El Antihéroe

El Antihéroe

Raphinha es el triunfo del antihéroe, de un futbolista a quien han obligado toda su vida a nadar a contracorriente en entornos tomados por la desconfianza

a sus 28 años y en su tercer curso en blaugrana, se ha aupado a la cima del fútbol mundial, donde nadie le esperaba ni le exigía estar porque jugaba con la etiqueta puesta de ser un obrero de clase media.

Texto: Joaquim Piera - Infografía: Marc Creus - Edición: Miki Soria

Llegados al ecuador de una temporada en que ya se ha sumado un título, contabiliza 22 goles y 11 asistencias, en 30 partidos con el Barça. Ha superado hasta a un killer como Lewandowski y es el blaugrana con más incidencia goleadora (el polaco ha marcado 28 veces y ha dado tres asistencias). El internacional 'canarinho' es uno de los tres tenores en el equipo más realizador del continente. No hay ningún otro futbolista sudamericano tan determinante como él, ha desbancado a Vinicius Jr., y es firme candidato al Balón de Oro 2025.

Raphinha: 22 goles + 11 asistencias

Lewandowski: 28 goles + 3 asistencias

Lamine Yamal: 9 goles + 12 asistencias

Ahora, todo es mayúsculo, exuberante para quien era visto hasta el verano como un patito feo. Ha tardado, pero, a sus 28 años, ha florecido, se ha transformado en un cisne, merecedor de alimentar la estirpe de los grandes nombres brasileños que triunfaron en Barcelona y que ayudaron al club a ganar prestigio planetario, entre ellos su ídolo y paisano, Ronaldinho, gaucho de Porto Alegre como él.

Romario, en un año y medio (1993-1995), se ganó el corazón del barcelonismo con sus goles de fantasía.
Llegó procedente del PSV Eindhoven y marcó 39 goles como azulgrana en 65 partidos

También del PSV Eindhoven llegó Ronaldo, que en apenas un año se convirtió en un 'Fenómeno' mundial. Dejó el Barça para ir al Inter apenas una temporada después de su llegada en una operación en la que tuvieron mucho que ver sus agentes. Sus cifras ese año fueron estratosféricas: marcó 47 goles en 49 partidos como culé

Rivaldo, con una zurda de oro, fue el mejor del mundo con la camiseta blaugrana, la cual defendió cinco temporadas (1997 a 2002).
El Barça lo fichó del Deportivo de la Coruña pagando su cláusula de rescisión y su rendimiento como culé fue espectacular. Marcó 130 goles y repartió 44 asistencias en 235 partidos

Ronaldinho Gaucho llegó con su sonrisa para sacar al Barça de la depresión en el verano de 2003 y colocarlo en lo más alto. Vino procedente del PSG por 25 millones de euros y marcó 94 goles y repartió 70 asistencias como azulgrana en sus 5 temporadas como culé, en las cuáles ganó un Balón de Oro.

El último extraclase ‘canarinho’ fue Neymar Jr., que al lado de Leo Messi y Luis Suárez formó uno de los tridentes con más quilates de la historia. Con él, se ganó la última Champions culé en 2015. Llegó procedente del Santos y marcó 118 goles y repartió otros 77 como azulgrana en 173 partidos

Raphinha, con sus perseverancia, se ha ganado, por méritos propios, un lugar entre los ‘craques’ brasileños que dejaron huella en Barcelona. Sus registros ofensivos lo avalan. Lleva 42 goles y 35 asistencias en 117 partidos

Raphinha, a diferencia de Ronaldinho, de Romário, de Ronaldo, de Rivaldo o Neymar Jr., aterrizó en Europa por la puerta de atrás y sin pedigrí porque no había hecho su formación en ninguno de los clubes tradicionales del gigante sudamericano. Dejó anónimamente el equipo sub-20 del modesto Avaí, de Florianópolis en el sur del país, para recalar, a principios de 2016 en el Vitoria de Guimarães, portugués.

Es su periplo formativo y su paso por el fútbol portugués (Vitoria de Guimarães y Sporting Lisboa), francés (Rennes) e inglés (Leeds) donde fue cultivando una de sus mejores virtudes: la resiliencia, que le ha permitido adaptarse y crecer ante todo tipo de retos y obstáculos surgidos en escenarios dispares. La otra es la fuerza mental. Raphinha nunca se deja abatir, llevando al pie de la letra una de las máximas de su país: “sou brasileiro e não desisto nunca”.

Tiene una gran confianza en sus propias posibilidades y esto lo transmite en todo momento”, explican a SPORT desde la sede de la CBF (Confederaçao Brasileira de Futebol), en Río de Janeiro.

Sus Superpoderes

Resiliencia

Nunca lo tuvo fácil. No jugó en ningún grande de Brasil y se curtió en Portugal, Francia e Inglaterra. Su capacidad de adaptación y de nadar contra corriente es extraordinaria

Fuerza mental

Se ganó la credibilidad a través del trabajo y la dedicación. Nadie cree más en sus posibilidades que él mismo. Nada lo derrumba ni lo arruga, porque está convencido que tiene el perfil para triunfar en el Barça

Liderazgo

El brazalete de capitán lo ha empoderado. Es una de las voces fuertes del vestuario con mucha ascendencia entre los más jóvenes

Discreción

Es el ‘antiNeymar’. Familiar, discreto y con un entorno familiar minimalista y bajo control. En casa cultiva la paz necesaria para triunfar en la élite

“Sou brasileiro e não desisto nunca”

La transformación de un líder

La obsesión de triunfar en el Barça ha condicionado todas sus decisiones. Por eso, el último verano se cerró en banda ante una oferta mareante de la Saudi Pro League que se veía con buenos ojos en la comisión deportiva culer. Los 100 millones de euros que se iban a ingresar en concepto de traspaso permitirían alcanzar la regla del 1:1, lo que se ha logrado hasta este enero.

Ver que, por sorpresa, sus compañeros lo convertían en uno de los capitanes, legitimó y ratificó que la determinación de no moverse de Barcelona era la correcta. No estaba solo, el grupo lo arropaba. “Alcanzar la capitanía ha sido muy importante para él, le ha impactado de forma muy positiva”, explican desde su entorno.

Raphinha y Casadó, ante el Mallorca

Raphinha, con el brazalete de capitán / Javi Ferrándiz

Raphinha, con el brazalete de capitán / Javi Ferrándiz

"Alcanzar la capitanía ha sido muy importante para él"
Fuentes de su entorno

Esta transformación también ha traslucido cuando ha jugado esta temporada con su selección, donde ejerce de primera espada. “Otros pueden tener más calidad, pero él se siente líder y todo el mundo que tiene contacto con él lo nota, ejerce una gran influencia en el grupo”, ratifican desde la CBF.

El propio Raphinha explicaba, en septiembre, en una entrevista en el portal GloboEsporte, de Brasil, que la capitanía le había dado una gran fuerza interior. “El liderazgo se ve desde dentro y no quien está fuera. Me eligieron, en parte, por mi forma de ser, porque me llevo bien con todos, los jóvenes y los veteranos. Intento ayudar a quien llega al vestuario, sea desde la cantera o desde otro club. Como jugué en muchos lugares, doy mucha importancia a que el jugador se sienta arropado para ejecutar bien su trabajo”, dijo.

Amor a Primera Vista con Flick

Raphinha no era un perfil del agrado de Xavi Hernández. Prueba de ello es que, la temporada pasada, la 2023/24, solo disputó seis partidos al completo de los 37 en que fue alineado, lo que representa un 16,22%. De las 25 veces que entró en el once titular, fue sustituido en 16 ocasiones: o sea, en un 65% de oportunidades, casi dos de cada tres encuentros. Verse sustituido reiteradamente era algo que fustigaba al gaucho, porque lo interpretaba como una falta explícita de confianza.

Raphinha departe con Flick en el entrenamiento previa a jugar en Mallorca

Raphinha departe con Flick en un entrenamiento / Javi Ferrándiz

Raphinha departe con Flick en un entrenamiento / Javi Ferrándiz

Todo cambió con la llegada de Hansi Flick. Le habló mirándole a los ojos, le otorgó galones, lo empoderó y, a cambio, le pidió polivalencia. Le explicó que, difícilmente, jugaría como extremo derecho a pierna cambiada. Le proponía, con aquel lenguaje directo y con pocos matices de los alemanes, un cambio de paradigma. El técnico lo veía al inicio del curso, como un mediapunta detrás de los tres delanteros, que es el rol que aún ocupa con Brasil, donde creía que explotaría mejor su llegada. “Al principio no me gustó, pero el contexto era diferente, entendí que para jugar en el Barça o en la Seleçao, uno tiene que hacer diferentes roles y abrí mi cabeza”, ha explicado el brasileño en su país.

"Entendí que para jugar en el Barça o en la Seleçao, uno tiene que hacer diferentes roles y abrí mi cabeza·
Raphinha

Con Flick, Raphinha ha jugado 19 partidos completos de los 29 en que ha sido alineado, ya son el triple que todo el curso anterior. A finales de septiembre llevaba un pleno de minutos en los ocho primeros partidos oficiales de la temporada. Solo ha sido suplente una vez, en Pamplona en Liga.

No se trata de que el gaucho haya marcado a estas alturas el doble de goles que toda la campaña anterior…. es que, cuando queda la mitad de la temporada, ya ha jugado más minutos que el último año con Xavi: 2.297 minutos por 1950.

Flick le ha sacado máximo partido, le ha inyectado confianza y Rapha ha respondido con un fútbol de muchísimos quilates: asiste, rompe, presiona, empuja a los suyos con su ímpetu y finaliza como el mejor ‘9’, como dejó constancia con su doblete en la final de la Supercopa. Es un tesoro futbolístico.

Desde el entorno del brasileño, se destaca que la sintonía no solo existe con el técnico alemán sino con cada uno de los integrantes del cuerpo técnico. Todos reman en la misma dirección.

Un Entorno Reducido y Bajo Control

Los últimos ‘craques’ brasileños que pasaron por la Ciudad Condal iban acompañados de una troupe de amigos y familiares, un reguero de conocidos y saludados que transmitían una imagen de algarabía, de vivir en una eterna Micareta, que es la celebración del Carnaval fuera de su época. La coartada era que la felicidad es el combustible para los creativos brasileños, como Ronaldinho y Neymar no se cansaron nunca de repetir.

Raphinha, su esposa Natalia y su hijo Gael... los Belloli al completo

Raphinha, su esposa Natalia y su hijo Gael... los Belloli al completo / Instagram

Raphinha, su esposa Natalia y su hijo Gael... los Belloli al completo / Instagram

Lo de Raphinha es la antítesis al jolgorio y los desmanes. Vive en un entorno minimalista, controlado. “Quien convive con él ve que el momento familiar en esta fase de la vida es una de las claves de su éxito… la pasión que siente por su hijo, la comunión con su esposa. Raphinha vive en un ambiente muy sano”, se asegura a SPORT desde su círculo de influencia.

Nada se sabe qué hace la familia Belloli, más allá de lo que Natalia, la esposa del jugador y el propio Raphinha, filtran cuidadosamente en sus redes sociales. Todo ocurre en el más absoluto hermetismo, con el ambiente ejemplificador que debe tener cualquier deportista top mundial.

Un Entorno Reducido y Bajo Control

Los últimos ‘craques’ brasileños que pasaron por la Ciudad Condal iban acompañados de una troupe de amigos y familiares, un reguero de conocidos y saludados que transmitían una imagen de algarabía, de vivir en una eterna Micareta, que es la celebración del Carnaval fuera de su época. La coartada era que la felicidad es el combustible para los creativos brasileños, como Ronaldinho y Neymar no se cansaron nunca de repetir.

Raphinha, su esposa Natalia y su hijo Gael... los Belloli al completo

Raphinha, su esposa Natalia y su hijo Gael... los Belloli al completo / Instagram

Raphinha, su esposa Natalia y su hijo Gael... los Belloli al completo / Instagram

Lo de Raphinha es la antítesis al jolgorio y los desmanes. Vive en un entorno minimalista, controlado. “Quien convive con él ve que el momento familiar en esta fase de la vida es una de las claves de su éxito… la pasión que siente por su hijo, la comunión con su esposa. Raphinha vive en un ambiente muy sano”, se asegura a SPORT desde su círculo de influencia.

Nada se sabe qué hace la familia Belloli, más allá de lo que Natalia, la esposa del jugador y el propio Raphinha, filtran cuidadosamente en sus redes sociales. Todo ocurre en el más absoluto hermetismo, con el ambiente ejemplificador que debe tener cualquier deportista top mundial.