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Cambio electrónico o mecánico. Resuelve tus principales dudas

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¿Estás a punto de comprar una bicicleta y no sabes si decantarte por el cambio mecánico o el electrónico? Lo primero que debes saber es que no estás solo y que tus dudas son o han sido compartidas por prácticamente toda la comunidad ciclista.

Todo el mundo parece encaprichado en afirmar que el cambio mecánico, convencional o normal tiene los días contados y que las versiones electrónicas son el presente, pero sobre todo el futuro.

Los grandes fabricantes de grupos. Shimano, Sram y Campagnolo ofrecen versiones de todo tipo. Evidentemente dentro de la gama baja/media priman los sistemas mecánicos, mientras que dentro de la gama alta los cambios electrónicos parecen ganar terreno.

Hace un par de años los que tenemos un presupuesto ajustado nos sentíamos muchas veces condicionados a tener que elegir entre el freno de disco y el cambio electrónico.

Dos años después y en una estrategia comercial magnífica por parte de las marcas y vendedores parece que si no coges una bicicleta con disco y electrónico estas cometiendo el error de tu vida.

Desafortunadamente en la actualidad hacerse con una bicicleta nueva sin frenos de disco parece casi imposible.

 

Dentro de los severos problemas de stock, encontrar una bicicleta con freno de zapata es más complicado que encontrar una aguja en un pajar. Por suerte para los consumidores el tema del cambio electrónico todavía no ha llegado al mismo punto.

Los ciclistas aún podemos elegir entre cambio mecánico y electrónico así que ante tales circunstancias lo mejor es decidir con conocimiento de causa. Por este motivo a continuación te dejamos con las ventajas y los inconvenientes tanto del cambio mecánico como del electrónico. Elige la bicicleta que mejor se adapte a tu presupuesto, pero también a tus necesidades.

Ventajas e inconvenientes del cambio mecánico

Es más económico: indudablemente el producto es más barato y en caso de ser necesario puedes distribuir esa partida del presupuesto hacia unas mejores ruedas u otros componentes. El mecánico es más barato que el electrónico.

Menos imprevistos: es cierto que siempre existe la posibilidad de que puedas romper el cable del cambio, pero por lo general el cambio mecánico tienes menos fallos técnicos. En primer lugar, es imposible que se desconfigure y en segundo lugar tampoco podrás quedarte sin batería.

Ajuste relativo: aunque lleves el cambio mal ajustado, con un cambio mecánico siempre tendrás la posibilidad de enderezar el sistema de transmisión en medio de la ruta. Con el electrónico un pequeño desajuste o cualquier contratiempo en la patilla puede poner en jaque tu salida.

Variedad y versatilidad: las bicis con cambio mecánico todavía son las más utilizadas y por lo tanto siempre presentan un mejor nivel de compatibilidad. A nivel de recambios por lo general también presentan más ventajas que inconvenientes. Un simple cable de cambio a menudo es suficiente como para reparar la avería.

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El cambio mecánico tiene ventajas, pero también inconvenientes

Ventajas e inconvenientes del cambio electrónico

Comodidad y suavidad: si has probado un grupo electrónico te habrás dado cuenta de que no hay color y que la comodidad es muchísimo mejor. Apenas se requiere de un pequeño toque en la maneta para cambiar de marcha.

Mantenimiento: el tema del mantenimiento no me atrevería a definirlo ni como una ventaja ni como un inconveniente. Si llevas el cambio perfectamente ajustado no tendrás ningún problema, pero como se empiece a desconfigurar el sistema o hayas modificado cualquier detalle, por pequeño que sea, seguramente empezaran los problemas.

Peso: los cambios electrónicos están cada vez más trabajados y son más ligeros pero su peso sigue siendo superior al de un cambio mecánico o tradicional.

Precio: los cambios electrónicos son bastante más caros que los mecánicos y la diferencia de precio en un mismo modelo puede ser bastante significativa. En algunos casos, con idéntico montaje, la diferencia puede superar fácilmente los 600 o 700 euros.

Opinión del cambio electrónico en el ciclismo

En definitiva, como has podido observar no hay una respuesta definitiva que aclare acerca de si es mejor comprar una bicicleta con cambio mecánico o electrónico. Ambos sistemas tienen sus ventajas e indudablemente también sus inconvenientes.

Mi recomendación es que si buscas entre bicicletas de gama alta valores si el esfuerzo económico te compensa o no. Me refiero a que, por ejemplo, y hablo en opinión personal, no veo nada claro sacrificar unas buenas ruedas o un cuadro más ligero por querer montar sí o sí un grupo electrónico. Establece prioridades en función de tu presupuesto y elige posteriormente con más tranquilidad.


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2 Comentarios

  1. Cuando habláis de mantenimiento creo que dais pocos detalles. El cambio electrónico en un principio una vez ajustado no tienes que volver a tocarlo. Va de suave como el primer día. Sin embargo el cambio mecánico con el tiempo se va desajustado, la tensión del cable se va perdiendo con el tiempo e incluso le puede afectar los cambios de temperatura.

    Además a la hora de cambiar el cambio electrónico tiene un extra, por ejemplo al cambiar a plato grande el cambio se mueve para cambiar la cadena, y tras un segundo o así se vuelve a mover, vamos, que en ese mismo cambio se mueve dos veces para cambiar mejor y luego evitar rozar con la cadena.

    Más ventajas, puedes configurarlo para que por ejemplo cambie de plato automáticamente cuando cambias de piñón y la cadena va a quedar cruzada (cambia de plato y de piñón cambia hacia el otro lado un par de posiciones), puedes conectarlo al garmin y sacar estadísticas de cuantas veces cambias, controlar ciertas funciones del garmin con botones en las manetas.

    En fin, yo lo tengo desde hace más de un año y no he tenido que ajustarle nada, y va súper suave.

    La única pega que le veo de momento es el precio demasiado elevado. Y en caso de un mal golpe supongo que costará lo suyo repararlo. Lo de la batería, dura mucho, y con el propio garmin veo cómo va de batería. Estando un poco atento no vas a tener problemas.

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