Las opciones españolas en el Tour de Francia

El ciclismo español vive un momento de total transición y sin opciones de victoria De la generación dorada formada por los Contador, Purito, Samu Sánchez y Alejandro Valverde sólo queda el último de los mencionados y ya es fase de retirada. La siguiente generación que surgió con Mikel Landa a la cabeza no ha obtenido, ni de lejos, los resultados de sus predecesores.

Este Tour puede ser el canto de sirena para esta generación en la que encuadramos a Enric Mas o Marc Soler como su momento de brillar antes de que emerjan definitivamente los Juan Ayuso, Carlos Rodríguez o Raúl García Pierna, quienes con apenas 20 años han tirado la puerta dominando los campeonatos de España.

"Es muy fácil atacar desde el sofá", dijo Enric Mas a los aficionados que piden que el líder del Movistar sea más ofensivo. Por primera vez en su carrera, el balear comparece en una gran vuelta como líder único e indiscutible habiendo sobrevivido a bicefalias y tricefalias con convivencias complicadas con Alejandro Valverde, Miguel Ángel López o Marc Soler.

El mallorquín es la única esperanza del ciclismo español de cara a la general con el quinto puesto logrado en 2020 como su principal aval. El Movistar trabajará con todo para un ciclista que en montaña es capaz de aguantar entre los mejores y que quizá debe mejorar un poco en la lucha contrarreloj para plantearse cotas más altas. Su top-10 en la general final parece asegurado a cuota [1.40]

Gregarios envejecidos buscando una etapa

Dentro de la nómina de españoles, encontramos a seis corredores que ya están en la treintena. Luis León Sánchez e Imanol Erviti son los más veteranos habiendo cumplido ya los 38 años. Ambos son auténticos gregarios de lujo que buscarán cazar alguna etapa si tienen un mínimo de libertad. El murciano ganó en sus años mozos cuatro etapas, aunque hace ya más de una década que no levanta los brazos en Francia.

En ese apartado de gregarios de lujo también encontramos a un Jonathan Castroviejo que está preparado para poner firme al pelotón en cuanto se lo requiera el Ineos y también a Albert Ramos de Movistar. Carlos Verona, quien ganó recientemente en Dauphiné, buscará reeditar dicho éxito filtrándose en alguna fuga en días de montaña. El Movistar sí le dará libertad para hacerlo.

En este sector de los cazadores de etapa, vislumbramos también a un Marc Soler que en UAE tendrá que trabajar para Pogacar pero quién sabe si infiltrado en los grupos delanteros. También está en esta misma situación un Ion Izaguirre, que tiene claro que si gana le harán una estatua en el Cofidis.

No son tiempos gloriosos para el ciclismo español, pero hasta hace bien poquito no había más cera de la ardía. Con ganar una etapa y conseguir que Enric Mas esté entre los cinco primeros de la general muchos se darán por contentos a la espera de que llegue la nueva sabia. Qué tiempos aquellos en los que ganar con Contador la general y con Valverde las etapas era una rutina.