CHAMPIONS LEAGUE

Kevin Möller: "Me emocioné cuando el Palau coreó mi nombre"

Kevin Möller ya es decisivo en el Barça Lassa

Kevin Möller ya es decisivo en el Barça Lassa / VALENTÍ ENRICH

David Rubio

David Rubio

Kevin Möller apenas ha necesitado cuatro meses para demostrar de lo que es capaz en la portería del Barça Lassa, club al que llegó el pasado verano después de disputar cuatro temporadas en las filas del Flensburg-Handewitt, con el que se enfrentó en alguna ocasión a su actual equipo.

El danés habló con SPORT antes de viajar a Kielce, donde el FC Barcelona Lassa jugará este sábado a las 18.00 horas ante el equipo que dirige Talant Dujshebaev, que marcha segundo en el Grupo A de la Champions a solo dos puntos de los blaugrana.

¿Cómo se encuentra en el equipo y en la ciudad?

Me han recibido con los brazos abiertos y estoy muy a gusto en el vestuario. Y encantado con Barcelona, porque el clima es alucinante. Cuando me levanto y veo que seguimos a 15 grados, miro al armario y pienso, ¿para qué he traído tanta ropa de invierno?

¿Cómo fue su fichaje?

Rapidísimo. Estaba tratando de ver opciones cuando el Barcelona contactó conmigo y ahí se acabaron mis dudas. Hasta me puse nervioso, porque era un sueño desde pequeño. Tardé un día en decidirme. Mis dos equipos favoritos eran el Flensburg y el Barça, así que imagínate.

¿Habló con Lasse Andersson

¡Claro! Le dije que había firmado con el Barça y se alegró mucho, porque así no sería el único danés. Y ahora también tenemos a Casper (Mortensen).

¿Ha sido un hermano mayor?

Sí. Me ha ayudado a encontrar piso, con el móvil, con el idioma, a moverme por la ciudad... Pero ahora ya voy ejerciendo yo de hermano mayor (ríe).

¿Qué le parece este Barça?

Es uno de los mejores equipos del mundo. El nivel de los entrenamientos es muy intenso y disfruto mucho. El primer día estaba nervioso. ¿Daré mi mejor nivel?, pensaba. Ahora estoy bastante satisfecho.

¿Quiénes han sido sus ídolos? 

Jan Holpert (alemán) y David Barrufet, así que imagínate lo que supuso que él me firmase el contrato. Cuando me dio la mano la primera vez, pensé, buff, ¡es Barrufet! Esa alegría que sentí no la olvidaré nunca.

¿Cómo se lleva con Gonzalo?

Es uno de los mejores tipos que he conocido aquí. Siempre está dispuesto a ayudarte y nos complementamos muy bien. Los jugadores de pista tienen muchos compañeros con los que hablar, pero yo solo tengo a Gonzalo. Que haya buen rollo entre los porteros es clave para cualquier equipo.

Ese dicho de que los porteros están ‘tocados’ no va con usted...

Soy bastante tranquilo, también en mi vida diaria. A ver, soy bastante emotivo, pero muy introvertido y me lo guardo para mí. Gonzalo se parece bastante a mí y quizá por eso nos llevamos tan bien. 

En el Flensburg lo entrenaron dos excentrales (Vranjes y Machulla), pero Xavi Pascual era portero

Es una diferencia enorme, porque él comprende tus sensaciones y sabe gestionar a la perfección los cambios, sabe perfectamente cuándo son positivos. Otros entrenadores te cambian a los 10 minutos y punto. En cambio, él habla contigo y te da más confianza. Y la portería es un juego de psicología. La pena es que aún no hablo bien el español, pero prometo que en unos meses lo controlaré.

En Flensburg llegó a tener seis compañeros daneses...

Eso es un plus, porque los escandinavos nos entendemos muy bien y siempre es positivo compartir vestuario con ellos. De todas formas, yo no miro el carné y me encanta mezclarme con gente de otras culturas. 

Usted está solo en la portería. ¿Se puso nervioso en su debut?

Estaba tranquilo, pero sonó el himno del Barça y me puse un poco nervioso. Pensé, vaya, esto es especial. Después conseguí centrarme en mi trabajo.

¿Cómo vivió cuando el Palau coreó su nombre ante el Vardar

Me llegó al corazón. Me emocioné bastante y mira que no soy una persona excesivamente impresionable.

¿Tiene claro ya que el gran objetivo es la Champions?

¡Desde el primer día! Europa es la gran prioridad, pero si no preparas a tope los partidos de Liga, lo pagas la Champions. Pasqui nos motiva e incluso nos dice que si no ganamos, tendremos pequeños problemas en el siguiente entrenamiento (ríe). 

Este sábado visitan al Kielce, un equipazo al que ganaron en el Palau

Es uno de los mejores equipos de nuestro durísimo grupo. Si ganamos en Kielce, tendremos cuatro puntos de ventaja sobre todos los perseguidores  a falta de cinco jornadas. ¿Sabes? ‘Odio’ un poco a Talant, porque yo era del Barça y recuerdo aquella rivalidad con el Ciudad Real. Ya en serio, es un gran técnico y el partido será muy complicado.

¿Es tan vital acabar primeros?

Si ganamos en Kielce y después al Brest en el Palau, estaríamos más cerca, pero ojo, que después tendríamos unos cuartos muy duros antes de la Final Four. Ese colchón de cuatro puntos nos permitiría algún fallo, aunque siempre salimos a ganar. 

¿Estará en el Mundial con Dinamarca?

No lo sé. Niclas (Landin) tiene el puesto asegurado y creo que me jugaré la otra plaza con Jannick Green (Magdeburgo). Lo sabremos en breve. Ojalá, pero no depende de mí y tengo que centrarme en lo mío.

¿Cuáles son sus objetivos?

Ganarlo todo. No tengo ninguna duda de que estamos capacitados para ello. Y a nivel personal, seguir progresando y ayudar al máximo al equipo siempre que salga a la pista.