La defensa, talón de Aquiles para el Barça

El Barça aún tiene un largo camino por delante

El Barça aún tiene un largo camino por delante / VALENTÍ ENRICH

David Rubio

David Rubio

Cierto es que el FC Barcelona se halla en pleno proceso de construcción, que logró un importante triunfo el viernes en la pista del Anadolu Efes en la Euroliga (64-74) y que encaró el duelo del domingo en Andorra sin Thomas Heurtel, Kevin Pangos, Pau Ribas ni Cory Higgins.)

Con todos esos condicionantes, la tercera derrota en las últimas cuatro visitas al Principado (86-84) en la fase regular arrojó algunas conclusiones que no deberían ser preocupantes si se van solucionando a medida que el equipo vaya recuperando efectivos.

De hecho, la única ausencia de larga duración, la de Heurtel, ya está cubierta con garantías después del fichaje del base estadounidense Malcolm Delaney.

Intensidad defensiva 

<strong>Si por algo se ha caracterizado Svetislav Pesic a lo largo de su carrera es por la intensidad defensiva</strong> de sus equipos, una virtud sobre la que se ha cimentado el firme y continuo crecimiento del equipo desde que el serbio sustituyó a Sito Alonso en febrero de 2017.

Sin embargo, en los tres encuentros disputados de la Liga Endesa los azulgranas son la quinta peor defensa del torneo y la peor entre los 14 primeros clasificados con 255 puntos encajados (85 de media).

Problemas en el rebote 

El Barça perdió en Andorra pese a acreditar sensacionales porcentajes en tiros de dos (69%) y en tiros libres (86%), una muestra perfecta de lo mucho que ha crecido en equipo en calidad. 

Una de las claves estuvo bajo los aros, ya que <strong>los azulgranas se dejaron atrapar nada más y nada menos que 18 rebotes ofensivos</strong> incluido uno kafkiano al final del segundo cuarto cuando el equipo pensó que se había cumplido el tiempo y Tyson Pérez anotó a placer.

El propio Pesic se quejó de esta circunstancia, aunque lo hizo de manera calmada y con un poco de mano izquierda, plenamente consciente de que hay mucha temporada por delante y de que las derrotas, sobre todo en la Liga Endesa, tendrán una trascendencia algo relativa.

Por cierto, que <strong>en Estambul el Efes capturó 13 rebotes en el aro barcelonista</strong>, una cifra superior también a lo que sería deseable y pertinente si se quiere aspirar a las máximas cotas.

Las pérdidas 

En el Pavelló del Molt Ilustre Govern, el Barça perdió 23 pelotas, una cifra imperdonable ni siquiera con el atenuante de la agresiva defensa local atacando las líneas de pase una y otra vez. Incluso se antojan excesivas las 14 pérdidas del viernes en el Sinan Erdem Dome.

Pese a ello, hay que tener en cuenta que el FC Barcelona planteó la temporada con Heurtel y Pangos como bases y que actualmente no dispone de ninguno de los dos.

El joven Leo Bolmaro aún está verde, la solución de emergencia de Adam Hanga es un mero ‘parche’ Delaney, como aquél que dice, acaba de llegar y aún sigue asimilando los sistemas ofensivos y los complicados defensivos de Pesic. Es decir, que el margen de mejora es sideral.

Las rotaciones 

<strong>La pasada temporada el equipo llegó un tanto exigido a la fase decisiva de la temporada</strong>. Pesic no es amigo de regalar minutos y una nueva prueba de ello es que en Andorra no se ‘estrenaron’ Rolands Smits, Artem Pustovyi ni Bolmaro. Además, Pierre Oriola no jugó ni 10 minutos.

Por poner un ejemplo, en el Madrid está teniendo muchos minutos en la Liga Endesa el jovencísimo Usman Garuba (no jugó ante el Fenerbahçe) y así está liberando de minutos a los pesos pesados de su equipo. 

Aunque cada maestrillo tiene su librillo, <strong>quizá alguien debería insinuar a Pesic la idoneidad de descargar de minutos a sus referentes</strong>, sobre todo en duelos ligueros.