CENTURIÓN, EL 'NEYMAR' AL QUE ARRUINÓ LA NOCHE

El fútbol es alegría, diversión y descaro, pero Ricardo Centurión se lo tomó demasiado a pecho. En su cabeza solo existía una cumbia constante que subía de volumen por las noches. Tanto, que no podía quedarse en casa. Yo a la noche no tengo sueño, tengo ganas de salir a tomar algo, reconoció en directo en una entrevista con Óscar Ruggeri en FOX Sports. El resto, ya es historia.

Apodado el ‘Neymar argentino’ por su habilidad con el balón, deleitó al mundo con sus regates en Racing de Avellaneda, pero estaba más centrado en brillar en las discotecas ya entrada la noche que en los campos de fútbol horas antes. Sus destellos de fantasía quedaban lapidados por los constantes líos nocturnos. Su condición de prodigio, se iba ahogando un poco más con cada copa.

Centurión era uno de esos jugadores que tenía que encargarse de mantener el fútbol vivo, de los que juegan para el espectador, para divertir y divertirse. Sin embargo, encontró una distracción mayor, que a su vez, fue su condena. Un regateador excelso que no pudo zafarse de su mayor enemigo: la noche.

Ahora, con su carrera por los suelos con apenas 32 años, siempre quedará una gran duda entre los amantes del fútbol… ¿Qué hubiera sido de Centurión si hubiese tenido sueño?

El fútbol es alegría, diversión y descaro, pero Ricardo Centurión se lo tomó demasiado a pecho. En su cabeza solo existía una cumbia constante que subía de volumen por las noches. Tanto, que no podía quedarse en casa. Yo a la noche no tengo sueño, tengo ganas de salir a tomar algo, reconoció en directo en una entrevista con Óscar Ruggeri en FOX Sports. El resto, ya es historia.

Apodado el ‘Neymar argentino’ por su habilidad con el balón, deleitó al mundo con sus regates en Racing de Avellaneda, pero estaba más centrado en brillar en las discotecas ya entrada la noche que en los campos de fútbol horas antes. Sus destellos de fantasía quedaban lapidados por los constantes líos nocturnos. Su condición de prodigio, se iba ahogando un poco más con cada copa.

Centurión era uno de esos jugadores que tenía que encargarse de mantener el fútbol vivo, de los que juegan para el espectador, para divertir y divertirse. Sin embargo, encontró una distracción mayor, que a su vez, fue su condena. Un regateador excelso que no pudo zafarse de su mayor enemigo: la noche.

Ahora, con su carrera por los suelos con apenas 32 años, siempre quedará una gran duda entre los amantes del fútbol… ¿Qué hubiera sido de Centurión si hubiese tenido sueño?

Ricky lo tenía todo para brillar en la élite. Un extremo rápido, con un uno contra uno letal y una personalidad arrolladora. Su talento era tal que, a veces, daba la sensación de que esperaba a los defensas para volver a regatearlos. Un gambeteador terrible, como dirían en Argentina.

Debutó en Primera con Racing de Avellaneda el 7 de mayo de 2012. Tenía apenas 19 años. Pero en vez de encadenar goles y detalles de calidad, se dedicó a coleccionar líos y situaciones imperdonables para un profesional. Su pasado, bastante complicado, le estaba ganando la partida.

Se convirtió en un trotamundos que no logró consagrarse en ningún club. Nunca se sacó el barrio de encima. Tanta inestabilidad solo hacía que el vacío interior que tenía desde pequeño se hiciese más grande, hasta tal punto que se cansó de vivir.

Ricky lo tenía todo para brillar en la élite. Un extremo rápido, con un uno contra uno letal y una personalidad arrolladora. Su talento era tal que, a veces, daba la sensación de que esperaba a los defensas para volver a regatearlos. Un gambeteador terrible, como dirían en Argentina.

Debutó en Primera con Racing de Avellaneda el 7 de mayo de 2012. Tenía apenas 19 años. Pero en vez de encadenar goles y detalles de calidad, se dedicó a coleccionar líos y situaciones imperdonables para un profesional. Su pasado, bastante complicado, le estaba ganando la partida.

Se convirtió en un trotamundos que no logró consagrarse en ningún club. Nunca se sacó el barrio de encima. Tanta inestabilidad solo hacía que el vacío interior que tenía desde pequeño se hiciese más grande, hasta tal punto que se cansó de vivir.

"Yo a la noche no tengo sueño, tengo ganas de salir a tomar algo

Ricardo Centurión, en la mítica entrevista con Óscar Ruggeri para FOX Sports

"Hay algo en mi cabeza que no funciona bien para tomar decisiones"

Ricardo Centurión, en una entrevista después de empujar a su entrenador Eduardo Coudet

"Me cansé de la vida. No me soportaba ni a mi mismo"

Ricardo Centurión, durante su difícil etapa en Vélez

LA ILUSIÓN DE ARGENTINA

Para que una promesa sea incumplida, hace falta primero un rayo de esperanza. El de Centurión en Racing fue inmenso. El país entero se ilusionó con aquel 'chaval' de 19 años.

De la mano de Luis Zubeldía, debutaba en Primera, siendo titular, el 17 de mayo de 2012. Fue en la derrota ante Atlético de Rafaela (4-2) en el Torneo de Clausura.

"Era muy habilidoso. Se le veía como un jugador que podía marcar muchas diferencias", recuerda el periodista deportivo argentino Fernando Senini.

"No le importaba nada. Iba a jugar como jugaba en el barrio. Tenía que ser el futuro de la Albiceleste. No sabes las patadas que aguantaba, como gambeteaba... Era imparable", detalla una de las voces del reportaje, que ha pedido mantenerse en el anonimato.

Su talento llamó la atención del El Anzhi ruso, que quiso ficharlo a principios de 2013, pero le descubrieron una lesión en el tobillo derecho. Jugó 28 partidos con Racing antes de dar el salto al Viejo Continente, en los que marcó cuatro goles y repartió dos asistencias.

EL SALTO A EUROPA

La primera gran oportunidad se la brindó el Genoa. El club italiano pidió su cesión por una temporada a cambio de 610.000€ para ver cómo se desenvolvía en una gran liga europea. Racing, aunque no quería desprenderse de él, tuvo que aceptar incluir una opción de compra de 3,5 millones.

Centurión, que tuvo una infancia muy complicada marcada por la muerte de su padre cuando solo tenía cinco años, estaba ante la oportunidad de su vida. “Perdí a mi viejo a los cinco años y él me faltó. Yo me crié entre mujeres. Mi vieja laburó 24 horas en una fábrica y en un hotel y no la veíamos nunca. Después aprendí a vivir”, reconoció en una entrevista años después.

Criado en Villa Luján, también explicó que estuvo rodeado de armas y drogas desde que era muy pequeño, un ambiente que no abandonó ya siendo profesional. En Italia podía dejar todo eso atrás.

Por desgracia, no confiaron en él y regresó a Racing a final de temporada tras disputar 12 partidos y siendo un suplente habitual. El Genoa, que no descendió a Serie B de milagro, no abonó los 3,5 millones para ficharlo. "Si el Genoa le dio la oportunidad, es porque en Europa conocían su talento", apunta Fernando Senini.

VUELTA A RACING

El 'no' del Genoa fue un duro golpe para un Centurión que necesitaba volver a sentirse importante. Su primera temporada en Europa no había ido nada bien y regresaba a Racing para demostrar que podía triunfar en las mejores ligas del mundo.

En 17 partidos marcó tres goles y repartió una asistencia y en enero hizo las maletas rumbo a Brasil. Además de por su habilidad sobre el campo, Centurión también llamaba la atención por lo que hacía fuera de él.

INADAPTADO EN BRASIL

En enero de 2015, un São Paulo necesitado de títulos desembolsaba algo más de 4 millones de euros para fichar a Centurión. Una prueba complicada para el futbolista, que ya era conocido en todo el mundo por sus salidas nocturnas.

Joaquim Piera, corresponsal de SPORT en Brasil, asegura que "su llegada al club fue vista como un gran fichaje, pero nunca se adaptó, ni al club ni a la ciudad". Problemas externos al fútbol le complicaron aún más asentar la cabeza. Su novia tuvo que regresar a Argentina por unos problemas de salud graves.

Criticado por la afición por su triste rendimiento, Centurión, que tenía contrato con el club paulista hasta 2019, salió cedido el verano de 2016 a Boca Juniors. "Al principio le trataban muy bien y estaban encantados con él, pero había mucha presión social. El São Paulo no ganaba nada y era complicado jugar allí", resalta Piera.

En la 2014-15, Ricky marcó seis goles y repartió seis asistencias. En la 2015-16, antes de poner rumbo a Buenos Aires, firmó dos 'dianas' y tres pases de gol en 26 choques. Centurión volvía a casa.

La caída a los infiernos

Aunque Brasil prometía fiesta y a lo grande, Centurión prefería la cumbia antes que la samba. El extremo volvía a su añorada Argentina para reflotar una carrera que se estaba lapidando poco a poco entre malos hábitos y líos. Tenía que hacerlo en uno de los grandes clubes del país: Boca Juniors.

Todo podía ir muy bien o muy mal, con Ricky no había medias tintas. El gran problema de regresar a Argentina era que se acercaba demasiado a su gran tentación: el barrio. Sin embargo, el mundo disfrutó de su mejor versión en La Bombonera bajó las órdenes de Schelotto.

Había llegado cedido del São Paulo y, tras varias actuaciones estelares, el conjunto Xeneize se planteaba seriamente ficharlo. Especialmente, tras salir campeón esa temporada. "Su año en Boca fue extraordinario. Los rivales lo mandaban a darle patadas, pero no podían cazarlo. Hacía lo que quería", apunta nuestra fuente anónima.

Estaba todo prácticamente hecho. Unos 4 millones de euros iban para el conjunto paulista, que tenía el 70% de sus derechos. 1,5 'kilos', para Racing de Avellaneda, que mantenía el 30% restante. Pero Centurión, que no supo dejar su mala vida atrás, lo perdió todo de la noche a la mañana.

Para ir de São Paulo a su barrio, Centurión necesitaba coger un vuelo a Buenos Aires. Tan solo tardaba unas 2 o 3 horas, pero solo podía hacerlo cuando tenía un par de días libres. Jugando en Boca, solo necesitaba 15 minutos. Fue entonces cuando los líos se empezaron a suceder uno tras otro. Una noche de fiesta fue la gota que colmó el vaso y Boca dijo 'basta'.

"La noticia de la pelea que le arruinó el contrato en Boca no fue sorpresiva. De un jugador como él se puede esperar cualquier cosa", explica Fernando Senini.

Aunque Brasil prometía fiesta y a lo grande, Centurión prefería la cumbia antes que la samba. El extremo volvía a su añorada Argentina para reflotar una carrera que se estaba lapidando poco a poco entre malos hábitos y líos. Tenía que hacerlo en uno de los grandes clubes del país: Boca Juniors.

Todo podía ir muy bien o muy mal, con Ricky no había medias tintas. El gran problema de regresar a Argentina era que se acercaba demasiado a su gran tentación: el barrio. Sin embargo, el mundo disfrutó de su mejor versión en La Bombonera bajó las órdenes de Schelotto.

Había llegado cedido del São Paulo y, tras varias actuaciones estelares, el conjunto Xeneize se planteaba seriamente ficharlo. Especialmente, tras salir campeón esa temporada. "Su año en Boca fue extraordinario. Los rivales lo mandaban a darle patadas, pero no podían cazarlo. Hacía lo que quería", apunta nuestra fuente anónima.

Estaba todo prácticamente hecho. Unos 4 millones de euros iban para el conjunto paulista, que tenía el 70% de sus derechos. 1,5 'kilos', para Racing de Avellaneda, que mantenía el 30% restante. Pero Centurión, que no supo dejar su mala vida atrás, lo perdió todo de la noche a la mañana.

Para ir de São Paulo a su barrio, Centurión necesitaba coger un vuelo a Buenos Aires. Tan solo tardaba unas 2 o 3 horas, pero solo podía hacerlo cuando tenía un par de días libres. Jugando en Boca, solo necesitaba 15 minutos. Fue entonces cuando los líos se empezaron a suceder uno tras otro. Una noche de fiesta fue la gota que colmó el vaso y Boca dijo 'basta'.

"La noticia de la pelea que le arruinó el contrato en Boca no fue sorpresiva. De un jugador como él se puede esperar cualquier cosa", explica Fernando Senini.

"Cada vez que volvía al barrio, hacía algún lío. No le importaba nada. No supo dejar el barrio

Una fuente anónima a SPORT

"Centurión se autodestruyó por completo. Tenía el talento, pero no se podía defender su mala conducta

Fernando Senini, periodista deportivo argentino

"Centurión tiene un problema con el alcohol. Vamos a ayudarlo

Víctor Blanco, presidente de Racing de Avellaneda (2013-2024), durante la segunda etapa del jugador en el club

SEPTIEMBRE DE 2016 - Estrelló su BMW

El primer escándalo de Centurión fue a los pocos meses de llegar. Después de jugar un amistoso contra Libertad de Paraguay en Chaco, estampó su BMW de alta gama al volver de fiesta. El accidente involucró a varios vehículos y los testigos señalaron que se dio a la fuga. Fue imputado tiempo después por lesiones múltiples.

ENERO DE 2017 - Pelea en un hotel

Pese a ser problemático, Centurión contaba con el apoyo de sus compañeros, pero antes de un Superclásico ante River Plate tuvo una fuerte discusión con varios jugadores en los pasillos del hotel de concentración. En las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, difundidas un mes después, se le vio completamente fuera de sí. El club le puso una sanción económica.

MAYO DE 2017 - Denunciado por su exnovia

Sin duda, el caso más grave de todos desde que llegó a Boca. El 23 de mayo de 2017, su exnovia Melina Tozzi lo denunció a la Comisaría de la Mujer de Quilmes por agresiones. "Me astilló tres dientes y ahorcó. No entiende que yo ya no quiero estar con él y se pone agresivo", declaró la joven bastante afectada.

JUNIO DE 2017 - Fotos con armas

En octubre de 2016 se filtraron unas fotos suyas íntimas con algunas conversaciones un tanto 'calientes'. No obstante, durante las negociaciones de su fichaje -ya con la temporada acabada- salieron a la luz imágenes suyas con una escopeta recortada de alto calibre.

Por desgracia, no era la primera vez que se podía ver a Ricky con un arma de fuego. Cuando jugaba en Racing también apareció una fotografía suya en la que portaba una pistola.

JULIO DE 2017 - La pelea que lo 'echó' de Boca

Tras un largo mes de negociaciones, Centurión iba a seguir en el conjunto Xeneize. El jugador lo tenía hecho con el Genoa, pero volvió a Argentina para firmar con Boca. Esa misma noche, la de antes de firmar, salió de fiesta al Capítulo I, en Lanús, y tuvo un enfrentamiento con un grupo de personas. Aunque no fue a mayores, el entrenador, Schelotto, y el presidente, Angelici, se echaron para atrás.

SEPTIEMBRE DE 2016 - Estrelló su BMW

El primer escándalo de Centurión fue a los pocos meses de llegar. Después de jugar un amistoso contra Libertad de Paraguay en Chaco, estampó su BMW de alta gama al volver de fiesta. El accidente involucró a varios vehículos y los testigos señalaron que se dio a la fuga. Fue imputado tiempo después por lesiones múltiples.

ENERO DE 2017 - Pelea en un hotel

Pese a ser problemático, Centurión contaba con el apoyo de sus compañeros, pero antes de un Superclásico ante River Plate tuvo una fuerte discusión con varios jugadores en los pasillos del hotel de concentración. En las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, difundidas un mes después, se le vio completamente fuera de sí. El club le puso una sanción económica.

MAYO DE 2017 - Denunciado por su exnovia

Sin duda, el caso más grave de todos desde que llegó a Boca. El 23 de mayo de 2017, su exnovia Melina Tozzi lo denunció a la Comisaría de la Mujer de Quilmes por agresiones. "Me astilló tres dientes y ahorcó. No entiende que yo ya no quiero estar con él y se pone agresivo", declaró la joven bastante afectada.

JUNIO DE 2017 - Fotos con armas

En octubre de 2016 se filtraron unas fotos suyas íntimas con algunas conversaciones un tanto 'calientes'. No obstante, durante las negociaciones de su fichaje -ya con la temporada acabada- salieron a la luz imágenes suyas con una escopeta recortada de alto calibre.

Por desgracia, no era la primera vez que se podía ver a Ricky con un arma de fuego. Cuando jugaba en Racing también apareció una fotografía suya en la que portaba una pistola.

JULIO DE 2017 - La pelea que lo 'echó' de Boca

Tras un largo mes de negociaciones, Centurión iba a seguir en el conjunto Xeneize. El jugador lo tenía hecho con el Genoa, pero volvió a Argentina para firmar con Boca. Esa misma noche, la de antes de firmar, salió de fiesta al Capítulo I, en Lanús, y tuvo un enfrentamiento con un grupo de personas. Aunque no fue a mayores, el entrenador, Schelotto, y el presidente, Angelici, se echaron para atrás.

IL RITORNO

Tras el fichaje frustrado por Boca Juniors, en São Paulo no sabían qué hacer con él... Hasta que llegó el Genoa con 3,8 millones de euros. Los paulistas se habían deshecho de Centurión, recuperando casi el total de la inversión realizada en 2015.

Como era de esperar, Centurión fracasó en su vuelta al club. Ivan Juric se cansó de él y lo apartó del equipo. Solo jugó cinco partidos antes de abandonar el club en enero. Medio año en el Luigi Ferraris fue suficiente para dejar claro que no tenía remedio.

OTRA VEZ RACING

¿Dónde encontró refugio Centurión? En Racing. 3,5 millones de euros desembolsaron para que volviese a casa. Lo cierto es que a nivel de cifras cumplió, pero de nuevo, cerca del barrio, se despertó su peor versión.

Ricky marcó 9 goles y repartió 9 asistencias en 22 partidos, pero a sus estadísticas, que mejoraron gracias a que intentó ser más profesional, se sumaron unos cuantos líos extradeportivos más.

MARZO DE 2018 - Fuga e intento de soborno

Ricky trató de centrarse, pero no tardó mucho en volver a las andadas. En la madrugada del 19 de marzo de 2018, la policía retuvo al jugador por cruzar dos semáforos en rojo y negarse a hacer el control de alcoholemia. Centurión trató de sobornar al agente. "Yo tengo para arreglar. Yo te puedo cubrir el mes", le dijo el jugador al agente, según varios medios de Argentina.

AGOSTO DE 2018 - No jugó porque "tomó demasiado"

En 2018, se perdió el primer partido contra Atlético Tucumán. El propio presidente de Racing, Víctor Blanco, desveló el verdadero motivo de su ausencia: "Tomó demasiado y no fue al entrenamiento. Tiene que tomar conciencia y cuidar su imagen. Cometió un error. Pasará a la parte de legales para ver la sanción que le corresponde. Él es jugador de Racing todo el día y toda la noche. Lo queremos mucho, pero al cien por ciento", reconoció.

FEBRERO DE 2019 - El empujón a Coudet

En febrero de 2019, empujó a su entrenador, Eduardo Coudet, durante un partido contra River Plate en el Monumental. El 'Chacho' llamó a Centurión para entrar de suplente. Visiblemente molesto, se lo sacó de encima con un empujón mientras recibía indicaciones. Racing lo apartó del primer equipo y lo bajó al Reserva, donde dos meses después del indecente, se pegó con un compañero tras unas bromas.

MARZO DE 2018 - Fuga e intento de soborno

Ricky trató de centrarse, pero no tardó mucho en volver a las andadas. En la madrugada del 19 de marzo de 2018, la policía retuvo al jugador por cruzar dos semáforos en rojo y negarse a hacer el control de alcoholemia. Centurión trató de sobornar al agente. "Yo tengo para arreglar. Yo te puedo cubrir el mes", le dijo el jugador al agente, según varios medios de Argentina.

AGOSTO DE 2018 - No jugó porque "tomó demasiado"

En 2018, se perdió el primer partido contra Atlético Tucumán. El propio presidente de Racing, Víctor Blanco, desveló el verdadero motivo de su ausencia: "Tomó demasiado y no fue al entrenamiento. Tiene que tomar conciencia y cuidar su imagen. Cometió un error. Pasará a la parte de legales para ver la sanción que le corresponde. Él es jugador de Racing todo el día y toda la noche. Lo queremos mucho, pero al cien por ciento", reconoció.

FEBRERO DE 2019 - El empujón a Coudet

En febrero de 2019, empujó a su entrenador, Eduardo Coudet, durante un partido contra River Plate en el Monumental. El 'Chacho' llamó a Centurión para entrar de suplente. Visiblemente molesto, se lo sacó de encima con un empujón mientras recibía indicaciones. Racing lo apartó del primer equipo y lo bajó al Reserva, donde dos meses después del indecente, se pegó con un compañero tras unas bromas.

DE VISITA EN MÉXICO

Como aún tenía contrato con Racing, el equipo de Avellaneda lo fue cediendo hasta encontrar un comprador. Su primer destino fue en México, el Atlético San Luis, donde solo jugó cuatro meses.

La directiva le contrató un preparador físico personal, para que pudiera adaptarse al fútbol mexicano y sacar su mejor versión, pero el rendimiento del argentino fue muy pobre: nueve partidos (solo dos de titular) en los que marcó un único gol.

HEINZE LO LLEVÓ A VÉLEZ

De cara al reinicio de la Superliga, el entrenador de Vélez, Gabriel Heinze, pidió personalmente la cesión del polémico pero habilidoso jugador. Centurión llegó como cedido y sin opción de compra en enero de 2020, con una condición especial...

El contrato tenía una cláusula de comportamiento para rescindirlo al momento si incumplía los estatutos sociales del club o el protocolo de violencia de género.

Ricky cumplió sobre el campo y no generó demasiado lío, así que el equipo argentino lo fichó permanentemente el verano de 2022 a cambio de 1,4 millones de euros. Tras 62 partidos, ocho goles y dos asistencias, el conjunto de Liniers decidió buscarle un destino en calidad de cedido.

SEIS MESES EN SAN LORENZO

Después de defender los colores de Racing, Boca y Vélez, Ricky sumaría su cuarto combinado argentino con San Lorenzo en calidad de cedido.

El extremo, que llegó al club en enero de 2022, volvió a Racing el 30 de junio después de marcar 2 goles en 12 partidos.

COCAÍNA EN BARRACAS

Tras su aventura en San Lorenzo, Centurión regresó a Vélez, pero no jugó ni un solo partido. En febrero de 2023 fichó por su quinto club en Argentina: CA Barracas Central.

Vélez, que ya sabía que la carrera de Centurión estaba casi terminada, lo cedió con opción de compra a una semana de cumplir 30 años y tras no jugar un partido oficial desde abril de 2022.

10 partidos, una asistencia y un positivo por cocaína. Ese fue el balance del jugador en el equipo argentino. Detenido por un control policial, intentó escapar de los agentes, pero fue capturado y dio positivo en cocaína mientras conducía su lujoso BMW.

Al revisarle el vehículo, encontraron un cigarro casero con una sustancia similar a la marihuana, una flor de marihuana y un blíster de clonazepam de dos miligramos con dos pastillas.

LA GRAN PREOCUPACIÓN DE ARGENTINA

Tras no destacar en Barracas, Centurión volvió a Vélez a consumir su contrato. Estuvo todo el 2024 sin jugar un solo partido y quedó libre el 1 de enero de 2025. Sin embargo, protagonizó un susto que preocupó a todo el país.

Fabián Berlanga, presidente de Vélez, confirmó en 'Radio La Red' que llevaban días sin localizar al jugador. Su historial de problemas no era un buen augurio. Muchos se temían lo peor. Especialmente, tras no haber superado la muerte de su novia en un accidente de tráfico en 2020.

No sabemos nada de Centurión. Desapareció de un día para otro, estamos preocupados. Lo estamos intentando ubicar por Google Maps, pero cortó el teléfono y no podemos localizarlo. Hace más de 10 días que desapareció”, dijo Berlanga.

Por suerte para todos, Centurión apareció tras comunicarse con su exagente, Eduardo Rossetto. “No sé por qué desaparecí estos días, hay veces que se me vuela el balero. Estoy bien y quiero volver a jugar", le pidió.

¿SU ÚLTIMO EQUIPO?

Sin jugar un partido oficial desde abril de 2023, cuando jugaba con Barracas Central, Centurión, a sus 32 años, firmó con Oriente Petrolero de Bolivia, un club con serios problemas institucionales.

De momento no ha podido debutar y no se sabe cuándo podrá hacerlo. La ventana de fichajes cerró el pasado 21 de marzo y el club ya cuenta con las seis fichas extranjeras cubiertas, por lo que debería desprenderse de un jugador para hacerle sitio.

Víctor Hugo, asesor legal del club, fue poco optimista: “¿Quién no va a querer que semejante crack argentino venga a Oriente? Sería capaz de saltar de felicidad, pero el tema es que el cupo de jugadores extranjeros está cerrado. No se puede hacer nada”, apuntó.

Más allá de la expectación que puede despertar en Bolivia, Fernando Senini tiene claro que "su prime ya pasó, es mejor no esperar nada de él, aunque el nivel de la liga de Bolivia es bajo y puede marcar diferencias".

Nuestra fuente anónima fue algo más contundente: "Ahora terminará su carrera en un equipo malísimo, que es Oriente Petrolero. Es una verdadera pena. Este es el resultado de no tener cabeza. Nunca logró quitarse el barrio de encima", finalizó.

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