El nuevo Barça apela a la épica para ganar en su estreno en el Palau

Mirotic aportó 22 puntos al triunfo azulgrana

Mirotic aportó 22 puntos al triunfo azulgrana / DAVID RAMÍREZ

Xavi Martínez Olivar

Xavi Martínez Olivar

El nuevo proyecto del Barça promete emociones fuertes. De momento este domingo se presentó ante su afición en el Palau superando al Baskonia en la prórroga cuando, durante el segundo tiempo, los vitorianos parecieron tener el partido en su mano. Todos fueron valientes. Pero tres nombres propios brillaron por encima del resto. Brandon Davies (24 puntos, 11 rebotes y 35 de valoración), Nikola Mirotic (22 y 6 rebotes) y la aparición de Malcolm Delaney en los momentos 'calientes' del duelo con 14 puntos vitales. Eso y la aportación de Smits que salió cuando peor pintaban las cosas y dio aire a los de Pesic.

120966

LIGA ENDESA

95
87
Alineaciones
BARÇA
Hanga (6), Higgins (10), Claver (5), Mirotic (22), Davies (24) -cinco inicial-, Smits (6), Oriola (-), Abrines (-), Delaney (14), Kuric (8) y Tomic (-),
BASKONIA
(19+23+21+17+7): Vildoza (-), Garino (14), Shields (12), Shengelia (16), Eric (8) -cinco inicial-, Janning (11), Diop (1), Fall (12), Henry (8) y Polonara (5).

En una plantilla llena de talento pero que aún debe ajustar sus piezas, el Barça mostró diversas caras en un mismo escenario. Un inicio arrollador liderado por Mirotic (24-10)y con Hanga ejerciendo de base preclaro (7 asistencias), que hizo las delicias de la afición azulgrana. 

Pero con el inicio de las rotaciones comenzó otro partido, más que nada porque el Baskonia también espabiló, subió la intensidad atrás y comenzó a jugar con más claridad de ideas en ataque  apoyado en el tridente Shengelia-Garino-Shields. Y aquí al Barça, por contra, se le fue difuminando la fluidez en ataque permitiendo que el Baskonia igualara primer el partido (42-42 al descanso) y luego pasara a controlar las operaciones.

El segundo tiempo pareció encaminarse hacia una lenta agonía del Barça que se llegó a ver -8 en el luminoso ya dentro del último cuarto. Pesic lo había probado todo pero ninguna solución parecía ejercer de revulsivo.

Sin embarrgo los jugadores barcelonistas no se vinieron abajo. Siguieron porfiando en defensa aupados por la afición y provocaron una auténtica sangría de balones perdidos (20 del Baskonias). Y el milagro se produjo. Porfiando por cada rebote en las dos mitades de la pista, trabajando cada canasta en las trincheras igualó el duelo (80-80). E incluso Higgins tuvo la bola de la victoria pero se hizo un lío y su tiro fue taponado.

En el tiempo suplementario, Delaney anotaría la primera canasta y el Barça ya no perdería la delantera en el luminoso. Una infantil antideportiva de Henry y un triple de un Davies colosal acabaron certificando el angustioso triunfo del Barça. Hay mucho margen de mejora en este equipo pero siempre es mejor crecer a base de victorias.