Lógico bajón azulgrana y... ¿preocupante?

El Barça ganó sus siete primeros partidos de noviembre y desde ahí lleva siete victorias y seis derrotas

En una plantilla más corta que el curso pasado, las bajas de Heurtel, Claver y Davies están lastrando al equipo

Thomas Heurtel sigue condicionando el marcado del Barça

Thomas Heurtel sigue condicionando el marcado del Barça / EFE

David Rubio

David Rubio

Pese a la importante victoria liguera del 27 de diciembre en la pista del Real Madrid, el FC Barcelona vive su primer momento difícil de la temporada sobre todo en la Euroliga.

Por diversas circunstancias, el equipo está protagonizando una cuesta abajo que lo ha llevado en Europa a perder los últimos tres encuentros y a sumar cinco derrotas en los últimos ocho tras haber saldado con victorias ocho de las nueve primeras jornadas (solo cayó en San Petersburgo ante el Zenit de Xavi Pascual).

En la Liga Endesa, el cuadro azulgrana dejó en anécdota la derrota en el Palau ante un gran Valencia Basket (90-100) y visitará mañana al Urbas Fuenlabrada tras ganar sus últimos cuatro duelos sin un Kyle Kuric que está aislado por el positivo de coronavirus de un contacto directo.

Calendario y bajas

El primer análisis revela que el Barça se ha quedado sin gasolina como consecuencia de las múltiples bajas y de un calendario ‘criminal’ que le ha hecho jugar ocho partidos en noviembre (cuatro ligueros y cuatro de Euroliga) y ¡12 en diciembre (siete en Europa y cinco en Liga)!

Y es que los datos no admiten discusión, ya que los blaugrana ganaron los siete primeros partidos de noviembre y en los últimos 13 han sufrido seis derrotas.

Además de que en verano solo llegó Nick Calathes y se dieron cuatro bajas (Malcolm Delaney en el estado de alarma y después Pau Ribas, Kevin Pangos y Ante Tomic), Víctor Claver lleva KO desde octubre por su fascitis y Thomas Heurtel apenas jugó en diciembre y ahora está ‘apartado’.

Si a ello se une que Brandon Davies lleva de baja por molestias en un gemelo y que Nikola Mirotic no jugó en Múnich por un problema personal, no parece extraño que el equipo se esté resintiendo sobre todo ante equipos muy físicos como el ASVEL Villeurbanne (80-68), el Maccabi (67-68), el Bayern (90-77) o en la Liga en el referido choque liguero ante los ‘taronja’.

Heurtel, clave

Sin Claver al menos hasta mediados de febrero, el inminente regreso de Brandon Davies se antoja vital para solventar los problemas de los que adolece el equipo en la ‘pintura’.

Wade Baldwin fue una pesadilla para el Barça en Moscú

Wade Baldwin fue una pesadilla para el Barça en Moscú / EFE

De todas formas, la llave de lo que pueda suceder en los próximos meses la tiene Thomas Heurtel, cuya marcha permitiría al Barça anunciar el fichaje de Leo Westermann (sin equipo tras ser ‘cortado’ por el Fenerbahçe) e incluso el fichaje de ese interior que mantiene huérfanos a los blaugrana bajo los aros.

Aunque en ocasiones se ha suplido con trabajo colectivo, es un clásico que los rivales se acerquen o superen los 10 rebotes ofensivos. Ese lastre se ha añadido en las últimas semanas a los problemas en la dirección, ya que cuando Calathes no tiene su día han de sustituirlo un Lea Bolmaro en formación o un Adam Hanga al que no se puede pedir más como base.

La defensa como ‘termómetro’

El sistema defensivo con continuos cambios y ayudas que ha impuesto Sarunas Jasikevicius obliga al equipo a estar a tope físicamente y entre el calendario y las ausencias el equipo ha dado un paso atrás que se ha traducido en los resultados.

Jasikevicius necesita al menos un refuerzo

Jasikevicius necesita al menos un refuerzo / EFE

En los siete primeros partidos de noviembre saldados con victorias el Barça recibió 68,1 puntos de media y en los 13 últimos esa cifra se ha elevado hasta 77. De hecho, en las dos últimas derrotas en la Euroliga es la primera vez que se han encajado más de 80 puntos en dos partidos seguidos (86 ante el Anadolu Efes en el enésimo 'partidazo' de Shane Larkin y 90 frente al Bayern).