Ortega: "Llegamos a la Final Four con los deberes hechos y estoy tranquilo""

Carlos Ortega, entrenador del FC Barcelona, atendió a los medios de comunicación antes de partir este miércoles hacia Colonia donde este fin de semana se disputa una potente Final Four con los cuatro mejores equipos de balonmano del mundo: Barça, THW Kiel, Lomza Vive Kielce y Telekom Veszprem. Los azulgranas de mediarán al conjunto alemán, mientras que el conjunto polaco y el húngaro se jugarán la otra plaza en la final. 

El mister azulgrana confesó que el equipo llega a esta nueva Final Four "en un buen momento. Hemos tenido un par de problemas esta semana con Thiagus (Petrus) y Luca (Cindric), pero han entrenado con normalidad y llegamos bien. Veo al equipo con fuerza, ganas y creo que podemos competir ante cualquier equipo".

En cuanto a las importantes bajas con las que llega el Kiel a Colonia, que no podrá contar ni con Hendrik Pekeler ni con Sander Sagosen, Carlos no tiene claro que sea una gran ventaja: "Nunca se sabe, es un león herido. El Kiel es un gran equipo, juega muy bien, todos los jugadores son importantes y últimamente han dado un paso adelante Miha Zarabec y Nikola Bilyk que en los últimos partidos ha estado fantástico".

El míster blaugrana considera que el equipo llega en un momento óptimo: "El objetivo es este. Planificar la temporada para llegar a la Final Four en el mejor momento. Estamos bien, todo el equipo disponible y esto es muy difícil tras una larga temporada. Llegamos en un buen momento, si es el mejor lo hablaremos al final de la Final Four".

Sobre la presión de ser el Barça

Ortega piensa que la presión es algo intrínseco a un equipo como el Barça: "Tenemos que pensar en hacerlo lo mejor posible. Un equipo como el Barça tiene la lógica presión por la obligación de ganar títulos. El objetivo era llegar a la Final Four y lo hemos cumplido, a partir de ahí, a ver qué pasa en Colonia".

No esconde la ilusión que tiene él y el equipo para conseguir algo que nadie ha logrado antes en la historia del balonmano, ganar dos Champions consecutivas: "Quizás nos puede restar presión llegar como campeón, pero los récords están para batirlos y ¿por qué no puede ser este año?", se preguntó el técnico azulgrana.

Reconoce que no ha sido una temporada fácil

Sensaciones personales: "No ha sido una temporada fácil. Pero creo que estamos con las espadas en alto y con todas las aspiraciones. En el Barça es más importante estar pendiente de otras cosas que dedicar una hora más a estudiar al rival".

Sin duda una de las claves del partido serán las porterías con Gonzalo Pérez de Vargas y Niklas Landin: "La portería será muy importante. Si miramos atrás en las Champions anteriores la portería ha sido definitiva. Sin duda es muy importante para nosotros y la necesitamos".

Primera vez en el banquillo del Barça en una Final Four

Como jugador ha ganado seis Champions y como entrenador ya ha jugado una Final Four, pero todo cambia en el Barça: "Cuando empiece la Final Four lo sabré. Me siento bien, siento la presión lógica de jugar una Final Four pero llegamos con los deberes hechos y estoy tranquilo. Menos nervioso que mañana y más que ayer, seguro".

Para Carlos, las claves de la semifinal ante el Kiel será "la portería" y en cuanto a lo más destacable de los equipos en la Final Four asegura que "Del Kiel destaco el ataque, que hacen es diferente y difícil de defender además de su contrataque, en cuanto al Vezprem su buena defensa y su rápido contrataque y el Kielce tiene mucha capacidad de resolución sobre todo con Alex Dujshebaev".

Pronóstico incierto

Reconoce que "una FInal Four es como echar una moneda al aire. Hemos tenido tiempo para masticar al Kiel y vamos a ver si somos capaces de ganarla. Nos haría una gran ilusión".

Considera que "es el evento más bonito de balonmano, llevamos dos años sin público y nos hace muy bien que haya público".

En cuanto a tener que motivar al equipo, Ortega fue contundente: "Estos jugadores ya tienen el culo pelado. No hace falta el ejercicio de motivación. Porsi solos ya se motivan. Por parte del entrenador hace más falta motivarles para la Liga. Aquí todo el mundo quiere jugar y tengo el problema que tengo que dejar a un jugador fuera", recordó.