor. Si años atrás traspasaba a sus mejores futbolistas por un precio moderado, se ha sumado a la vorágine alcista del mercado como el resto de clubs. El botón de muestra lo tenemos en lo que aconteció con el central colombiano Davinson Sánchez. Hace dos temporadas pagó por él 5 millones de euros al Atlético Nacional y el año pasado lo traspasó al Tottenham por 45 millones. Una plusvalía extraordinaria.

Overmars, la clave

Ahora, otro central del Ajax se ha convertido en objeto de deseo del FC Barcelona, que ha visto en la evolución del joven Matthijs de Ligt la solución perfecta para solucionar un problema que se avecina: si Samuel Umtiti ha de pasar por el quirófano, se perderá cuatro meses de competición.

El Barça querría a De Ligt para la próxima ventana de fichajes, enero, a pesar de que no tenía prevista ninguna incorporación. Atlético y maduro a pesar de haber cumplido los 19 años en agosto, el internacional de Ronald Koeman ha asumido la capitanía del Ajax, su equipo. Una muestra de su capacidad de liderazgo y mando.

Su precio, según los valores del mercado actual, sería de 50 millones de euros. Una cantidad que irá en aumento a medida que el jugador vaya quemando etapas.

Ahora está por ver si el secretario técnico de Ajax está por la labor de desprenderse de uno de los pilares del equipo en plena temporada, compitiendo tanto en la liga holandesa como en la Champions League. Mark Overmars, ex jugador del FC Barcelona y secretario técnico del Ajax, tiene la llave.

Tanto para De Ligt como para el futuro de Frenkie de Jong, el pivote ajacied. Este último está en la agenda del FC Barcelona desde que Robert Fernández recomedara su fichaje.  Es un centrocampista por el que también se han interesado vívamente los mejores clubs de Inglaterra, donde se afirma que Txiki Begiristain le ha hecho una oferta al Ajax irrechazable: 80 millones ahora y se queda en Amsterdam hasta final de temporada. Todo para asegurarse su fichaje.

Dado que todo es una cuestión de oferta y demanda, si el FC Barcelona desea reforzarse con los talentos emergentes del Ajax, no tendrá más remedio que gastarse un mínimo de 130 millones de euros. Para compensar este gasto, si finalmente llega a producirse, el Barça tendrá que volver a demostrar que es un club vendedor. Este último verano ingresó más que gastó.