La ACB no entra en el 'cuerpo a cuerpo' con el Real Madrid

El Real Madrid se queja a la ACB

 Juan Carlos Sánchez, director de la sección de baloncesto del Real Madrid, mostró su disconformidad arbitral en la rueda de prensa posterior a la final de Copa / Atlas

Sport.es

La Asociación de Club de Baloncesto (ACB) no tiene la intención de entrar en una batalla dialéctica ni de comunicados con el Real Madrid, que sigue exigiendo responsabilidades dentro de la Asociación por lo ocurrido en la final de la Copa, el pasado domingo.

Después de catalogar de “lamentables” los comunicados emitidos por la ACB y la Asociación de Árbitros, reconociendo “errores arbitrales”, desde el Madrid se sigue presionando para que admitan ese error final, y obtengan un comunicado donde les dé la razón.

Pero la ACB no parece dispuesta a seguir en ese intercambio de comunicados, al considerar, una vez consensuado con el resto de equipos de la Liga, que la nota difundida el lunes, recogía el sentir de la ACB sobre lo sucedido.

Perjudicados en algún momento

Todos los equipos se sienten en alguna ocasión perjudicados y no exigen a la ACB que salga a darles la razón por alguna mala decisión arbitral, que sin duda, existen y existirán”, comentan desde la ACB.

Lo que nos duele que los errores sucedieran en un marco tan espectacular como la Copa del Rey, donde tantos esfuerzos se vuelcan para hacer un torneo espectacular, como es”, aseguran.

Respecto a las intenciones del Madrid de dejar la competición si los socios así lo deciden, en la Liga están muy tranquilos. “El Madrid entenderá lo que tiene que hacer, después de valorarlo, no es cosa nuestra”, comentan desde la Asociación de Clubs.

Según informaba la cadena SER, les fue retirada la licencia a Facundo Campazzo i Felipe Reyes, por insultar a los colegiados. No fue un hecho excepcional, ya que sucede de la misma manera en cualquier partido donde se recogen insultos en el acta.

Ahora será el Juez Único de la competición el que decida la sanción, no la ACB, y que acostumbra a decidirse en una medida económica, aunque en este caso, y ante la gravedad de los hechos, nadie descarta que pueda conllevar también suspensión de partidos.