La venganza de Ramos en el PSG apunta a pleno

El primer año de Sergio Ramos ni muchos menos ha sido todo lo satisfactorio que el PSG y el propio jugador esperaban cuando ambos se vincularon el verano pasado tras su polémica salida del Real Madrid. Las lesiones han jugado una mala pasada el sevillano y la dura competencia existente en el vestuario francés han impedido al andaluz ser importante en el equipo.

No obstante, esta dinámica podría cambiar de forma vertiginosa tras la última gran petición de Galtier, el entrenador del equipo, a Nasser Al-Khelaïfi, el presidente: vender a Thilo Kherer, quien es uno de los futbolistas que podría privar de minutos a Ramos el próximo curso. El Sevilla lleva tiempo tras los pasos de un Kehrer (25 años) que puede tomar la puerta de salida del Parque de los Príncipes. Por ahora, el central permanece ligado al Paris Saint-Germain hasta junio de 2023. Su más que probable traspaso sería un gesto de confianza en Ramos.

Bajo este contexto, los apostantes tienen fe en la entidad parisina a pesar de sus continuos fracasos europeos. Según los pronósticos de Betfair, que el PSG sea campeón de la Champions se paga a 14% de probabilidades implícitas, generando casi el doble de confianza de que lo haga, por ejemplo, el Real Madrid. Conquistar la Copa de Europa sería una gran venganza para Sergio Ramos y podría así quitarse la espina de su marcha del Bernabéu.

“Jugador fantasma”

Desde que fichó por el PSG el pasado 8 de julio de 2021, los problemas se le han acumulado a Sergio Ramos, que no pudo debutar hasta el 28 de noviembre de ese año debido a una lesión en el gemelo de su pierna izquierda. Desde entonces solo disputó 257 minutos, 212 de ellos repartidos en cinco encuentros de Ligue 1 y otros 45 en un partido de Copa entre agosto de 2021 y abril de 2022. Un bagaje muy pobre.

Duras críticas

Todo parece haber cambiado tras los retoques en la estructura parisina. En la Supercopa francesa, el PSG arrolló al Nantes (4-0) con las exhibiciones de Neymar, Messi y Sergio Ramos. Dos goles del brasileño, uno del argentino y otro del español. Un nuevo título para el club y unas grandes sensaciones.

Un taconazo para la esperanza