Morata, Ibrahimovic, Owen, Baggio y otros grandes 'chaqueteros' del fútbol mundial

Álvaro Morata está muy cerca de convertirse en jugador del Barcelona completando una trilogía de equipos -Atlético, Real Madrid y los mencionados culés- que sólo poseen en su haber Bernd Schuster y Miquel Soler. Xavi Hernández ha pedido un delantero para reforzar la plantilla y el nombre del ariete de la Juventus está el primero en la lista para mejorar al conjunto azulgrana. Morata protagonizará una situación singular en España, pero no tan poco habitual en otras ligas como la italiana o la inglesa, donde grandes estrellas han terminado vistiendo la camiseta de varios grandes pese a prometer amor eterno a su primer ligue.

Un caso claro de esto que decimos es un Zlatan Ibrahimovic al que la Juventus le abrió sus puertas en 2004. El descenso de los piamonteses a la Serie B hizo que el sueco tuviese que hacer las maletas a Milán dos años después. Allí jugó tres temporadas en el Inter convirtiéndose en un auténtico ídolo de la afición. Cuando mejor estaba con los tifosi, los lombardos le mandaron al Barça. Allí duró un año hasta volver a fichar por el eterno rival, el AC Milán, club en el que ha vestido su camiseta en diversas épocas y donde actualmente es un ídolo.

Otro que iba con cara de niño bueno y que finalmente fue acusado de 'chaquetero' fue Michael Owen. Balón de Oro con el Liverpool en 2001, la carrera del delantero decayó tras su fichaje por el Real Madrid. El pecado del bueno de Owen fue intentar volver a casa vistiendo primero la camiseta del Newcastle para finalmente terminar en el Manchester United, eterno rival del Liverpool. El delantero no ha podido cerrar sus heridas desde entonces con un Anfield Road que ni olvida ni perdona la traición del que fuese su ídolo a principios de siglo.

Roberto Baggio también representa el caso de superestrella que termina desencantada con un club y se marcha al eterno rival. Fue eso lo que le sucedió en 1995, cuando tras ser el amo y señor de la Juventus decidió marcharse al AC Milán. Allí tampoco triunfó como esperaba dando una vuelta de tuerca más fichando por el Inter de Milán tras hacer escala una temporada en el Bolonia. Baggio aseguró tras retirarse que se arrepintió profundamente de irse de la Juventus y de no haber competido por un puesto con el emergente Alessandro del Piero.

Hatem Ben Arfa quizá no tenga el cartel de los anteriores jugadorazos, pero su historia ilustra a la perfección lo que es cambiar de colores en un país como Francia, donde los hinchas no son precisamente tranquilos. Despuntó en el Olympique de Lyon a pronta edad, pero una pelea con los pesos pesados del vestuario le mandó al Olympique de Marsella. Allí fue un ídolo durante dos temporadas hasta que otra pelea le mandó cedido al Newcastle. En Inglaterra su carrera tocó fondo, pero resurgió en 2015 tras fichar libre por el Niza y anotar la friolera de 17 goles. Esa cantidad llamó la atención de un Paris Saint Germain que le reclutó al año siguiente, no alcanzando las expectativas marcadas nuevamente. Tras bagar por clubes de menor nivel como el Valladolid, finalmente Ben Arfa completó el póker de grande franceses fichando en 2020 por el Girondins de Burdeos.

Morata, de fichar por el Barça, tiene varios espejos donde mirarse y no todos necesariamente malos. A sus 29 años, el delantero puede convertirse en el tercero en hacer el viaje a los tres grandes del fútbol español escribiendo una página al alcance de muy pocos. En activo, sólo Marcos Llorente y Theo Hernández podrían replicar la gesta del bueno de Álvaro.