El Barça, confinado y sin entrenar mientras se realiza test

Saras y sus jugadores, a la espera de nuevas pruebas

Saras y sus jugadores, a la espera de nuevas pruebas / JAVI FERRÁNDIZ

Xavi Martínez Olivar

Xavi Martínez Olivar

En la madrugada de este domingo se anunciaba que un miembro del staff del Barça había dado positivo por COVID-19. Dado que ello se unía a los positivos de dos de los técnicos (Sarunas Jasikevicius y Darius Maskoliunas) y siguiendo el protocolo sanitario, la ACB decidió aplazar el encuentro. La plantilla azulgrana -pese a haber dado negativo en los test PCR- quedó confinada en sus domicilios. Ayer y el próximo martes todos volverán a pasar los preceptivos test y según los resultados se sabrá si puede volver a entrenar y a jugar lo antes posible. Recordemos que el jueves, el Barça debe visitar al Zenit de Xavi Pascual. El fin de semana los azulgranas descansan en la Liga Endesa.

Este aplazamiento no fue el único de la jornada ya que también se decidió hacer lo propio con el Herbalife Gran Canaria-Real Madrid por un positivo en el conjunto isleño. Con estos dos partidos ya son cinco en las cuatro primeras jornadas de la Liga Liga Endesa que han debido ser reprogramados. Lo fueron en la primera jornada (ya se pudieron volver a disputar) el Obradoiro-Fuenlabrada, Iberostar Tenerife-Casademont Zaragoza y Joventut-Unicaja.

El calendario

A diferencia de esa primera jornada en la que se recolocaron con facilidad los encuentros aplazados a partir de ahora surgen los previsibles problemas que se vislumbraban en el calendario con el inicio de las dos principales competiciones europeas: la Euroliga y la Eurocup. Eso  reduce las opciones de encontrar fechas libres para los encuentros que deban ser aplazados por positivos en COVID-19 en todas esas competiciones. Además hay que recordar que en determinadas semanas durante la temporada la Euroliga tiene programadas jornadas dobles. Encaje de bolillos.

Los protocolos

Los protocolos de actuación ante los casos positivos que se puedan dar en ACB y Euroliga son un tanto diferentes, teniendo en cuenta que en la máxima competición continental hay representados equipos de diez países con realidades sanitarias diferentes.

En la ACB, que se rige por el protocolo marcado por el Ministerio de Sanidad a través del CSD, se realizan test 72 horas antes de los partidos. Si hay un positivo se aisla al equipo y se realiza un nuevo test al resto de la plantilla. Si se repite el positivo de un membro éste queda aislado. Si 48 horas después aparecen más positivos en el nuevo test adicional el partido queda aplazado. En el caso específico del Barça, la totalidad de los jugadores habían dado negativo salvo Saras y Maskoliunas. Al realizarse el nuevo test y aparecer ese tercer caso en el staff se decidió no disputar el encuentro provisto para ayer a las 12.30 h.

En la Euroliga también se realiza un test global a 72 horas de los partidos. Si surge un positivo se realizará un nuevo test colectivo.

La diferencia es que la Euroliga permite disputar a un equipo un partido mientras tenga un mínimo de ocho jugadores que hayan dado negativo y que, por tanto, estén libres de coronavirus. Un proceder que se entronca en la idea de dar margen de maniobra a los clubs para que puedan disputar sus partidos -todos evidentemente marcados por el protocolo sanitario pertinente como en la ACB- y que no se comiencen a acumular encuentros que convertirían en una quimera el poder disputar la temporada. Dos escenarios, pues, y un mismo problema: la maldita pandemia que afecta a  todos los sectores de la sociedad.