Mourinho busca nuevo héroe en la Roma para agigantar su leyenda

que Tammy Abraham marque en cualquier momento de la final de la Conference League es la opción que destaca, y mucho, sobre todas las demás.

Mourinho ha estado en ocho finales como entrenador y en varias de ellas un jugador de su equipo ha destacado por su labor decisiva en esos partidos.

A sus 59 años, José Mourinho no tiene pensado retirarse

A sus 59 años, José Mourinho no tiene pensado retirarse / EFE

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“Si llego a ganar cuatro competiciones europeas con cuatro clubes diferentes, nunca olvidaré la primera, que fue la Recopa de Europa (1996-97) como segundo entrenador del difunto y gran Bobby Robson en el Barcelona. Cada vez que me sentaba a su lado [en el banquillo], me sentía muy orgulloso”. Son las palabras de José Mourinho en la página oficial de la UEFA en una entrevista que sirve como antesala a la final de la Conference League que se disputa este miércoles entre Roma y Feyenoord. El veterano entrenador portugués está a un paso de ganar un nuevo título de una carrera exitosa, legendaria, plagada de jugadores heróicos que le han ayudado a consolidar el mito.

Según los pronósticos de Betfair, el conjunto italiano es claro favorito alcanza una probabilidad implícita del 43,5% a que gana el partido en los 90 minutos mientras que la victoria neerlandesal llega al 33,3%. Más allá del resultado global, lo que destaca es la confianza de los apostantes en Tammy Abraham, el auténtico referente ofensivo de la temporada del club romanista y candidato número uno a unirse a ese elenco de héroes que sostienen como Atlas la carrera de Mourinho.

El pasado verano, la Roma decidió apostar fuerte en su ataque tras la marcha de Dzeko y pagó 40 millones de euros por él. El inglés fue una petición expresa de José Mourinho, que le conocía de su etapa en la Premier, y que había aterrizado hace apenas tres meses en la capital italiana. 27 goles y nueve meses después, la inversión ha sido más que rentable para su club.

El final de temporada de Abraham

Según los pronósticos de Betfair, que Abraham anote en el tiempo reglamentario de la final se alcanza una probabilidad implícita del 41,7%, destacando muchísimo sobre el resto de los jugadores. El segundo en probabilidad es Cyriel Dessers, delantero del Feyenoord, pero el gol de este ariete nigeriano pretendido por el Leganés a principios de curso en los 90 minutos alcanza una probabilidad implícita del 31,3%, muy lejos de Abraham y eso que es la segunda opción más valorada.

A falta de la final de la Conference League, Tammy Abraham va a cerrar su primera temporada en la Roma con esos 27 goles en 51 partidos y participando directamente en un tanto cada 127 minutos. Su temporada tuvo un comienzo algo pobre (5 goles en los primeros 18 partidos en liga) y momentos en los que la fortuna no le ha sonreído, pero ha realizado una segunda vuelta muy completa con 11 tantos. Se ha convertido en pieza clave de su equipo promediando 0,46 goles por encuentro y ha contribuido a que la Roma siga jugando en Europa la próxima temporada.

Las finales de Mou y sus delanteros

Tirana, la capital de Albania, acogerá la final de la Conference League, que será la octava final europea (sin contar con la que fue ayudante en el Barcelona) de Mourinho después de dos finales de Liga de Campeones, con Oporto e Inter de Milan; dos de Europa League, con Oporto y Manchester United; y tres Supercopas de Europa, todas perdidas. No sería descabellado pensar que habrá un héroe en la final de la Conference League si repasamos la historia de los equipos de Mourinho que han ganado títulos europeos.

En 2010 fue Diego Milito quién, con dos goles, dio al Inter la Champions tras vencer 2-0 en Madrid al Bayern de Múnich. En 2003, Derlei con dos goles fue clave en el 2-3 que dio la victoria al Oporto de Mourinho ante el Celtic en la final de la Copa de la UEFA. Y, por ejemplo, con Mourinho de ayudante, el Barcelona ganó con un decisivo gol de Ronaldo Nazario la Recopa de 1997 ante el PSG en Rotterdam. Esos son sus héroes. Ahora ‘The Special One’ busca otro más que amplíe un palmarés enorme.