Atrás quedaron esos años en los que era habitual beber algo de alcohol durante las etapas para afrontar los grandes desniveles y kilometrajes. Eran épocas, en blanco y negro, donde los ciclistas usaban el alcohol y el tabaco para hidratarse o abrir los pulmones, como se puede ver en fotografías y vídeos de los años 20, por ejemplo. Entonces no había ni nutricionistas, ni avituallamientos, ni auxiliares ni nada por el estilo. Eran pruebas de pura supervivencia.
Pues bien, salvando todas las distancias, en la etapa reina de este Giro de Italia hemos podido revivir alguna de esas imágenes. Y es que, para sorpresa de todos, el corredor del INEOS Grenadiers, Gianni Moscon, cogió un vaso de cerveza de unos aficionados que presenciaban la carrera en el último puerto del día, el Paso de Giau. Una imagen que, de haber tenido señal de televisión – quedó interrumpida por el mal tiempo –, quizás no hubiéramos visto.
La acción sorprendió, primero por el hecho de aceptar un vaso de unos aficionados en plena época Covid-19 teniendo en cuenta los estrictos protocolos que siguen los ciclistas, y segundo porque no es habitual en el siglo XXI ver a un corredor en plena ascensión echando un trago de cerveza.
Además, no se trataba de un corredor cualquiera. Moscon era uno de los gregarios del líder, Egan Bernal, que minutos antes había hecho una auténtica exhibición subiendo este mismo puerto con récord incluido y llegando a meta con más de un minuto sobre sus principales rivales. Una etapa, por cierto, marcada por el clima y por la modificación del recorrido, quedando recortada a 155 kilómetros y sin pasar por Fedaia y Pordoi.
Por cierto, Gianni Moscon llegó con el grupo de Remco Evenepoel, a 24 minutos de Bernal. El belga se despidió por completo de la general.
Este es el momento en que Gianni Moscon coge el vaso de unos aficionados.
Si vola altissimo 🍻😍#giro #raigiro pic.twitter.com/EXfJfiKDAC
— Ciclismo Ignorante (@Ciclignorante) May 24, 2021
