Agüero: "Cuando pregunté por los chicos con los que me juntaba, uno estaba muerto"

Agüero quería y quiere estar en el Barça. En una entrevista a 'El País', el delantero argentino reafirmó su deseo de triunfar vestido de azulgrana y no está ni mucho menos arrepentido de haber fichado este mismo verano. Ni siquiera tras la salida de su amigo Leo Messi.

"Vamos a ser sinceros. ¿Qué jugador no quiere estar en el Barça? Yo te diría que a la mayoría de los futbolistas les gustaría vestir esta camiseta, por más que el Barça esté bien o mal. Llegué con la expectativa de jugar con Leo y de que se armara un buen equipo, que era lo que el club trataba de hacer. Cuando me llamaron pensé: 'Me da igual lo que me paguen. Me pongo bien y voy a ayudar al equipo en lo que más pueda'", indicó Agüero.

El delantero argentino venía con la idea de jugar junto a Leo Messi, por eso su salida fue un 'shock' para él: "Fue un momento de shock. Él estaba muy mal. Cuando me enteré no lo podía creer. Ese sábado lo fui a ver a su casa. Y, por mi personalidad, como no le veía bien, intentaba hacer que se olvidara de lo que había pasado. Veía que estaba medio apagado y lo intentaba distraer. Le contaba de mi equipo de eSports. Y las cosas que estábamos haciendo".

Así, en lo deportivo, Kun Agüero quiere ir poco a poco. Sabe que acaba de volver de lesión y que necesita rodaje, pero está dispuesto a ayudar desde ya al equipo, ya sea desde el banquillo o como titular: "Solo te puedes considerar titular cuando haces las cosas bien y ayudas al equipo. Si no, no. Y eso es en lo que pienso. En ayudar al equipo con algún gol cada vez que me toque jugar. Más allá de los cambios que pasaron, que entre ellos está la salida de Leo".

Además, el argentino también se acordó de su maravillosa época vivida en Manchester, donde se hizo un nombre y coincidió con Guardiola: "Nunca tuve problemas con Guardiola. Jamás discutí con él. Sí tuvimos que aclarar cosas. Cuando llegó, como no nos conocíamos, tuvimos una etapa un poco de tanteo. Los últimos tres años fueron fantásticos. Nada que decir. Es un entrenador que siempre quiere el máximo".

Preguntado por qué le faltó para convertirse en uno de los mejores del mundo, Agüero recurrió a un famoso trofeo: la Champions. "Muchas veces pensé qué era lo que me faltaba. Y un día le pregunté a Leo. Me dijo que para ganar el Balón de Oro tenía que ganar la Champions. Y tiene razón. Jugué grandes temporadas, metí muchos goles y gané muchos títulos, pero no estaba en la final de la Champions", sentenció.

Por último, el argentino habló de sus amigos de la infancia y dejó un titular terrible: "Tenía 16 años. Cuando pregunté por los chicos con los que me juntaba, uno estaba muerto, el otro preso, a otro lo buscaba la policía. Chicos de 15 años. Todavía mantengo contacto con algunos de mis amigos. Seguimos hablando, más de 20 años después"