Gonzalo: "Vamos a salir a ganar el partido"

El Barça ya vela armas de cara al partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions con la Final Four de Colonia como gran objetivo y con cuatro goles de renta tras la gran victoria por 29-33 en la ida en la pista del SG Flensburg-Handewitt.

Y como viene siendo habitual a lo largo de la temporada, el meta Gonzalo Pérez de Vargas está llamado a jugar un papel importante para impedir que los Jim Gottfridsson, Emil Jakobsen, el futuro azulgrana Hampus Wanne y compañía opten a la remontada este jueves a las 18.45 horas en el Palau.

El toledano se sinceró con SPORT a escasas horas de uno de los partidos más importante para el nuevo proyecto que dirige Carlos Ortega que ya ha conquistado la Copa del Rey, la Liga Asobal, la Supercopa de España y la Supercopa de Catalunya.

¿En qué momento se encuentra el equipo en su evolución?

Seguramente en el punto más álgido después de unos primeros meses complicados. Perdimos la final de la Super Globe siendo inferiores al Magdeburgo y después tuvimos un período complicado con tres partidos seguidos sin ganar en Champions, pero desde que ganamos al FC Porto en el Palau hemos sacado los partidos con holgura en Europa y con mejor juego. Y en la Liga, a excepción de dos o tres creo que también hemos hecho un trabajo serio en casa y fuera ganando con más claridad, que era un tema negativo de la temporada. Por eso creo el partido de Flensburg demuestra que el equipo sigue teniendo hambre, que está a tope pese a las bajas importantes y que estamos en un buen momento para este partido de vuelta.

¿Cómo vivió el empate del sábado en Antequera?

No había televisión, así que lo seguimos en 'mismarcadores'. Para mí es un resultado anecdótico, aunque obviamente y a pesar de las bajas creo que somos un equipo superior. Se juntó un poco todo, que no estuviese Carlos (Ortega), que faltase una parte importante del equipo... Ahora el objetivo es meterse en la Final Four y si para eso había que arriesgarse a que pasase este resultado, a nivel interno ya habíamos dejado claro que el foco hay que ponerlo en la vuelta de la Champions.

Con una plantilla más corta, ¿era necesario humanizar al equipo en la Liga para redoblar las opciones en Champions?

A ver, si podemos ganar por 15 estamos obligados a hacerlo, pero hemos hecho partidos muy completos en la Asobal. El problema es que quizá no hemos sido tan constantes como en Europa y eso nos ha costado tener partidos muy ajustados. Por ejemplo, el partido de Anaitasuna en el que ganamos la Liga lo teníamos controlado y ya sea por relajación o por activación del rival no fuimos capaces de cerrarlo y al final se nos complicó, pero eso no hay que achacarlo a que la plantilla sea más corta. Es una tarea en la que hemos ido mejorando, pero de cara a las próximas temporadas nos tenemos que volver a exigir que si podemos ganar por 11 en vez de por 10, pues hay que hacerlos. Que tenemos que ser más constantes y más regulares en la Asobal es un hecho.

¿Está satisfecho con su temporada?

Personalmente creo que es una temporada buena. Quizá he tenido más responsabilidad y en ese sentido se ha solventado con creces. Estamos cerca de cumplir el objetivo principal, que es llegar a la Final Four y mi participación ha sido importante y buena. Ahora sí que me gustaría estar en Colonia y mantener este nivel para tener más opciones de repetir título.

Por cierto, usted acaba contrato en 2023. ¿Le gustaría seguir más tiempo en el Barça?

Bueno, es un tema que llevamos con tranquilidad. Tenemos todos las ideas claras tanto el club como yo y cuando sea el momento de anunciar algo lo haremos.

¿Qué importancia tiene para el proyecto la renovación de Dika Mem hasta 2027?

Es el movimiento que da estabilidad a este proyecto y a este equipo. Dika es muy importante dentro y fuera de la pista, es el líder de este grupo en el presente y en el futuro. Esto da tranquilidad a los jugadores que están aquí, a los que tengan que venir, al staff y es básico para el futuro de la sección.

Tras perder la Super Globe y con todos los condicionantes de la temporada, ¿esperaban estar ahora a este nivel?

Siempre tuve claro que la plantilla era casi la misma que acabó jugando la Final Four hace un año. Es cierto que hubo cambios a nivel de estructura y de staff, pero sabía que si hacíamos las cosas bien tendríamos opciones de ganar otra vez la Champions. Para eso hemos tuvimos que sufrir, supimos hacerlo y eso nos ha hecho crecer como equipo y nos ha permitido ganar la Copa del Rey, las Supercopas, la Liga. Sabemos que si estamos a un buen nivel, seguimos teniendo plantilla para ganar a cualquiera.

¿Cómo ha sido el proceso del grupo de creer en Carlos Ortega?

Desde el principio hemos visto que es un entrenador que trabaja, que prepara mucho tanto los entrenamientos como los partidos y que tiene las ideas claras. Obviamente para él tampoco ha sido fácil. Llegó a un equipo que tenía todos los mecanismos, una manera de trabajar durante muchos años y que venía de hacer una temporada perfecta. E ir cambiando estas cosas es muy difícil. Ha sido un proceso natural y ahora cada vez estamos más cómodos. Él también, porque va conociendo mejor todo y va ganando confianza con los jugadores. De hecho, ahora tenemos que cerrar la eliminatoria del jueves para considerar la temporada como correcta con opciones de hacerla sobresaliente en Colonia.

¿Cómo valora la respuesta del grupo en Flensburg sin Fàbregas ni Frade?

Las lesiones forman parte del deporte, aunque las dos son en el puesto de pivote y en un momento clave de la temporada. Son bajas sensibles, sobre todo la de 'Ludo', porque ha sido ahora. Lo digo porque a lo de Luís por desgracia nos hemos ido acostumbrando. Ahí jugadores como Thiagus (Petrus) o Ali (Zein) se multiplicaron en defensa y también en ataque. La salida del equipo en Flensburg demuestra eso, que seguimos teniendo hambre a pesar de la gran temporada pasada. Incluso sin hacer buenos partidos, quitando al Magdeburgo, en todos los que no hemos ganado estuvimos muy cerca. Sabemos que si encadenamos esas fases de juego en las que somos brillantes, seremos un problema para cualquiera.

En Flensburg supieron frenar a un crack como Gottfridsson y a la primera línea, pero les hicieron mucho daño los extremos...

La estrategia era clara. Casi todas esas acciones eran superioridades suyas, decidimos hacerlo así y yo podría haber estado más acertado en esos lanzamientos desde los extremos, sobre todo en la segunda parte. Les obligamos a jugar a eso. Si hubiese sido capaz de sacar dos o tres balones más estaríamos casi clasificados. Tengo que aportar un poco más y no tengo ningún problema en que me tiren desde los extremos si eso es lo que hemos planificado y sobre todo si estamos defendiendo bien a la primera línea.

¿Le preocupa un exceso de confianza de cara a la vuelta?

No, porque el objetivo claro es ganar el partido y vamos a salir a por la victoria. No tenemos que jugar con el marcador y Carlos ha sido muy repetitivo en eso esta semana. Hicimos un gran partido allí, pero no podemos pensar en eso. Lo tenemos claro y los jugadores más importantes estamos repitiendo que hay que centrarse en ir a tope el jueves, que es el último partido de Champions en casa. Queremos ganar, disfrutar y enviar el mensaje de que si nos quieren ganar lo van a tener difícil. No creo que haya relajación. Eso sí, habríamos firmado todos este +4 en unos cuartos en Alemania y con la vuelta en casa.

Con un Barça-Madrid de baloncesto en las 'semis' de la Euroliga, ¿teme que no responda el Palau?

Tienen que saber que los necesitamos y da tiempo a ver las dos cosas. A las ocho y veinte habremos acabado, así que hay tiempo de coger unas pizzas o lo que quieran para ver el basket en casa, que empieza a las nueve. Les diría que puede ser una semana grandiosa para el barcelonismo con la opción de ganar dos Champions (fútbol femenino y baloncesto) y de que nosotros nos metamos en la Final Four. Y el fútbol sala ya ha ganado la Champions. Puede ser una semana extraordinaria, pero nosotros necesitamos su apoyo y es el único partido que pueden ver aquí, en el Palau. Entiendo perfectamente que las peñas y los grupos de animación estén en Belgrado, pero los que no han podido viajar y todos los aficionados no deberían perderse este partidazo por ritmo, por la calidad de los jugadores y por la importancia que tiene.