El ciclismo ha cambiado mucho en los últimos 10 años. Bicicletas, material, preparación, alimentación…. pero es que además ha aparecido una “nueva” disciplina llama Gravel que ha terminado de transformar este bonito deporte.
Gravel, gravel, gravel….. pero ¿qué es el gravel exactamente?
El gravel es una disciplina complicada de definir ya que se mueve a término medio entre la carretera, el MTB y el ciclocross. En países como los E.U.A lleva años creciendo a buen ritmo y el boom americano terminó llegando inevitablemente a Europa.
El gravel cumple con las expectativas de muchos deportistas que acuden a esta modalidad en busca de nuevos alicientes.
Reúne aspectos que propician su crecimiento. El gravel es un deporte más seguro que la carretera ya que transita mayoritariamente por pistas, es también más divertido en el sentido de que te permite disfrutar de diferentes paisajes y combinar técnica con potencia.
Dicho esto a muchos les parecerá que el gravel guarda una increíble relación con el ciclocross pero no es exactamente así. Primos lejanos, por llamarlo de alguna forma.
Tal y como os comentaba nada tiene que ver el cx con el gravel. Similitudes? Mucha. Diferencias? también muchas.
El titulo de este post contemplaba los conceptos básicos así que es importante tener claro que con una bicicleta de ciclocross podrás practicar gravel, pero con una de gravel no podrás con el ciclocross. Al menos tendrás que cambiar de cubiertas.
Las cubrieras, las geometrías de los cuadros y el peso son importantes factores diferenciales.
Los fabricantes importantes diferencian entre uno y otro concepto y en su catalogo se aprecia claramente lo que es el gravel y lo que es el ciclocross.
Sinceramente me fiaría más de estas marca que de las que unifican el gravel con el ciclocross y que bajo mi punto de vista unen dos modalidades con cierto parecido, pero diferentes.
El ciclocross dura 1 hora, los cuadros y las geometrías son muy agresivos, mientras que el gravel, véase lo que sucede en Estados Unidos, agrupa diferentes distancias pero generalmente más largas. Que a nadie le extrañe que lo que tenemos en EUA sea lo que veamos aquí en Europa dentro de un par de años. Las bicicletas de gravel también son cada vez más agresivas aunque supuestamente priorizan el confort.
Si por algo se ha caracterizado siempre el gravel es por su versatilidad. Con una bici de gravel puedes afrontar prácticamente todos los terrenos. Pistas, carreteras, senderos… todo esto en una sola bici.
Mi punto de vista y recomendación es de que tengáis, si podéis, dos juegos de ruedas. Es lo mejor para no estar cambiando constantemente de cubiertas. Dos juegos de ruedas te van a permitir en apenas 15 segundos transformar una bicicleta de gravel en una de ruta.
Además, aunque lleves cubiertas de gravel puedes hacer tranquilamente carretera (ojo con la comida de taco que te pega el asfalto) y si llevas cubiertas de carretera de un tamaño considerable, más que nada para la estabilidad, puedes pasar por alguna que otra pista de tierra.
Los fabricantes de cubiertas cada vez refuerzan más sus neumáticos y aunque no es lo ideal puedes hacer un “sterrato” sin pinchar. Eso si, para hacer esto hay que tener las cubiertas en muy buen estado. En definitiva, si buscas una bicicleta para todo, el gravel es claramente la mejor de las opciones
El tema de comprarse una bici es relativo y el de comprarse una bicicleta de gravel todavía más. Gravel, MTB y carretera. Imagino que de no ser por el desembolso económico a todos los ciclistas nos gustaría contar con el tridente de oro, pero los bolsillos de la mayoría no opinan lo mismo.
Así que la mayoría optan por tener una o dos bicicletas. Ante esto estás obligado a elegir entre carretera, MTB y gravel.
La elección correcta no existe así que es más una cuestión de preferencias.
En mi caso, reconozco ser bastante clásico y me decantaría por la carretera y el MTB de toda la vida. El gravel es excelente pero difiere bastante de lo que puedes llegar a hacer con una MTB.
Con una carretera y una MTB puedes superar cualquier recorrido, mientras que con una gravel siempre tendrás ciertas limitaciones en terrenos más complicados.
La conclusión es clara, si tienes la cartera ancha decántate por las 3 modalidades pero si el presupuesto es moderado, considero que la carretera es indispensable y que solo te quedará elegir entre gravel y MTB.