Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Baloncesto

¡Lío en Manresa! Los jugadores entrarán al Nou Congost en furgonetas sin identificar

Grupos de manifestantes están bloqueando los accesos al pabellón del Baxi Manresa para impedir que se dispute el partido

Manifestaciones a las afueras del Nou Congost

Manifestaciones a las afueras del Nou Congost / X

Iker Kind

Iker Kind

El partido entre Baxi Manresa y Hapoel Jerusalén se ha escapado totalmente de lo deportivo. Coincidiendo con la huelga general de este 15 de octubre, decenas de manifestantes se han situado en las inmediaciones del Nou Congost para impedir el acceso de los jugadores al pabellón y evitar, de esta forma, que se dispute el encuentro entre ambos equipos.

Más de siete furgones de la Brimo han llegado en las últimas horas para reforzar el dispositivo policial. Según ha informado 'Regió7', las plantillas de los dos equipos accederán al pabellón a través de un cordón policial ya activo y mediante furgonetas sin identificar. El objetivo es no ser reconocidos a simple vista y minimizar el impacto que puede provocar la llegada de los protagonistas.

Aficionados del Baxi Manresa en las gradas del Nou Congost

El Baxi Manresa no podrá contar con su afición / acb Photo / Joaquim Alberch

Durante esta tarde, a medida que se acerque el partido, se prevé que se una más gente a la manifestación, que se ha reorganizado para evitar principalmente "la llegada del equipo israelí". Los manifestantes están bloqueando una de las vías de acceso al Congost. La idea es que, desde Farina Albareda, se dirijan todas las personas a pocos metros del recinto deportivo.

Con pancartas de "Quiere al basket, odio el genocidio, boicot a Israel", los protestantes han ido avanzando durante la mañana con dirección al pabellón, aunque el dispositivo de los Mossos ha impedido que lo hicieran a pocos metros. Cabe recordar que el partido fue declarado de "alto riesgo" por la Comisión Antiviolencia del Ministerio del Interior.

Finalmente, se decidió que el encuentro se jugara a puerta cerrada, aunque los grupos de animación y el propio Ayuntamiento de Manresa se habían posicionado a favor de la suspensión del encuentro. Sin embargo, el club se negó a no presentarse al partido por las duras sanciones que podría conllevar la no disputa de la jornada 4 de la Eurocup.