El Barça logra un sufrido triunfo ante un Zaragoza respondón

El Barça Lassa situó el 2-0 en la semifinal ante el Tecnyconta Zaragoza después de ganar el segundo partido en el Palau (76-70) y situarse a una sola victoria del pase a la gran final (2-0). No fue un triunfo cómodo para el Barça, que tuvo que emplearse a fondo, especialmente en defensa y con Heurtel liderando las operaciones, para dar la vuelta y acabar con la resistencia maña.

120356

LIGA ENDESA

BARÇA LASSA

76

70

TECNYCONTA ZARAGOZA

Alineaciones

BARÇA LASSA, 76
(14+22+25+15): Pangos (7), Ribas (5), Singleton (6), Claver (4), Tomic (10), Hanga (10), Heurtel (21), Pustovyi (-), Oriola (6), Kuric (7).

TECNYCONTA ZARAGOZA
(21+19+11+19): Okoye (9), Seibutis (12), Radovic (12), Alocén (5), Vázquez (2), Justiz (8), Martín (7), Barreiro (2), Berhanemeskel (6), Santana (4), Williams (3), Krejci (-).

ARBITROS:

Carlos Peruga, Jordi Aliaga, Raúl Zamorano. Expulsaron con cinco faltas a Justiz

INCIDENCIAS:

partido correspondiente al segundo partido de los playoff de la Liga Endesa disputado en el Palau Blaugrana ante 5.891 espectadores

El Zaragoza salió con un aire totalmente diferente, aunque sin la presencia de McCalebb, que no se recuperó de su lesión del primer partido. Y el protagonismo lo cogió muy pronto Okoye, que con siete puntos casi consecutivos, dio al Tecnyconta Zaragoza el control (4-7).

El Barça trató de igualar ese ritmo impuesto por los maños y lo logró puntualmente tras triple de Claver (9-9), aunque los de Pesic no parecían ni tan finos en defensa, permitiendo muchas acciones fáciles del Zaragoza, y en ataque, sin la misma frescura.

El ritmo, del Zaragoza

Eso lo aprovechó el Zaragoza para mandar en el ritmo, y Vázquez daba la máxima renta hasta el momento a los visitantes (9-16). Pesic introdujo cambios, buscando la reacción, pero no llegaba. Ni Hanga, Heurtel o Oriola, lograban cambiar la dinámica y el Zaragoza cerraba el primer cuarto con clara ventaja (14-21).

El equipo de Fisac daba una imagen totalmente distinta, acertado en el tiro y recuperando rebotes ofensivos (6), que le permitían segundas acciones. Martin daba la máxima renta (14-24) y era Heurtel (10 puntos), el más inspirado, el que trataba de mantener al Barça en el partido (22-28).

Pero el Zaragoza se mantenía firme, y un parcial de 1-8 para los visitantes les daba la máxima renta y preocupación en el Palau (23-26). El Barça no carburaba y sin acierto en el triple, era incapaz de salirse de la maraña defensiva del Tecnyconta, con defensa zonal y al hombre.

Kuric despierta

Aunque antes del descanso, el Barça cogió aire de la mano de Kuric, que encadenó tres acciones consecutivas (7puntos), para despertar al Palau y entrar las primeras dudas en los maños. Un parcial de 8-1 para el Barça le permitió verse cerca en el marcador, que al descanso era de solo cuatro puntos abajo (36-40). Un mal menor, visto lo sucedido en la primera mitad.

El duelo se reanudó con intensidad, y sin que el Barça pudiera imponer su estilo de juego, ante un Zaragoza que seguía acertado en el tiro. A pesar de ello, el Barça aumentó su intensidad defensiva, y empezaba a poner en aprietos el ataque visitante.

Fruto de ello, el partido se apretó, y Oriola lograba igualar la contienda (49-49). Heurtel, con una bandeja, lograba la primera ventaja del Barça en todo el partido (51-49). Parecía que era el momento de darle la vuelta a unos primeros 15 minutos de un Barça que nunca se encontró cómodo.

Heurtel, motor blaugrana

Con Heurtel como motor de la reacción blaugrana con seis puntos seguidos, la buena defensa empezó a ahogar a los visitantes, que acusaban el esfuerzo realizado y el Barça iba abriendo brecha para llegar al final del cuarto, con 10 puntos de renta (61-51). Un parcial de  25-11 para el Barça daba la vuelta al partido y a las sensaciones de ambos equipos

Pero el Zaragoza, lejos de entregarse, mantuvo la tensión hasta los últimos dos minutos (70-67). El Barça, gracias a su defensa, sacó contraataques finales, que le permitió respirar hondo para cerrar un partido (76-70) que vale medio pase a la final. Aunque se sufriera más de la cuenta, el premio fue grande.