Fede II de Arabia, el señor de las Supercopas

Fede Valverde vive un idilio con Arabia Saudí. El futbolista uruguayo anotó el gol de la victoria del Real Madrid en el Clásico dos años después del regreso de la Supercopa a la península arábiga. Ya en la edición inaugural de este nuevo formato, el centrocampista había salvado al equipo blanco de caer derrotado ante el Atlético de Madrid, haciendo una entrada de tarjeta roja para evitar un mano a mano de Morata contra Courtois.

Pese a salir como suplente, Fede Valverde volvió a marcar en esta edición las diferencias para el Real Madrid en un partido decisivo. El charrua entró en el minuto 81 sustituyendo a Luka Modric dando al equipo de Carlo Ancelotti una gran profundidad y un físico predominante. Una muestra de ello fue que 'El Pajarito' fue capaz de llegar al área rival en el minuto 97 y rematar al fondo de las mallas en una contra vertiginosa tras asistencia de Rodrygo.

Valverde protagonizó una jugada de similar factura en Yeddah dos años antes a la inversa y en la prórroga. Tras un córner desastroso del equipo blanco, el Atlético montó una contra al primer toque que dejó a Morata sólo contra Courtois. Cuando el delantero se disponía a rematar, apareció el uruguayo para evitar un gol cantado siendo expulsado.

El Real Madrid, gracias a esa acción de Fede, consiguió llegar a los penaltis y ganar la primera Supercopa en Arabia. El equipo blanco volvió a salvar los muebles este pasado miércoles gracias a la aportación de un jugador que se ha ganado con creces ser titular en la final.

Ancelotti, a poco que sea supersticioso, debe tener claro que Valverde es talismán en esta competición. El señor de la Supercopa espera poder ganarse un puesto en el equipo de Carletto. Por polivalencia no será. Carvajal, Modric o Asensio pueden ver peligrar su lugar en el once blanco. Que se preparen porque Fede II de Arabia quiere tirar la puerta.