La alarmante falta de puntería del Atlético

¡Morata falló un un gol cantado con la portería vacía!

¡Morata falló un un gol cantado con la portería vacía! / MEDIAPRO

Alex Muñoz

El Atlético de Madrid afronta el partido de este fin de semana ante el Barça con la intención, como es lógico, de ganar. Sin embargo, esta temporada está costando ver a ese equipo archi conocido y casi infalible de Simeone que secaba a los rivales y lograba aprovechar con cierta efectividad sus ocasiones. No es el mismo 'Atleti', y eso a nadie se le escapa. Ni en defensa, a pesar de que sus números siguen siendo indudablemente buenos, ni, sobretodo, en ataque. Y es que este año los colchoneros tienen un auténtico problema de puntería

Si nos fijamos en los números que los rojiblancos atesoran en Liga y Champions, vemos que en ambos casos la situación es, cuanto menos, preocupante. En la competición doméstica, el Atlético suma apenas 16 goles en 14 jornadas, lo que da una media de 1,14 anotaciones por encuentro. En la fase de grupos de la Liga de Campeones la media es prácticamente la misma, 1,2 por partido, ya que son 6 dianas en los 5 enfrentamientos que ha disputado. 

DEPENDENCIA ABSOLUTA DE MORATA

En el Wanda Metropolitano tiemblan si el madrileño no está acertado. El punta es el máximo goleador del equipo con 7 goles en ambas competiciones, el 30% de los goles totales llevan su firma, y es el único jugador de la plantilla que está mostrando una cierta facilidad anotadora. La temporada de Morata, aun así, está siendo irregular, ya que alterna rachas estelares, antes del encuentro de España ante Rumanía sumó seis partidos seguidos con gol, con otras, como ahora, donde apenas consigue inquietar a las defensas rivales. 

En los dos últimos encuentros de los rojiblancos, ante Granada y Juventus, el rendimiento del ex del Chelsea ha caído en picado. Poco participativo y sin apenas acierto, el '9' ha dejado fallos garrafales como el que protagonizó ante la 'Vecchia Signora'. El Atlético necesita de una versión más constante de un delantero que tiene unas muy buenas condiciones. 

DIEGO COSTA, CAÍDO EN DESGRACIA

No estaba siendo la temporada del hispano brasileño, pero su lesión, que le mantendrá, mínimo, tres meses de baja ha terminado de empeorarlaApenas dos goles, ambos en Liga, son unos números muy pobres para un jugador que si algo ha demostrado a lo largo de su carrera, además de garra, ha sido capacidad anotadora. 

A Costa no se le ha visto ni preciso ni acertado, y aunque en todo momento Simeone le ha defendido la afición 'Colchonera' parece haber perdido la fe en el de Lagarto. Incluso el rumor sobre su marcha en invierno ha sido constante en los despachos del Wanda, aunque la ya comentada lesión impedirá, salvo sorpresa, su salida. 

UNA PLANTILLA ATASCADA EN ATAQUE

Por supuesto que, si hablamos de goles, los delanteros son los máximos responsables, pero los puntas no han recibido la ayuda necesaria del resto de sus compañeros. Solo Joao Felix, que no termina de estar cómodo con los planteamientos de Simeone, Thomas y Vitolo alcanzan o superan los dos goles en Liga y Champions. Ni los saques de esquina ni las llegadas de segunda línea, armas muy utilizadas por 'El Cholo' desde su llegada, han perdido toda su efectividad, y ahora se depende de que la defensa cumpla y se logre el 1-0 que tanto gusta al preparador argentino. 

Sin contar a los delanteros, los tantos ligueros del club los han anotado Joao Felix (2), Vitolo (2), y ya con uno Correa, Thomas, Koke, Saúl y Lodi. De este grupo solo Correa da la impresión de generar peligro con cierta regularidad, y eso que en verano estaba más fuera que dentro. En Liga de Campeones, repiten como goleadores Joao Felix y Thomas, mientras que también han perforado la portería rival Hector Herrera y Savic. 

La falta de imaginación en el juego, donde solo Thomas aporta de vez en cuando cierta clarividencia, ha condenado a los rojiblancos a ser un equipo previsible. Los defensas no tienen excesivos problemas en desconectar a los puntas, y si estos no marcan ya hemos visto que prácticamente nadie es capaz de coger el testigo. Mucho que mejorar en un Atlético que se ahoga en su propia falta de ambición.