Mirotic, compromiso total con el Barça

Desde aquella famosa cena del pasado mes de marzo en Miami con Josep Maria Bartomeu en la que empezó a fraguarse el fichaje de Nikola Mirotic por el Barça, el exmadridista cautivó a los dirigentes azulgranas por su fidelidad y por su capacidad de compromiso. 

El presidente azulgrana ha destacado a sus más allegados que también le sorprendió la enorme madurez del fichaje estrella del FC Barcelona más ilusionante. ‘Niko’ siempre ha tenido las ideas muy claras. Las tuvo en 2014 para marcharse a los Bulls y asumir su cláusula de 2,5 millones de euros mientras el Madrid suspiraba por retenerlo y las ha tenido este verano renunciando a ofertas de la NBA para las tres próximas temporadas por 45 millones de dólares para cobrar unas tres veces menos.

Desde el primer momento, el de Podgorica expresó a la planta noble del Barça su deseo de convertirse en un jugador determinante en la Liga Endesa y en la Euroliga. De hecho, en una reciente conversación telefónica explicó a Pesic que se iba a poner manos a la obra de inmediato... Dicho y hecho.

Sin más las vacaciones 

Nikola Mirotic disputó su último partido oficial el pasado 25 de mayo en la derrota de sus Milwaukee Bucks por 100-94 ante Toronto Raptors en una final de la Conferencia Este que se saldó por 4-2 para el conjunto canadiense de Marc Gasol y Serge Ibaka que acabó conquistando el primer ‘anillo’ de su historia.

Pues bien, el hispanomontenegrino comunicó al FC Barcelona que ya ha tenido suficientes vacaciones y desde el día siguiente a su presentación se está entrenando en solitario en la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí pese a que el equipo no iniciará la pretemporada hasta el próximo 20 de agosto.

De hecho, esta ilusión por adaptarse cuanto antes a los sistemas de Pesic y a sus nuevos compañeros ha sido la causante de una <strong>decisión tan dura como la de decir 'no' a la selección española para el Mundial de China</strong>.

Para ese 20 de agosto, Mirotic quiere estar en plena forma y no va a escatimar esfuerzos de cara a este ambicioso objetivo. Tras la calamitosa y recientísima experiencia con Kevin Séraphin en los dos cursos pasados, en el club ‘alucinan’ con la profesionalidad y la felicidad que está exhibiendo Mirotic, una estrella de enormes dimensiones que se comporta en el día a día con la normalidad de un ‘currante’.

Feliz con su familia  

Después de vivir dos traspasos en los últimos dos años, Mirotic y su familia tuvieron que a cambiar su residencia de la cosmopolita Chicago a la pintoresca y peligrosa Nueva Orleans para volver al norte a la aburrida Milwaukee, también a orillas del Lago Michigan y a hora y media hora en coche de la capital de Illinois.

Su mujer Nina y su hijo Aleksej, de cinco años, no estaban a gusto con tanta mudanza y han jugado un papel importante en la decisión del ala-pívot de regresar a Europa. Además, ahora la familia tiene un nuevo miembro, un pequeño de apenas tres meses que no estuvo en la presentación de su padre.

De forma paralela a sus sesiones diarias de trabajo, los Mirotic ya están buscando piso de forma muy activa en Barcelona en una muestra más de sus deseos de instalarse y adaptarse a su nuevo destino con la mayor celeridad posible.

Debut lejano 

Pese a la ilusión del hispanomontenegrino por disputar su primer partido oficial con el FC Barcelona, lo cierto es que <strong>aún tendrá que esperar bastante para empezar “a ganarse a la afición del Palau”</strong>, tal y cómo él mismo destacó el jueves en ‘Barça TV’.

De hecho, la primera competición estatal no llegará hasta el mes de septiembre y será la Supercopa Endesa, con la participación del cuadro azulgrana como campeón de Copa, del Real Madrid como ganador de la pasada Liga Endesa, del Valencia Basket (vencedor de la pasada Eurocup) y del Montakit Fuenlabrada como organizador. Y para su debut en el Palau todavía tendrá que esperar más.