Saponjic, el expediente X del Atlético
El delantero serbio sigue en la plantilla pero no cuenta para Simeone
En sus dos temporadas en el equipo rojiblanco sólo ha jugado cinco partidos
sport.es
El Atlético puso la guinda a su mercado de fichajes con la llegada de Griezmann, que completaba junto a Cunha y De Paul una plantilla más competitiva que la de la temporada pasada. Al margen de otras entradas y salidas, quien no se movió es un jugador invisible, Ivan Saponjic, un delantero serbio que permanece casi inédito desde que llegó al Atlético y donde apenas ha contado para Simeone. El técnico argentino, que sólo le dio veinte minutos en pretemporada, ya le ha dicho que no cuenta con él.
Saponjic se formó en el Partizan. De ahí pasó al Benfica, luego al Waregem a préstamo y desde el club lisboeta llegó al Atlético hace dos temporadas con muy poco protagonismo. La segunda mitad de la temporada pasada salió cedido al Cádiz, donde participó en nueve partidos y sumó 386 minutos, anotando un gol de penalti ante Osasuna. En sus dos temporadas en el Atlético sólo ha jugado cinco partidos.
Ahora, a sus 24 años, afronta su tercera temporada sin ninguna posibilidad de jugar en el Atlético. Tuvo una oferta del Fuenlabrada que no llegó a cuajar y ahora se espera que pueda recalar en otras Ligas, como la turca, donde el mercado no se ha cerrado. También en Serbia, de donde procede. El Atlético le busca salida mientras su dorsal, el 17, podría quedárselo Griezmann.
- La Policía Nacional obligada a alertar a la población por lo que está pasando con el dinero de las cuentas del banco
- Estos son los españoles más odiados en el país: ni los catalanes ni los vascos
- Real Madrid - Barcelona | El Clásico de LaLiga EA Sports, en directo hoy: alineaciones, horario y dónde ver
- La respuesta de Javier Tebas al gol fantasma del clásico
- Ronald Araujo, transferible
- Jorge Rey avisa de lo que llegará a España: "A finales de semana...
- Xavi Hernández estalla contra Soto Grado: "No ha acertado ni una
- De Boer: "Ahora sé por qué a Guardiola no le gustaba Cancelo