Ebrima Tunkara
¿El mayor talento en La Masia desde Lamine?
“A los diez minutos de verle llamé a Marc Serra y Aureli Altimira y les dije: 'Es una locura, hay que ficharlo'"
Solo un ejemplo de lo que es capaz Ebrima Tunkara
Solo un ejemplo de lo que es capaz Ebrima Tunkara
Abdul Tunkara, el padre de Ebrima, llegó a Cerdanyola en el 2007 procedente de Gambia. Era un inmigrante más que buscaba huir de la pobreza y encontrar trabajo en España. Con mucho esfuerzo logró un empleo y legalizar su situación y en el 2017 pudo traerse a parte de su familia a Cerdanyola. Ebrima, con siete años, pasó de vivir en un contexto de pobreza a disfrutar de la vida occidental y un amigo de su padre, Manel, lo animó a apuntarse al equipo del Cerdanyola.
Ebrima jugaba en Gambia en la calle. No lo hacía en ningún club, lo hacía descalzo y para pasar el rato con sus amigos. Cuando se incorporó al Cerdanyola, el formador del Barça, Albert Puig Alcaide, necesitó solo diez minutos para avisar a sus responsables de la necesidad de ficharlo.
"En ese momento nos dicen que ha llegado un jugador muy bueno al Cerdanyola, pero que no saben cuando podrá debutar", recuerda Puig. "Nosotros estábamos viendo a otro chico que se llamaba Unai. Y en un Cerdanyola-Vilasar de Mar fui a verlo y dio la casualidad de que era el primer día que Ebrima podía jugar. A los diez minutos cogí el teléfono y llamé a Marc Serra, coordinador de fútbol siete, y a Aureli Altimira, coordinador de futbol once, y les dije: 'es una locura'. Normalmente no llamo a los 10 minutos, pero lo que vi me pareció una locura por su superioridad".
"Normalmente no llamo a los 10 minutos, pero lo que vi me pareció una locura por su superioridad"
El Barça se movió con diligencia y Ebrima se incorporó al fútbol-7 blaugrana en el curso 2018-19. En apenas unos meses, había pasado de ser un niño gambiano con muchas dificultades económicas a formar parte del mejor fútbol base del mundo.
El gran salto:
"¿Pero a quién hemos fichado?"
Las dificultades de un fútbol genuino: dudas para empezar
Su adaptación no fue fácil porque todavía no dominaba el idioma y aunque sus cualidades naturales eran espectaculares le costó entender la manera de entrenar y jugar propia de la cantera del Barça.
En el club aún lo veían verde y se optó por ir despacio. Al principio se seguía entrenando con el Cerdanyola, pero los martes se ejercitaba con el prebenjamín del Barça. El objetivo era que estuviera aclimatado para la temporada siguiente pero lo que vieron los técnicos en esos primeros entrenamientos agitó el debate interno.
"Al primer entrenamiento que vino con el prebenjamín, una vez apalabrado, y cuando ya tenía nuestro compromiso de que lo incorporaríamos, lo vimos muy perdido. Desconectado no, lo siguiente. Hacía mucho frío y nos dimos cuenta de que estaba sufriendo mucho porque venía de climas cálidos", recuerda uno de los técnicos de la época.
"Algunos se preguntaban: ¿pero a quién hemos firmado? Pero con el tiempo se dieron cuenta de que aquel sesgo de los primeros entrenamientos no le hacía justicia".
El virtuoso gambiano que enamora por su humildad- ADN Masia
El virtuoso gambiano que enamora por su humildad- ADN Masia
Fue un proceso lógico y con el paso de las semanas Ebrima se integró a la perfección en el vestuario y en el campo brillaba por una fuerza imponente y una zurda con mucha clase. El trabajo de formadores como Albert Puig, David Sánchez y Jordi Pérez ha consistido en que Ebrima entienda el juego del Barça y pueda desarrollar sus cualidades innatas en favor del colectivo.
Las dificultades de un fútbol genuino: dudas para empezar
Su adaptación no fue fácil porque todavía no dominaba el idioma y aunque sus cualidades naturales eran espectaculares le costó entender la manera de entrenar y jugar propia de la cantera del Barça.
En el club aún lo veían verde y se optó por ir despacio. Al principio se seguía entrenando con el Cerdanyola, pero los martes se ejercitaba con el prebenjamín del Barça. El objetivo era que estuviera aclimatado para la temporada siguiente pero lo que vieron los técnicos en esos primeros entrenamientos agitó el debate interno.
"Al primer entrenamiento que vino con el prebenjamín, una vez apalabrado, y cuando ya tenía nuestro compromiso de que lo incorporaríamos, lo vimos muy perdido. Desconectado no, lo siguiente. Hacía mucho frío y nos dimos cuenta de que estaba sufriendo mucho porque venía de climas cálidos", recuerda uno de los técnicos de la época.
"Algunos se preguntaban: ¿pero a quién hemos firmado? Pero con el tiempo se dieron cuenta de que aquel sesgo de los primeros entrenamientos no le hacía justicia".
El virtuoso gambiano que enamora por su humildad- ADN Masia
El virtuoso gambiano que enamora por su humildad- ADN Masia
Fue un proceso lógico y con el paso de las semanas Ebrima se integró a la perfección en el vestuario y en el campo brillaba por una fuerza imponente y una zurda con mucha clase. El trabajo de formadores como Albert Puig, David Sánchez y Jordi Pérez ha consistido en que Ebrima entienda el juego del Barça y pueda desarrollar sus cualidades innatas en favor del colectivo.
¿Por qué es tan especial?
Radiografía futbolística
Ebrima está marcando diferencias por cómo combina una estructura física imponente y una habilidad técnica que lo convierten en un jugador dominante. El pasado 15 de marzo cumplió 15 años y aún se espera que siga creciendo.
"Su padre mide cerca de dos metros, parece un jugador de la NBA"
Más aún viendo algunos de sus familiares: "Su padre mide cerca de dos metros, parece un jugador de la NBA", apuntan algunos de los habituales de los partido en la Ciutat Esportiva de las inferiores.
Albert Puig, que lo tuvo a sus órdenes en varias categorías, da las algunas de las claves de su impacto en las inferiores del Barça. "Tiene una conducción que elimina rivales muy rápido y tiene capacidad para proteger el balón con el cuerpo y girarse rápido. Además tiene gol porque pisa mucho el área y tiene un tiro potente".
Ebrima juega en el cadete A, donde es uno de los jugadores más desequilibrantes tras superar algunos problemas físicos la temporada pasada.
Durante su recorrido en las inferiores ha tenido etapas en las que ha jugado incluso de extremo, pero Puig siempre ha tenido claro que es un interior ofensivo.
"Él no es 11 es un 10, con los años se ha demostrado y es donde hará carrera: como interior. Porque es un interior que te acede al área, que te hace recorridos, que físicamente te abarca campo y que a nivel técnico, con la agilidad que tiene, es determinante".
"Con cuatro gambadas se plantaba delante de la portería"
Para el técnico, uno de los grandes retos de Ebrima será seguir marcando diferencias al mismo nivel cuando sea menos dominante en el aspecto físico y también pulir la precisión del disparo.
"Ahora mismo tiene una gran capacidad de eliminar rivales, pero veremos cuando se igualen las fuerzas. Otro aspecto importante es el golpeo: de pequeño chutas al bulto y haces gol, de más mayor tiene que ir colocando más el balón porque sube el nivel de los porteros".
"Lamine era un genio, pero Ebrima te multiplica al resto"
Puig entiende que haya gente que lo considere el gran talento desde Lamine en La Masia, pero matiza algunas diferencias. "Lamine te hacía ganar él solo los partidos porque se lo inventaba él. Estaba tocado por la varita de los genios", empieza diciendo.
"Ebrima es distinto, pero tenerlo en el campo facilita mucho las cosas a los demás. Te daba una garantía de que lo mejoraba todo y siempre aparecía en los partidos importantes. Te multiplica al resto. Lamine eran chispazos. Como entrenador, con Ebrima estabas tranquilo. Te diré un dato: con él, en 30 partidos de liga en benjamines y 30 con infantiles no perdimos un solo partido".
Radiografía futbolística
Ebrima está marcando diferencias por cómo combina una estructura física imponente y una habilidad técnica que lo convierten en un jugador dominante. El pasado 15 de marzo cumplió 15 años y aún se espera que siga creciendo.
"Su padre mide cerca de dos metros, parece un jugador de la NBA"
Más aún viendo algunos de sus familiares: "Su padre mide cerca de dos metros, parece un jugador de la NBA", apuntan algunos de los habituales de los partido en la Ciutat Esportiva de las inferiores.
Albert Puig, que lo tuvo a sus órdenes en varias categorías, da las algunas de las claves de su impacto en las inferiores del Barça. "Tiene una conducción que elimina rivales muy rápido y tiene capacidad para proteger el balón con el cuerpo y girarse rápido. Además tiene gol porque pisa mucho el área y tiene un tiro potente".
Ebrima juega en el cadete A, donde es uno de los jugadores más desequilibrantes tras superar algunos problemas físicos la temporada pasada.
Durante su recorrido en las inferiores ha tenido etapas en las que ha jugado incluso de extremo, pero Puig siempre ha tenido claro que es un interior ofensivo.
"Él no es 11 es un 10, con los años se ha demostrado y es donde hará carrera: como interior. Porque es un interior que te acede al área, que te hace recorridos, que físicamente te abarca campo y que a nivel técnico, con la agilidad que tiene, es determinante".
"Con cuatro gambadas se plantaba delante de la portería"
Para el técnico, uno de los grandes retos de Ebrima será seguir marcando diferencias al mismo nivel cuando sea menos dominante en el aspecto físico y también pulir la precisión del disparo.
"Ahora mismo tiene una gran capacidad de eliminar rivales, pero veremos cuando se igualen las fuerzas. Otro aspecto importante es el golpeo: de pequeño chutas al bulto y haces gol, de más mayor tiene que ir colocando más el balón porque sube el nivel de los porteros".
"Lamine era un genio, pero Ebrima te multiplica al resto"
Puig entiende que haya gente que lo considere el gran talento desde Lamine en La Masia, pero matiza algunas diferencias. "Lamine te hacía ganar él solo los partidos porque se lo inventaba él. Estaba tocado por la varita de los genios", empieza diciendo.
"Ebrima es distinto, pero tenerlo en el campo facilita mucho las cosas a los demás. Te daba una garantía de que lo mejoraba todo y siempre aparecía en los partidos importantes. Te multiplica al resto. Lamine eran chispazos. Como entrenador, con Ebrima estabas tranquilo. Te diré un dato: con él, en 30 partidos de liga en benjamines y 30 con infantiles no perdimos un solo partido".
¿Cómo es Ebrima?
La personalidad de "un trozo de pan"
Jugar en una entidad tan grande como el Barça nunca ha provocado que Ebrima haya olvidado sus orígenes y se haya agrandado. Aún mantiene familia en Gambia y su padre Abdul le ha inculcado la humildad como su principal compañera de viaje.
Además de profesar la religión musulmana, los valores de la familia de Ebrima pasan por tocar con los pies en el suelo.
El padre de Ebrima le ha sabido inculcar a su hijo los valores del esfuerzo e intenta evitar que este olvide lo que ha tenido que sufrir su familia para poder disfrutar de una vida digna.
Mientras la mayoría de sus compañeros ya disponen de una agencia de representación que se gestiona su futuro, Abdul considera que hasta que no cumpla 16 años no es algo imprescindible.
Curiosidades
Ebrima llegó con solo siete años a Cataluña y reside en La Masia desde el verano del 2021. En la residencia del Barça destacan su educación exquisita. Siempre con una sonrisa, nunca ha generado un problema. Es un gran amante del ping-pong y el futbolín.
Tiene un gran sentido de la justicia y nunca miente. Le gusta dialogar con sus compañeros antes que estar enganchado al móvil y aunque es muy disciplinado con las comidas el día que toca hacer una excepción le pierden el chocolate y los dulces.
Muy amigo de Siriki, Hugo Garcés y Alejandro Oviedo en La Masia es de los que marca la pauta de comportamiento por su conducta ejemplar.
En febrero del 2022 en una entrevista a Barça TV confesó que "lo más increíble de estar en La Masia es convivir con un jugador del primer equipo como Gavi, desayunar cada día con él me parece alucinante".
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