Yulimar Rojas recupera la hegemonía mundial del triple salto en Madrid

Yulimar Rojas brilló con luz propia en la reunión Villa de Madrid

Yulimar Rojas brilló con luz propia en la reunión Villa de Madrid / EFE

EFE

La venezolana Yulimar Rojas, campeona mundial de triple salto en sala y al aire libre, recuperó en Madrid la hegemonía universal con la mejor marca de su vida en pista cubierta (14,92), mientras su compañera de entrenamientos la española Ana Peleteiro, sexta con 14,37, no acabó el concurso por molestias en la planta del pie izquierdo.

La pista de Gallur se llenó por primera vez (2.600 espectadores) en esta cuarta edición de la reunión Villa de Madrid, que había colocado todo su billetaje.

Era sólo la segunda competición en sala de Yulimar Rojas desde que en marzo de 2018 se proclamó en Birmingham (Reino Unido) campeona mundial de triple en pista cubierta y Peleteiro se alzó con la medalla de bronce.

En su regreso, el domingo pasado sobre la pista flotante, algo inestable, de Karlsruhe (Alemania), la venezolana terminó segunda, a seis centímetros de la española, que logró en esa reunión el mejor salto de su vida (14,51).

Campeona mundial al aire libre y bajo techo, Rojas sacó su orgullo de campeona y ya en su primer salto logró la mejor marca mundial del año: 14,92, mejorando en 13 centímetros su récord personal bajo techo, mientras Peleteiro no pasaba de los 13.99.

Rojas, arriesgando en el talonamiento en busca de los 15 metros, no mejoró ya su marca del primer salto, pero fue suficiente para batir con mucha holgura a la estadounidense Tori Franklin (14,57) y a la portuguesa Patricia Mamona (14,44).

Orlando Ortega sufrió su primera derrota de la temporada en 60 metros vallas. Por una centésima (7.57 el mismo registro que el chipriota Milan Trajkovic), el plusmarquista español se inclinó ante el estadounidense Jarred Eaton.

Sólo dos días después de encaramarse al primer puesto del ránking mundial -compartido con el estadounidense Grant Holloway- con sus 7.49 del mitin de Torun (Polonia), Orlando Ortega, actual subcampeón olímpico, sufrió su primera derrota del año en seis carreras.

El palentino Óscar Husillos, que el año pasado corrió los 400 en un registro asombroso de 44.92 que le daba la medalla de oro en los Mundiales de Birmingham -antes de ser descalificado por pisar fuera de calle-, demostró en Madrid que todavía está lejos de aquella forma.

Husillos ha empezado la temporada un mes más tarde de lo habitual -el Mundial de Doha es en octubre- y el déficit se nota: llegó tercero al último giro y no pasó de ahí. Venció con holgura Nathan Strother con 46.21 -mínima europea-, seguido del esloveno Luka Janezic (46.55) y del plusmarquista español, que acreditó 46.71, su mejor marca de la temporada pero lejos de su plusmarca (45.69).

El toledano Lucas Búa terminó cuarto con 46.99, a cuatro centésimas de la mínima, por delante del subcampeón olímpico de Londres 2012, el dominicano Luguelín Santos (47.83)

Adel Mechaal se convirtió en el séptimo atleta español que consigue mínima europea en 1.500, que es de 3:43.00, al clasificarse tercero con 3:42.53, y Mariano -cuarto con 3:42.62- también alcanzó el objetivo. En los campeonatos de España de Antequera habrá una dura pelea por las tres plazas europeas. La victoria fue para el keniano Bethwel Birgen con 3:40.17 por delante de Jesús Gómez (3:40.59), que ya tenía el requisito continental.

La carrera que remataba la reunión, los 800 metros, defraudó las expectativas porque el salmantino Álvaro de Arriba, capacitado para poner en riesgo el récord de España, tropezó con Guillermo Rojo y Pablo Sánchez-Valladares y los tres quedaron fuera de juego en la primera curva.

El keniano Cornelius Tuwei venció con 1:47.76 y el sevillano Kevin López, que regresaba a su distancia de casi toda la vida (ahora está en el 1.500), logró la mínima europea con 1:48.02, tercero.

La polaca Ewa Swoboda refrendó su liderazgo mundial en los 60 m lisos con un tiempo de 7.11 que le dio este viernes una nueva victoria sobre la holandesa Dafne Schippers, segunda con 7.18.

Doble campeona mundial de 200 metros, Schippers prestaba su imagen al cartel del mitin en su primera competición en España, pero no pudo estrenarse con victoria.

Swoboda, líder mundial del año con sus 7.08 del domingo pasado en Karlsruhe, marco diferencias con la holandesa en semifinales (7.21 frente a 7.26) y volvió a batirla con claridad en la final, en tanto que Jael Bestué y Estela García -cuarta y quinta- marcaron idéntico crono: 7.32, récord personal en ambos casos y exactamente la mínima europea requerida para Glasgow.

En el esprint masculino el estadounidense Mike Rodgers batió por una sola centésima (6.57 por 6.58) al eslovaco Jan Volko. El ecuatoriano Alex Quiñónez, quinto con 6.66, mejoró en 22 centésimas su marca personal, y Mario López fue el mejor español, sexto con 6.71, también récord personal.

La reunión Villa de Madrid deparó otra marca mundial del año: la rusa Anzhelika Sirodova, que compite como atleta neutral, ganó la pértiga con un salto de 4,91 metros.

El griego Miltiadis Tentoglu dominó la longitud con un salto de 8,23 metros que le convierte en candidato a medalla en los inminentes Europeos de Glasgow, y el uruguayo Emiliano Lasa voló más lejos que nunca bajo techo: tercero con 7.98.

Eusebio Cáceres, que tiene mínima europea del año pasado (7,97), no pasó hoy de los 7,79, sexto y segundo español en el concurso, porque Héctor Santos alcanzó los 7,90, a cinco centímetros del requisito para ir a Glasgow.

En el 3.000 Cristina Espejo, sexta con 9:05.31, se quedó a 31 centésimas de la mínima europea. Derramó lágrimas sobre la pista. Venció la etíope Alemaz Samuel con 8:43.76.