Un elemento indispensable para toda salida en bicicleta, ya sea en carretera o en Moutain Bike, son las gafas de ciclismo. Muchos podrán pensar que se trata de un complemento puramente estético, como puede ser el color del maillot. Pero no. Las gafas son fundamentales para la protección de nuestros ojos. Para saber cómo elegir correctamente gafas de ciclismo, os presentamos 5 aspectos a tener en cuenta a la hora de comprarse unas.
Cuando vamos en bicicleta, a parte de divertirnos, de disfrutar, de sufrir… también tenemos que vigilar y evitar los máximos riesgos posibles. Uno de los mayores riesgos es que nos quedemos sin visibilidad ya sea porque el sol nos deslumbra o porque nos ha entrado polvo en el ojo, por poner dos ejemplos muy simples pero recurrentes. Algo que unas gafas de ciclismo nos ayudaran a evitar.
Y es que, aunque están consideradas como un accesorio, las gafas pueden llegar a tener la misma importancia que el casco. Así pues, las claves para elegir unas buenas gafas de ciclismo son diversas: la seguridad que ofrecen, la comodidad, el peso, el tipo de lente y, por supuesto, el diseño. Que es importante, porque a todos nos gusta que las cosas nos queden bien, pero no debería ser la única razón.
Dicho esto, pasamos a repasar 5 aspectos a tener en cuenta para saber cómo elegir unas gafas de ciclismo que se ajusten a todas nuestras necesidades.
1. Campo de visión
Las gafas de ciclismo que escojamos deben ofrecer un campo de visión amplio, claro y nítido. Cuando nos pongamos las gafas, no deberíamos ver los objetos distorsionados como consecuencia de la curvatura de la lente porque esto obligará al ojo a hacer un esfuerzo extra.
Lo ideal sería que nuestros ojos alcanzaran todos los puntos de visión, como si no llevásemos gafas. Es decir, no nos puede quedar ningún punto muerto por culpa de la montura, por ejemplo. Si el campo de visión no es suficiente, tenderemos a mirar por los bordes de las gafas y es algo que no es nada aconsejable.
Además, a mayor velocidad, mayor campo de visión necesitaremos. En este sentido, hay muchas gafas de ciclismo que no tienen montura en la parte inferior de la lente para ofrecer un campo de visión más amplio.
2. Calidad de la lente
Pasamos al que seguramente es uno de los puntos claves y a tener más en cuenta a la hora de elegir unas gafas para ciclismo: la calidad de las lentes, así como el tipo de lente. Un apartado que podría tener su propio artículo pero que trataremos de resumir al máximo.
Lo primero que debemos considerar es que las lentes estén homologadas. Es decir, que tengan la certificación de la normativa de la Unión Europea o del país en cuestión sobre el nivel de protección contra las radiaciones ultravioletas. Esto garantiza que las lentes cumplen con unos estándares de calidad y que, por lo tanto, nos protegen como deben del sol.
En este sentido, existen distintas categorías de filtro solar en función del porcentaje de absorción de luz. Desde las transparentes, recomendables para las salidas nocturnas y en días de lluvia, hasta las más oscuras para días de verano y de mucho sol.
Más allá de las categorías, también cabe destacar los tipos de lente. Tenemos las famosas fotocromáticas, que se hacen más oscuras o más claras en función de la luminosidad, una buena opción para el Mountain Bike. Hay las lentes polarizadas, que evitan los destellos y reflejos que se puedan producir, por ejemplo, en superficies brillantes como el agua o la nieve. Y también están las monocromáticas, que son las que podríamos calificar de convencionales que la protección la da mayor o menor opacidad de la lente.
Así pues, en función del tipo de ciclismo que practiques habitualmente, del tipo de rutas, de la zona, conviene más decantarse por unos modelos o por otros. Si no, también es interesante decantarse por una gafa que ofrezca la posibilidad de intercambiar lentes, para tener una mayor polivalencia.
3. Resistencia a impactos y seguridad
Como decíamos al principio, las gafas de ciclismo son un elemento de protección más encima de la bicicleta. Por ello, cuando escojamos una u otra, es importante tener en cuenta qué resistencia ofrece a impactos y golpes que se pueden producir en cualquier salida. Ya sea por el polvo, las ramas, pequeñas piedras, insectos, barro y un largo etcétera.
También es importante asegurarnos de que, en caso de caída, las gafas mantengan su integridad y no se astillen. En caso contrario, el peligro en caso de accidente se multiplica.
4. Ajuste a nuestra cara y comodidad
La sujeción, el tamaño y la curvatura son tres puntos a tener presentes cuando hablamos de gafas para ciclismo. La sujeción es básica para que no se nos caigan las gafas mientras montamos en bici, ya sea bajando una trialera en MTB o un puerto de montaña.
El tamaño va muy ligado a la sujeción. Si la gafa no se adapta a nuestra cara y nos queda demasiado grande o pequeña, vamos a ir incomodos durante toda la salida. La medida ideal es aquella que nos cubre completamente los ojos y deja un cierto espacio tanto vertical como horizontalmente.
Sin olvidarse de las orejas y de la nariz. Si nos hacen daño, nos molestan o no se ajustan a las características de nuestra cara, vamos a dejar de utilizar aquellas gafas. Por ello, la comodidad es otro de los aspectos a tener en cuenta cuando elegimos gafas de ciclismo.
5. Ligereza y ventilación
Y, por último, dos aspectos que quizás podríamos catalogar de más secundarios, pero que también cabe poner en el mismo saco. Por un lado, la ligereza. Como más ligera es una gafa de ciclismo, menos la vamos a notar. Eso sí, siempre teniendo en cuenta la seguridad.
Sin embargo, es cierto que en Mountain Bike, una gafa con unos gramos de más y con mayor agarre, siempre será más recomendable porque es evidente que en este tipo de ciclismo los rebotes y los impactos son mucho más frecuentes que en la carretera.
Y por el otro lado, la ventilación. ¿El motivo? Para evitar que se empañen y que tengamos que parar cada dos por tres a limpiar las gafas, el aire debe circular entre las lentes y nuestra cara. En este sentido, aquellas que tienen un anti vaho son de lo más recomendable.
Llegados a este punto, solo nos queda responder a la pregunta del millón cuando hablamos de gafas y ciclismo.
¿Las patillas de las gafas, por dentro o por fuera de las cintas del casco?
Pues como la mayoría de expertos y profesionales comentan, por fuera. Y no por gusto o por estética. Es por una cuestión, de nuevo, de seguridad. Y es que, en caso de caída, llevar las patillas de las gafas de ciclismo por fuera de las cintas del casco facilitará que estas salgan despedidas y que no se nos claven en la cara.
En caso contrario, de llevarlas por dentro, es más fácil que si caemos y la gafa se rompe, nos pueda provocar alguna herida. Por eso es importante que la propia gafa se ajuste correctamente a nuestra cara sin depender del caso.
Así pues, ahora ya sabes cómo elegir gafas de ciclismo y los aspectos principales a tener en cuenta.
Este artículo ha sido realizado en colaboración con
VisioramaSport
