Las carreras no solo se ganan subiendo. Las bajadas forman parte de este deporte y en ocasiones son tan o más importantes que las propias subidas.
A lo largo de la historia hemos visto descensos vertiginosos por parte de unos ciclistas profesionales que se tiran a tumba abierta en buscas de ganar tiempo o recuperar lo perdido. ¿Pero cómo consiguen estos ciclistas bajar tan y tan rápido? ¿Es una cuestión innata, de trabajo, de suerte o simplemente de técnica pura y dura?
A continuación repasamos los puntos más importantes a tener en cuenta en un descenso para que puedas mejorar tu técnica de bajada. Dichos consejos son especiales para carretera aunque buena parte de ellos también son extrapolables al mundo del MTB. Recuerda que lo que buscamos es bajar más rápido pero siempre con la misma seguridad. De nada sirve bajar más rápido si el riesgo que tomamos es demasiado alto. No buscamos caídas. Buscamos resultados satisfactorios.
Agarra los frenos que bajamos!
Es muy importante la posición encima de la bicicleta. Tanto para subir como para bajar. La postura y la posición encima de la bicicleta no solo nos van a ofrecer una mejor aerodinámica sino que también nos dará mayor seguridad y confort.
Agarrar el manillar por la curva inferior siempre transmite más confianza y la capacidad de corrección o de maniobra brusca es más alta.
La vista debe ser siempre hacia el frente y los brazos en ligera flexión para amortiguar los baches y las vibraciones. El manillar se debe sujetar en su justa medida. No por agarrar más fuerte el manillar iremos más seguros. Además lo único que conseguirás será fatigar más tu musculatura.
Es también muy importante ir relajado y cómodo. Ir demasiado erguido o en tensión no nos ayudará nada en nuestro descenso.
Decir que a parte de llevar las piernas en ligera flexión es importante que los brazos y todo el cuerpo se encuentre en tensión pero flexionado.
A menos que te ganes la vida en ello trata de evitar posturas demasiado agresivas o inventos acrobáticos como los que hace el mismo Chris Froome en sus bajadas. Recuerda que la posición del “bicho bola” está prohibida por la UCI.
Es recomendable también que bajes siempre con algún dedo colocado en la maneta de freno. Ganarás siempre unas décimas en capacidad de reacción ante un bache o una piedra.
Tal y como decíamos anteriormente es importante mantener la vista recta y fijada siempre en la salida de la curva. Nada de mirar a medio metro.
Mirar hacia delante te va a permitir intuir y empezar a escoger la trazada óptima para la próxima curva. Recuerda que el descenso en carretera es rápido y ganar tiempo te dará una ligera capacidad de corrección que te puede salvar de más de una caída. Una buena mirada es mucho más importante de lo que puede parecer. Aprovecha también para utilizar gafas y llevarlas limpias.
Aunque pueda parecer una temeridad trata de tocar el freno lo mínimo posible. La mayoría de caídas y de resbalones se producen cuando tocamos el freno. La zapa bloquea la rueda y la probabilidad de resbalón aumenta.
El freno se debe tocar siempre que se pueda antes de afrontar la curva, cuando la bicicleta está todavía recta y conservas toda tu estabilidad. Tirar de freno en plena curva porque has entrado pasado supone comprar todos los boletos para sufrir una caída. Es importante salir de la curva con velocidad, aunque ello comporte tener que entrar en ella un poco más lento. Si tienes dudas de si utilizar el freno de disco o el de zapata siempre puedes visitar nuestro post.
Llevar las cubiertas a la presión adecuada te dará más agarre y estabilidad. Hincha los neumáticos en su justa medida y ten en cuenta que como más presión lleves más probabilidades tendrás de resbalar.
La presión ideal de las cubiertas varía en función de la modalidad, MTB o carretera, pero también de las condiciones meteorológicas y del terreno. Si llueve o el piso está mojado es mejor que saques un poco de aire a tu presión habitual de referencia. Es lo más habitual y realmente funciona y mucho a la hora de ganar estabilidad.
Puedes consultar más acerca de la presión adecuada en nuestro otro post específico sobre el tema.
En la bajada de cualquier puerto de montaña las curvas se encadenan a gran velocidad y el margen de maniobra es prácticamente mínimo. Por este motivo conseguir una buena trazada es fundamental para mantener la tranquilidad y la confianza durante toda la curva.
Abrir la trayectoria y cerrarse en el momento oportuno es la clave del éxito. Para ayudarte a conseguirlo y a mantener la bicicleta perfectamente sujeta y controlada la correcta posición de la pierna y del pedal pueden serte de gran ayuda.
Es importante que trates de afrontar siempre la curva con el pedal exterior lo más bajo posible. Ejerciendo al mismo tiempo una ligera presión sobre el mismo que te permita compensar mejor el reparto de pesos. Ataca la curva siempre lo más abierto posible y empieza a cerrarte cuando este empiece a cerrar el ángulo, de modo que la fuerza “g” y la gravedad te expulsen de nuevo hacia fuera.
Tanto en carretera como en MTB el peso del ciclista jugará un papel fundamental en la bajada. Repartir correctamente tu peso te ayudará a mantenerte de pie y poder bajar por sitios complicados y aparentemente imposibles.
Cuando la bajada sea por pista y rápida el reparto será el habitual mientras que cuando afrontes una bajada técnica y con mucha pendiente es importante que te acuerdes de echar el cuerpo y tu peso a la parte posterior de la bicicleta. Esta simple tontería da una estabilidad enorme al ciclista y el centro de gravedad se equilibra con mayor facilidad. Si echaras el cuerpo hacia delante en una bajada estarías incrementando el riesgo de salir despedido por delante en caso de frenada brusca. Es importante que adoptes una posición aerodinámicamente agresiva pero sin pasarte por no salir de la normativa UCI.
Justamente para equilibrar mejor el reparto de pesos y ayudarte a tomar una posición adecuada de forma más fácil se crearon las tijas telescópicas. Precísamente hace menos de una semana, la innovadora tija telescópica que Matej Mohoric utilizaba para ganar la Milán San Remo se hacía viral.
La tija telescópica te permite subir y bajar el sillín de forma automática sin tener que detenerte. Un pequeño mecanismo que te permite desde tu manillar subir y bajar el sillín en función de tus prioridades. Su elevado precio sigue siendo un hándicap pero cada vez son más los ciclistas que deciden montar una tija telescópica en su bicicleta MTB. Llegarán también al mundo de la carretera?