Xisco Lliteras es el fundador y el CEO de la marcha cicloturista internacional Mallorca 312. Desde el 2010, esta prueba ha ido creciendo gradualmente hasta convertirse en una referencia del panorama cicloturista a nivel nacional y europeo. En BICIO hemos podido conversar con Xisco para conocer las claves y las interioridades de Mallorca 312, después que en tan solo 10 horas agotaran las 8.000 inscripciones disponibles de cara a la edición del año que viene. Una cifra que por ahora no crecerá más porque, como destaca el propio Xisco, es importante afrontar el debate de poner límites y de no crecer sin un sentido concreto.
¿Xisco, cuál es la clave para colgar el cartel de “inscripciones agotadas” en 10 horas?
No sabría decirte la clave del éxito. Para tener la clave tendría que ser capaz de sintetizar en una frase lo que está pasando con este proyecto desde 2010 y soy incapaz de hacerlo. Lo que sí hemos experimentado – COVID a parte – es que antes las inscripciones tardaban más en agotarse. Pero siempre había sido cuestión de semanas. Pasamos de entre doce y cuatro semanas en 2018 para la edición del año siguiente, que salió muy bien a todos los niveles, a cuestión de 13 horas en 2019 para la edición del 2020. Una edición, eso sí, que guardamos con mal recuerdo porque no se llegó a celebrar nunca por culpa de la pandemia. La del 2021 nos quedó un poco descafeinada y la tuvimos que trasladar al mes de octubre, con 4.500 participantes.
¿En 2022, podríamos decir que todo ha vuelto a la normalidad?
Sí. Ya en condiciones normales, este 2022 ha sido la mejor edición que hemos hecho nunca. Salió perfecta. El equipo hizo mucho trabajo, los voluntarios también, el clima acompañó y hubo un muy bien ambiente, con cambios en la zona del village, que permitió a los participantes socializar mucho y disfrutar más allá del recorrido como tal. Eso hizo que cerrásemos el evento con muchas buenas perspectivas e intuyéramos que este año el sold out podría lograrse. No dudábamos de ello, a pesar de que las cifras del sector muestren que están bajando entre un 35% y un 45% el número de participantes en grandes eventos deportivos. Nosotros seguíamos sin dudar, pero no esperábamos que se diese tan rápido. La verdad es que nos sorprendió conseguirlo en 10 horas.
“No dudábamos del sold out, pero nos sorprendió conseguirlo en 10 horas”
¿Qué supone hacer un sold out tan rápido, a nivel organizativo?
Además de reforzar servidores, de tener la página web y la plataforma de inscripciones adaptadas… también tenemos que resolver incidencias que se puedan dar durante el proceso de inscripción. Es un pequeño porcentaje, pero de 8.000 inscripciones es un volumen importante de emails concentrados en muy pocos días. En este sentido, hacer un sold out tan rápido también nos supone un efecto llamada. Tanto de participantes que han quedado fuera y quieren inscribirse, como de touroperadores que nos contactan para ver si pueden contratar paquetes y dorsales… pero tengo que decir que, por desgracia, no tenemos más dorsales disponibles y que nuestro compromiso de mantenernos en 8.000 participantes es firme. No queremos crecer más.
¿Por qué no queréis crecer más? ¿Creéis que los 8.000 participantes son los máximos para poder dar el mejor servicio a todo el mundo que venga a Mallorca 312?
Pues mira, estuve en una prueba hace unos días en Francia, con 28.000 participantes y distintos eventos, y no percibí falta de calidad. Pero nosotros siempre crecimos de una forma sostenida, limitados por nuestra parte. Éramos conscientes que un crecimiento muy repentino, mataría la prueba. Porque no teníamos experiencia, capacidad logística… íbamos aprendiendo mientras hacíamos. De hecho, cuando llegamos a los 8.000 participantes, tuvimos problemas en dos avituallamientos y en la salida. Y dijimos: vamos a arreglar esto. Lo arreglamos y entonces tuvimos problemas en los primeros kilómetros. Y volvimos a estudiar cómo solventarlo. Entendimos que ese era el límite.
Es importante ser consciente de ello…
Cuando digo que la Mallorca 312 de 2022 ha sido la mejor de la historia es porque no hemos tenido problemas de que algunos participantes percibiesen que no tenían la calidad que correspondía. Nuestra experiencia nos ha permitido entender que no tenemos que crecer para volver a encontrar otro problema. Lo que debemos hacer es disfrutar de haber llegado hasta aquí, disfrutar de tener la solución a estos contratiempos… no tenemos que ir a buscar más problemas. Hoy en día, la prueba es reconocida internacionalmente, está apoyada por las administraciones locales y por los municipios por los que pasamos… Llegados a este punto, debemos mantenernos aquí e intentar mejorar otros aspectos. Porque siempre hay algo que mejorar. Incluso para que sea más fácil a nivel organizativo. Pero creo que es importante poner límites. Mallorca, como destino turístico, también está afrontando este debate. Y creo que es muy interesante. Atreverse a poner límites. Nosotros lo venimos haciendo desde hace muchos años y hemos decidido quedarnos aquí.
¿Hasta qué punto pruebas como la vuestra contribuyen a cambiar el tipo de turismo que puedan tener destinos como Mallorca?
Tengo que ser honesto. Creo que ha contribuido más Mallorca como destino hacía Mallorca 312 que al revés. Cuando celebramos nuestra primera edición, evidentemente hubo un análisis. Decidimos hacer un evento deportivo ciclista, primero, porque somos ciclistas y nos gusta, y segundo, porque tenemos una industria turística que está intentando desarrollar el cicloturismo como una estrategia para alargar la temporada turística y dejar de dedicarse al monocultivo de sol y playa. Pero cuando empezamos, nos encontramos con unos complejos hoteleros con las infraestructuras adaptadas. Y cuando un participante encuentra esto en el hotel y hace una prueba deportiva bien organizada, evidentemente todo contribuye a que sea una experiencia digna de repetir y de recomendar. De aquí el crecimiento de Mallorca 312. A la inversa también ha habido contribución. Desde nuestra prueba hemos mostrado a mucha gente que no se plantearía venir a Mallorca de vacaciones para hacer ciclismo que es una destinación ideal.
Supongo que te habrán hecho muchas veces esta pregunta, pero para aquellos que aún no lo sepan… ¿por qué el nombre de Mallorca 312?
La primera edición de Mallorca 312 fue en 2010 y eran 312 kilómetros porque hacíamos el perímetro de Mallorca en bicicleta. Esto es lo que propusimos a los participantes de entonces y en la primera edición fuimos 199 valientes. Esto fue así hasta el año 2015. Pero el 2016, a raíz de un cambio de regulación a nivel nacional, se nos indicó que debíamos hacer la prueba con tráfico cerrado. Lo vivimos con estrés, porque es mucha responsabilidad, pero también como una gran noticia. Habíamos estado en cursas en Francia e Italia dirigidas a los mismos participantes y habíamos podido hacerlas con tráfico cerrado, cosa que aquí en España no existía en ese momento. Había la Quebrantahuesos, pero se hacía con tráfico cerrado en el tramo francés porque la legislación gala lo permitía.
Este nuevo paso adelante, ¿os suponía un cambio muy grande a nivel de infraestructura?
El proyecto pasaba a ser otro. A nivel presupuestario, los gastos se multiplicaban, pero nos permitía competir de tú a tú con otros eventos cien por cien seguros que se hacen en otros sitios de Europa y del mundo. Pero nos encontramos con el obstáculo que en la costa sur de la isla, teníamos que cerrar la ciudad de Palma, el aeropuerto, el muelle de pasajeros y de carga de Palma… y era absolutamente imposible. Entonces, tuvimos que modificar el recorrido, con una ruta que mantuviese la esencia de los 312 kilómetros. No es fácil, pero encajando piezas, conseguimos un recorrido que todo el mundo nos dice que es muy atractivo. Es un poco más duro que los 312 perimetrales pero, de rebote, nos permitió hacer un recorrido intermedio porque al pasar cerca de meta, pudimos hacer un enlace y ofrecer una posibilidad de 225 kilómetros.
Ahora, además, hay una tercera distancia de 167 kilómetros, más asumible para muchos cicloturistas. ¿Se creó para llegar a un público mucho más heterogéneo?
Sí, los tiros iban un poco hacia aquí. Pensamos mucho – y es así de momento – en incluir más participación femenina. Si nos presentábamos como un reto absoluto, muy difícil de conseguir, hubiese sido un evento que quizás hubiese tenido un impacto importante desde el punto de vista mediático, porque llama mucho la atención, pero pretendíamos que mucha gente se involucrase desde el punto de vista de querer participar. Así pues, cuando cambiamos el recorrido en 2016 nos permitió crear distancias más cortas. En este caso, lo más importante es que la salida es conjunta y que tú en cada cruce puedes determinar qué distancia harás. Haces una única inscripción, una única salida y el mismo día de la prueba decides en función de cómo te encuentras. Todos pueden tener un mal día o, al contrario, todos hemos tenido un día que estamos espectacularmente inspirados.
“Organizar una prueba masiva de gravel en Mallorca es prácticamente imposible. Además, no creo en el desarrollo de esta disciplina más allá del estado actual”
Hay una disciplina que está creciendo como la espuma que es el gravel. ¿Mallorca 312 se plantea en un futuro poder hacer una prueba de este tipo?
No, no se lo plantea. Los trámites administrativos para organizar pruebas cada vez son más complejos y, en mi caso, afortunadamente lo vivo con una estructura profesionalizada, con un equipo de trabajo de siete personas a tiempo completo. En esto, incluirle las medidas de precaución que se deben tener en cuenta a nivel medioambiental y añadirle el gran número de caminos de propiedad privada que hay en Mallorca, hace que organizar una prueba de gravel masiva en la isla sea prácticamente imposible. Además, no creo en el desarrollo del gravel que va mucho más allá del estado actual. Es decir, no creo que el gravel llegue a números de practicantes similares a los del Mountain Bike o a los del ciclismo de carretera. A pesar de mi escepticismo – y vengo de hacer una prueba gravel este fin de semana –, pienso que el gravel será una disciplina que ofrecerá una alternativa a los practicantes habituales de los otros tipos de ciclismo, pero no creo que sea la modalidad principal de mucha gente.
No es una opinión muy extendida hoy en día…
Me siento muy solo en esta opinión. Hablo con mucha gente del sector, gente que está mucho más preparada que yo, gente que está en contacto con los principales stakeholders, y todos están apostando mucho por el gravel desde hace dos años. En Estados Unidos es ya una realidad. Yo tengo más dudas. Soy un poco escéptico. Pero, al final, como empresa, para sostener el trabajo que tenemos e incluso para aspirar a crecer, me interesa ampliar la cartera de productos o proyectos que podemos tener. Si viese que el gravel fuese factible, me pondría a ello. Pero fundamentalmente por sus restricciones medioambientales, no ha sido un proyecto que me suene atractivo.
“Los hijos de los participantes más ilustres tienen un grupo de WhatsApp que se llama Mallorca 312”
Para ir acabando, Xisco, ¿qué importancia tiene los embajadores y los exciclistas profesionales en pruebas cicloturistas como la vuestra?
Ofrecen el toque final de distinción. En Mallorca 312 no lo teníamos previsto de inicio pero en 2009, cuando Pedro Horrillo cayó en el Giro de Italia, nos enteramos que volvía a andar en bici para ir a comprar el pan. Conseguimos su teléfono y lo invitamos. Tuvimos la suerte que en ese momento él necesitaba una motivación para empezar a ir en bici más en serio y esa fue la suya. Le dimos el dorsal 312. En nuestra prueba, no le podíamos dar el dorsal número 1. Y desde entonces, hemos tenido la suerte que Óscar Pereiro, Joseba Beloki, Óscar Freire, Sean Kelly, Stephen Roche, Miguel Induráin, Alberto Contador, Joquim ‘Purito’ Rodríguez, Perico Delgado y muchos otros han ido pasando por aquí. Ha sido una suerte poder tenerlos. A mí me encanta. Pasamos cuatro días juntos, la mayoría de ellos vienen con sus familias… de hecho, sus hijos tienen un grupo de WhatsApp que se llama Mallorca 312 y quedan, preparan las actividades que harán… Este es un poco el secreto. A nosotros nos da un toque distintivo y el participante no solo pasa un día agradable encima de la bicicleta sino que puede aparecer Miguel Induráin y decirte “qué pasa chavales, venga seguidme”. Es un orgullo tenerlos con nosotros.
