Televisión

Violeta Magriñán no se corta al rechazar un regreso a 'Supervivientes': "No iría ni por..."

Muchos definen el reality como la experiencia más dura de su vida y algunos participantes han sufrido consecuencias derivadas de su paso por Honduras

Violeta Magriñán en su paso por 'Supervivientes' en 2019.

Violeta Magriñán en su paso por 'Supervivientes' en 2019.

Pol Langa

Pol Langa

Si hay un reality en el que los participantes lo pasan mal, no solo a nivel psicológico, sino que también físicamente es 'Supervivientes'. Aunque durante sus primeras temporadas reunía a gente anónima, a lo largo de las más de 20 temporadas que lleva en antena, desde el año 2000, el programa ha contado con numerosos nombres conocidos en su elenco que van desde 'celebrities', hasta deportistas.

Hambre, falta de agua, insectos, calor, humedad... todos ellos son factores clave que en determinadas ocasiones han dejado una profunda huella en los participantes. No es para menos, pues muchos definen el formato como el más duro de la televisión, e incluso de su vida, según han contado algunos.

Este es el caso de Violeta Magriñán. La valenciana formó parte del reality en 2019 y asegura que las secuelas físicas que le dejó hacen que ahora tenga muy clara su postura con 'Supervivientes'.

No volvía "ni por 10.000 euros a la semana"

El paso de Violeta por el programa fue una montaña rusa, pues aunque el ganador terminaría siendo Omar Montes, la joven contaba con papeletas para llevárselo a casa también. Además, en Honduras encontró el amor en el corazón de Fabio Colloricchio, otro de los participantes de la edición.

Sin embargo, su recuerdo de los días en la isla no son del todo buenos: "No bebes agua en condiciones en tres meses. Te ponen un bidón de siete litros al día, pero a la hora está caliente. Yo estaba totalmente deshidratada", rememora la 'influencer' desde el pódcast Ac2ality.

Más allá de esto, Violeta ha apuntado a una serie de secuelas que le dejó su paso por 'Supervivientes': "Tengo mi vesícula con cuatro piedras, la tengo destruida. Poco se habla de la factura física que te pasa ese reality", revela la chica, que tan solo tiene 30 años. Por eso, alucina con la resistencia de algunos participantes más mayores para no salir "tocados de por vida".

Por ello, asegura que no volvería a participar en el programa, ni loca: "No iría ni por 10.000 euros a la semana. Lo digo aquí", ha explicado.

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