El Athletic se exhibe y da una vida extra a Garitano

Hay veces que cuando se está contra las cuerdas, que cuando la situación es límite, uno saca su mejor versión. La de los días importantes. Eso hizo el Athletic. Atropelló a un Betis desaparecido para firmar su mejor actuación de la temporada. Gaizka Garitano salvó su 'match ball' y calma las aguas en Bilbao. 

123980

Liga Santander

ATH

4

0

BET

Alineaciones

Athletic Club
Unai Simón, Capa, Iñigo Martínez, Yeray, Yuri (Balenziaga, 88'), Vesga, Vencedor, Williams, Muniain (Sancet, 70'), Berenguer (Morcillo, 71') y Villalibre (Lekue, 88').

Betis
Bravo, Emerson, Sidnei, Víctor Ruiz, Álex Moreno, Guido Rodríguez, William Carvalho (Loren, 62'), Rodri (Ruibal, 84'), Joaquín (Lainez,a 71'), Tello (Borja Iglesias, 62') y Sanabria (Guardado, 62').

Goles

1-0 M.9 Víctor Ruiz. 2-0 M.33 Capa. 3-0 M.59 Muniain. 4-0 M.68 Berenguer.

Árbitro

Alberola Rojas (castellanomanchego). TA:

Incidencias

Partido disputado en San Mamés.

Revolucionó el once el técnico vasco, y conscientes de la delicada situación, los leones salieron más enchufados que nunca al césped. Dos ocasiones en los primeros compases fueron el preludio de lo que estaba por venir. En una jugada por banda izquierda, el balón rebotó en Víctor Ruiz y entró al fondo de las mallas. Un tanto que despertó a los verdiblancos, pues el central catalán enmendó su error igualando la contienda, pero el VAR anuló el gol por un fuera de juega previo. La reacción fue un espejismo. Porque el Athletic seguía a lo suyo. Con su plan. Villalibre -estrenaba titularidad- y Williams hacían añicos un flojo entramado defensivo hispalense. Totalmente desdibujado, el Betis, impotente, se dedicaba a correr tras el balón y a resistir las embestidas locales. Hasta que pasó lo inevitable. Capa cazó un rechace de Bravo para hacer el segundo. 

Nada cambió tras el receso. Los de Pellegrini, desubicados, no reaccionaron y terminaron recibiendo el tercero. Villalibre (¡qué partidazo!) habilitó a Muniain para que, en otro rechace de Bravo, dejara tambaleándose a los verdiblancos. Berenguer puso el cuarto y los remató. Y Garitano puede respirar tranquilo.