Historia SPORT

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Otro 21 de agosto para la historia en La Catedral

Las puertas de San Mamés volverán a abrirse a los aficionados del Athletic Club 108 años exactos después de la inauguración del estadio

El Barça será el primer rival que los fieles seguidores rojiblancos podrán ver en directo desde el 1 de marzo de 2020

El tour por San Mamés con Álex Berenguer antes de la final de Copa

El tour por San Mamés con Álex Berenguer antes de la final de Copa / You First Sports Press

Jordi Carné

Jordi Carné

Las historias de los clubes de fútbol no se entenderían sin los momentos especiales que las han construido y articulado. El Athletic Club es único por muchos motivos: su peculiar filosofía deportiva, el arraigo de una afición incuestionablemente fiel, la negativa a sucumbir en todos los sentidos a las sabrosas vicisitudes del fútbol moderno... Y su estadio, evidentemente. San Mamés es uno de los feudos más singulares del mundo. De esos a los que los más entusiastas del rey de los deportes tienen que acudir una vez en su vida, como mínimo.

El 21 de agosto es una fecha importante para La Catedral. Ese día, en 1913, el antiguo San Mamés acogió su primer partido, el que enfrentó al Athletic y al Racing de Irún para dar el pistoletazo de salida a un torneo triangular en el que también participó el Shepherd's Bush FC inglés. El encuentro finalizó con empate a uno y el tanto local se lo apuntó Rafael Moreno Aranzadi, más conocido como Pichichi, el futbolista que pone nombre al premio anual al máximo goleador de la Primera División española.

San Mamés recibe a un Barcelona que sueña con seguir ilusionando

San Mamés recibe a un Barcelona que sueña con seguir ilusionando / EFE

108 años exactos después, San Mamés –ahora el nuevo– volverá a vivir una velada especial. La del retorno de la carismática y devota afición rojiblanca a su ‘casa’ tras 538 días y 26 partidos. Los leones van a contar con el aliento de sus seguidores y dejarán atrás un año y medio de silencio forzado por la dichosa pandemia del coronavirus, que lo ha trastocado todo e incluso se ha atrevido a enmudecer temporalmente un estadio que nunca había dejado de rugir. Aunque el aforo será muy reducido y solo 10.595 socios acudirán a la cita, cualquier paso de regreso a la normalidad –la vieja, en este caso– será bienvenido. Y más en Bilbao, donde la gente no nace con un pan bajo el brazo, sino que lo hace con una camiseta del Athletic.

No podría haber mejor rival que el FC Barcelona, uno de los visitantes más tradicionales de La Catedral, para una noche que más allá del resultado deportivo será sustancial para un estadio que, antes de ser remodelado, tenía una tribuna que se construyó ‘gracias’ al club azulgrana. A partir de 1961, la conocida como “Tribuna de la Misericordia” se pasó a denominar también “Tribuna Garay” por el hecho de haber sido fabricada parcialmente con las seis millones de pesetas conseguidas por el traspaso de este jugador al equipo culé. Una anécdota más de una relación entre Barça y Athletic que ha vivido todo tipo de momentos y situaciones. Y que hoy escribirá un nuevo capítulo histórico.