LLUVIA DE BILLETES

CHELSEA: 167.7 MILLONES

Capítulo 341 de la pérdida de cordura de Todd Boehly. Da igual cuándo leas esto: el Chelsea ha tirado la casa por la ventana. Menudo el marrón con el que tuvo que lidiar Enzo Maresca en su llegada a Stamford Bridge. Una plantilla kilométrica, en la que las posiciones no estaban dobladas ni triplicadas, sino cuadruplicadas - y no es exageración -. Tantos porteros como para armar un once y una lista interminable de descartes. Pues parece que la dirección deportiva no aprende la lección y sigue a lo suyo: 20 - 21 si incluimos a Quenda, para 2026 - altas, entre fichajes y aquellos que regresan de cesión.

Recientemente coronado campeón de la Conference League y, teniendo en cuenta que competirán en el Mundial de Clubes y en la Champions League la próxima temporada tras dos años de ausencia, incorporó a Dário Essugo, joven centrocampista del Sporting CP, cedido este curso a la UD Las Palmas (22,27 millones), Estevao, una de las grandes perlas del fútbol brasileño o a Liam Delap, excanterano 'cityzen' que se destapó en un Ipswich Town que no pudo evitar el descenso a la Championship.

Volvió a demostrar su músculo financiero con una inversión que supera los 100 millones de euros en futbolistas con gran proyección. Una inversión que, salvo sorpresa, no quedará aquí. No en vano suena Jamie Bynoe-Gittens, uno de los atractivos del Borussia Dortmund o James Trafford, guardamenta del Burnley, recién ascendido a la Premier. Cada uno no llegaría por una cifra inferior a los 50 millones de euros.

El arquero inglés sería la alternativa a Mike Maignan, objetivo número uno de la entidad 'blue' que podría haberse caído. Eso sí, Enzo Maresca ya cuenta con una inconcebible nómina de seis porteros: Robert Sánchez, Filip Jorgensen, Gabriel Slonina, Djordje Petrovic, Kepa y Mike Penders. Y eso que se deshizo de Marcus Betinelli y Lucas Bergstrom... Está por ver qué maniobras hace el técnico italiano para hacer su segunda limpia.

MANCHESTER CITY: 128.3 MILLONES

Pep Guardiola es un ganador nato. (Mal)acostumbrado a ganar, también. Le tocó vivir esta temporada la otra cara de la moneda. La parte más cruel del deporte. Un año - casi - en blanco, tan solo sumando una Community Shield a sus vitrinas, bajándose prematuramente de la carrera por la Premier, despidiéndose de la 'Orejona' en el play-off ante el Real Madrid o perdiendo la final de la FA Cup contra el Crystal Palace, su última esperanza para maquillar de alguna manera una temporada decepcionante. Como mínimo, evitaron un bochorno histórico y sellaron su clasificación para la próxima edición de la Champions League.

La filosofía que se practica en los despachos del Etihad Stadium es simple: acatar las órdenes de Pep. Armar una plantilla lo suficientemente competitiva como para competir - valga la redundancia - por todo. Todo ello sin mirar el precio. Ni, muchas veces, pensar si se trata de una apuesta arriesgada. El Fair Play Financiero no supone impedimento alguno para ello. Al club nunca le importó tener que invertir varias veces por el mismo perfil de futbolista. En otras palabras, que si una apuesta concreta de Pep no cumplía con las expectativas, rápidamente se buscaría a un reemplazo del reemplazo.

Después de que en el inicio de 2024/25 ocurriese una crisis sin precedentes, la dirección deportiva adoptó un plan distinto durante el mercado invernal. "La falta de efectivos avanzó la contratación de jugadores. El City acostumbra a fichar en verano, no suele hacerlo en invierno. Es un plan que estaba pensado para verano", contó Martí Perarnau a SPORT en febrero. Así, se produjeron cinco fichajes de una tacada: Omar Marmoush (75M), Nico González (60M), Abdukodir Khusanov (40M), Vitor Reis (37M) y Juma Bah (6M).

Ni seis meses después, con el Mundial de Clubes a la vuelta de la esquina, Pep volvería a hacer de las suyas: Rayan Aït-Nouri (40M), Rayan Cherki (40M), Tijjani Reijnders (55+15M). Tres - cuatro si incluimos a Marcus Bettinelli, exguardameta del Chelsea - refuerzos 'top'... que podrían ser más. Quien avisa no es traidor, sino que se lo dgian a Khaldoon Al Mubarak: "Nuestro objetivo es tener una plantilla nueva lista para el Mundial de Clubes”, cortita y al pie.

LIVERPOOL: 41.78 MILLONES*

*Serán 190 más cuando lleguen Wirtz y Kerkez

Todo al rojo. Las apuestas fáciles eran Manchester City, Chelsea, Manchester United o, incluso, Arsenal. Pero claro, viniendo de dónde venían, era prácticamente impensable poner la mano en el fuego por el equipo de Merseyside. Arne Slot dejó el Feyenoord para llenar el enorme vacío que Jürgen Klopp dejaba en Anfield. Y, para sorpresa de muchos, aterrizaría con tan solo un fichaje bajo el brazo, el de un Chiesa que, por h o por b, no encajaría en el ecosistema 'red'. También ató a Mamardashvili... para la 2025/26. Thiago Alcántara, Joel Matip - retirados - Stefan Bajcetic o Adrián San Miguel abandonaron el barco.

Es decir, que la directiva no gastó un duro en fichajes el curso pasado. De puertas hacia fuera se pensaba que les saldría el tiro por la culata, pero nada más lejos de la realidad. El mánager neerlandés implantó su seña de identidad en un Liverpool arrollador en todas las competiciones, sobre todo en el primer tramo de temporada. Opositaba al triplete, liderando con autoridad las tablas de la Premier League y la Fase liga de la Champions League. Pero, en el tramo decisivo, se pinchó el globo. No quedaba otra que 'conformarse' poner fin a la hegemonía del Manchester City en Inglaterra.

Vigésimo título liguero - segundo en la 'era Premier' -. Pero en los despachos se traían algo entre manos. Con ese cartel de 'tapado', se adelantaron a más de uno por Jeremie Frimpong, destacadísimo carrilero del Bayer Leverkusen, sustituto de Trent Alexander-Arnold. Un perfil con recorrido, partiendo desde el lateral o el extremo, con muchísima llegada. Único fichaje, junto al de un Mamardashvili que se incorpora del Valencia, por ahora. Pero el bueno de Jeremie llegará acompañado de su socio: Florian Wirtz. Uno de los más deseados. Talento descomunal por el que pagarán un elevadísimo peaje de 150 millones de euros. Y un suelo de 20 'kilos' por temporada.

Más pronto que tarde, Milos Kerkez reforzará un carril izquierdo que, hasta la fecha, llevaba el nombre Andy Robertson. Y ya, para rematar, el Liverpool tiene un sueño húmedo: Alexander Isak. Su precio de salida, unos 175 'kilos', complica bastante el asunto.

MANCHESTER UNITED: 78.3 MILLONES*

*Podrían ser 170 más si llegan Ekitike y Mbeumo

Old Trafford continúa en llamas. Que se haya fichado a Matheus Cunha por 74,2 millones de euros no cambia nada. No es que no se trata de una apuesta acertada, que lo es, sino que Rúben Amorim debe ejecutar su plan maquiavélico y abrir la puerta a, literalmente, la mitad de la plantilla. La situación financiera de la entidad que posee Sir Jim Ratcliffe es tan delicada que debe producirse un lavado de cara importante en el Manchester United. También tras firmar una temporada para olvidar. Horripilante. Los efectos colaterales serían inmediatos: (casi) todos en el mercado.

Por ahora, solo lograron desprenderse de Victor Lindelöf, Christian Eriksen y Johnny Evans - retirado -. André Onana, Casemiro, Alejandro Garnacho, Mason Mount, Joshua Zirkzee... más los Antony, Sancho, Rashford o Tyrell Malacia que vuelven de sus respectivas cesiones. Como comentábamos, se concretó la llegada de Cunha, un perfil polivalente y con gran olfato goleador, como ya demostró este curso en los Wolves.

Los 'red devils' quieren - deben - volver a competir por los puestos de Champions, después de ver esfumarse su oportunidad de acceder a la máxima competición continental tras caer derrotados en la final de la Europa League ante el Tottenham, otro integrante del 'Big Six' cuyo año ha sido calcado al de los mancunianos.

Amorim tiene en mente dibujar un 3-5-2, tal y como hizo tras su aterrizaje en el José Alvalade. Un esquema en el que encajaría Bryan Mbeumo, veloz en banda y con una capacidad resolutiva brutal dentro del área, asumiendo galones en el Brentford tras la salida de Ivan Toney. O Hugo Ekitike, descarte de 'Lucho' que atrae el interés de varios colosos de la Premier tras su gran año en el Eintracht y que podría llegar por 100 'kilos'. Y ya puestos, si viniese la joya de la corona... un Viktor Gyökeres enfurecido con el Sporting, negado a dejarle salir por 60+10. Eso sí, parece liderar ligeramente la pole el Arsenal de Mikel Arteta. Veremos qué decide el sueco...