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ECONOMÍA

Récord histórico para la plata: su precio no era tan alto desde 1980

La función de la plata como activo refugio ha sido especialmente relevante en un escenario de tensiones internacionales, inflación persistente y dudas sobre la autonomía de la política monetaria estadounidense

Descubren el mayor tesoro de monedas de la antigua Roma del siglo IV

Descubren el mayor tesoro de monedas de la antigua Roma del siglo IV / SPORT.es / Sport.es

Xavi Espinosa

Xavi Espinosa

El precio de la plata ha alcanzado niveles históricos, marcando un récord de 51 dólares por onza el pasado 9 de octubre, un hecho que no se veía desde 1980. Este repunte representa un aumento del 75% en su valor, impulsado tanto por factores económicos globales como por su creciente relevancia en sectores industriales clave.

La plata se ha consolidado así como uno de los metales más atractivos para los inversores y las industrias tecnológicas, reflejando su papel dual como valor refugio y como materia prima esencial.

De acuerdo con los analistas de FXEmpire, la subida responde a una combinación de fuerzas: por un lado, la búsqueda de refugio ante la inestabilidad geopolítica y económica; por otro, la solidez de la demanda industrial. Las expectativas de una posible flexibilización monetaria de la Reserva Federal (Fed) han generado un contexto favorable para los metales preciosos, mientras el consumo de plata aumenta en sectores como la energía solar y la electrónica.

Un crecimiento del 2%

El Silver Institute prevé que la demanda global de plata crezca alrededor del 2% en 2025, impulsada por las aplicaciones fotovoltaicas y la inversión en fondos cotizados que replican su precio. Esta tendencia muestra cómo la plata ha dejado de ser un metal secundario respecto al oro, para ocupar un rol cada vez más estratégico en la transición energética y las nuevas tecnologías.

La función de la plata como activo refugio ha sido especialmente relevante en un escenario de tensiones internacionales, inflación persistente y dudas sobre la autonomía de la política monetaria estadounidense. Los inversores han encontrado en este metal una herramienta eficaz para proteger su capital frente a la volatilidad de los mercados y las cargas crecientes de deuda gubernamental.

Aun con su notable apreciación, la plata sigue lejos del oro, que actualmente ronda los 4.000 dólares la onza. Sin embargo, su ritmo de crecimiento ha sido más acelerado, lo que sugiere una transformación en la forma en que los mercados valoran este metal. Su papel en la fabricación de centros de datos, paneles solares y teléfonos inteligentes ha hecho que su demanda trascienda el ámbito financiero, consolidando su importancia estratégica.

En conjunto, el ascenso de la plata refleja un cambio estructural en el equilibrio entre inversión y producción industrial. Más allá de las cifras récord, el metal blanco simboliza la intersección entre la economía verde, la digitalización y la necesidad de estabilidad financiera. En ese sentido, su precio actual no solo es un indicador de mercado, sino también un termómetro del futuro energético y tecnológico mundial.