Jakob Ingebrigtsen, la gran sensación de los Europeos de Torun

El noruego, de solo 19 años, logró el primer 'doblete' de la historia en 1.500 y 3.000 metros

El menor de los Ingebrigtsen sigue destrozando registros y ya piensa en los Juegos de Tokio

Ingebrigtsen ha hecho historia en Torun

Ingebrigtsen ha hecho historia en Torun / AFP

David Rubio

David Rubio

El pasado domingo concluyó en la localidad polaca de Torun una nueva edición de los Campeonatos de Europa bajo techo marcados inevitablemente por la pandemia de coronavirus y por la consiguiente ausencia de espectadores en las gradas.

Y como casi todas las grandes citas quedan ligadas al menos a una figura, en esta ocasión el nombre que levita por encima del resto es evidentemente el noruego Jakob Ingebrigtsen con su flamante doblete en 1.500 y en 3.000 metros.

En los 51 años de historia de los Europeos bajo techo (56 si se computa también su germen de los Juegos Europeos), nadie había sido capaz de conseguir una hazaña que obliga a correr cuatro carreras en menos de 72 horas con la obligación de pelear por la clasificación en dos de ellas y de ganar las otras dos.

Y eso que todo pareció nublarse en el cielo de este descollante atleta de tan solo 20 años cuando nada más imponerse con autoridad en el 'milqui' fue descalificado por haber pisado fuera de la pista en un momento de la prueba, lo que daba la plata al burgalés Jesús Gómez y el bronce al granadino Ignacio Fontes.

Sin embargo, la reclamación noruega surtió efecto al entender el Jurado de Apelación que el menor de los Ingebrigtsen "no había obtenido ningún beneficio" de su acción "ni había perjudicado a otro atleta".

De todas formas quizá influyó en los rectores del atletismo la amenaza que lanzó el escandinavo. "Si me quitan el oro, me voy y no salgo en las series de 3.000", espetó cuando el tema estaba aún 'sub iudice'.

El menor de los Ingebrigtsen ha sido el 'rey' de Torun

El menor de los Ingebrigtsen ha sido el 'rey' de Torun / EFE

Al día siguiente se pasó en las series de 3.000 metros y el domingo se impuso con enorme autoridad por delante del sueco Chelimo y de un Adel Mechaal que supo apretar los dientes para mejorar dos posiciones en la recta final y descabalgar del bronce a Mohamed Katir.

De hecho, el menor de los Ingebrigtsen ya sorprendió al mundo cuando a dos meses de cumplir los 18 años se proclamó campeón de Europa al aire libre en 1.500 y en 5.000 metros en Berlín 2018.

Su corta trayectoria refleja una continua sucesión de hechos históricos. Fue el más joven en bajar de cuatro minutos en la milla, batió el récord europeo júnior la primera vez que corrió 3.000 metros obstáculos (8:26.81), mejoró el récord continental sub'20 de 1.500 (3:20.16) y de 5.000 (13:02.03).

Sus marcas personales reflejan la calidad de un atleta llamado a marcar una época: al aire libre 3:28.64 en 1.500 (récord europeo), 3:51.30 en la milla (récord continental júnior), 4:50.01 en 2.000 (récord europeo), 7:27.05 en 3.000 (récord de Noruega), 13:02.03 en 5.000 (récord continental júnior) y el referido 8:26.81 en 3.000 obstáculos (récord de Europa júnior).

Ingebrigtsen optará a todo en los Juegos de Río

Ingebrigtsen optará a todo en los Juegos de Río / AFP

Bajo techo acredita 3:31.80 en 1.500 (récord europeo) y 7:51.20 en 3.000 (récord continental júnior), mientras que en ruta tiene 13:28 en cinco kilómetros (récord noruego) y 27:54 en 10 km (récord noruego y europeo júnior).

Hermano de los atletas de elite Filip y Henrik, se entrena a las órdenes de su padre Gjert. "Él es un dictador, pero su método funciona", ha explicado Jakob Ingebrigtsen, un atleta que podría ser capaz de plantar batalla a las estrellas africanas del mediofondo y del fondo.

Su próximo reto serán los Juegos Olímpicos de Tokio, para los que deberá decidir su intenta una nueva 'machada' inscribiéndose en 1.500 y en 5.000 metros o si opta por centrarse en una sola prueba.