El confinamiento se encargó de presentárnoslo en sociedad, pero el rodillo ya llevaba años siendo una de las mejores herramientas para el ciclista. El compañero inseparable del invierno y los días de lluvia ha evolucionado con el paso del tiempo y a día de hoy es un inseparable para toda la temporada.
Hacer rodillo ya no es aburrido y ahora se puede hacer el “hámster” durante todo el año. El producto en sí ha evolucionado mucho y sus diferentes plataformas digitales han revolucionado el sector. Los rodillos Smart son tendencia y prácticamente no quedan en el mercado rodillos convencionales, ya sean de fijación directa o de rulos.
Sin embargo, entrenar en el rodillo no es igual a entrenar en el exterior y es importante tener claro a cuántas horas de ruta equivale una hora de rodillo.
El rodillo “quema” más de lo habitual y el hecho de no dejar nunca de pedalear provoca que el desgaste nutricional y muscular sea mayor.
¿A cuánto equivale una hora de rodillo?
Que una hora de rodillo no es equivalente a una hora de ciclismo en ruta parece evidente. El mundo indoor no tiene nada que ver con el outdoor y el trabajo que se puede hacer de forma específica entrenando en el rodillo dista y mucho de lo que podemos hacer fuera de él.
Fuera nos encontramos con tráfico, rotondas, semáforos y otros elementos que dificultan nuestro avance y por lo tanto nuestro entrenamiento.
Además, conviene recordar que en el rodillo no hay bajadas como tal y que por lo tanto en ningún momento dejamos de pedalear. En el exterior sí que ocurre y por lo tanto el tiempo real de entrenamiento no coincide con el de la actividad.
De aquí que muchos ciclistas que viven en territorios como Andorra o Mónaco cuenten el volumen de entrenamiento, descontando los minutos y las horas que se pasan descendiendo. De esta forma descartan esa variable que podría distorsionar la visión y la exigencia del entrenamiento.
Así pues, una vez parece claro que el entrenamiento en el rodillo es mucho más efectivo y rápido, conviene determinar en qué cuantía lo es.
Generalmente se considera que la actividad en el rodillo suele ser el doble de lo que sería en la calle.
Es decir, una hora de rodillo equivale más o menos a dos horas de bicicleta al exterior.
De esta forma, si tu entrenador te ha pautado 3 horas de entrenamiento, sea con series o de rodar, en el rodillo tienes la capacidad de compactarlo y con 1 hora y media, como mucho, será más que suficiente como para cumplir con el entrenamiento.
En esta línea si eres de los que tiene poco tiempo para entrenar, de los que dispone de poca luz solar por culpa del trabajo o de los que no les mola un pelo lo de pasar frio, el rodillo puede convertirse en un amigo inseparable.
Además, los nuevos rodillos de transmisión directa son cada vez más silenciosos y apenas se nota su ruido en una casa o incluso un piso. Por si esto fuera poco casi todos incorporan la función “ERG” que te permite regular automáticamente el nivel de esfuerzo a un determinado desarrollo. Es decir, el rodillo adapta su nivel de resistencia a la potencia que tú le indiques. Por lo que hará que la fuerza (resistencia) se adecue también a tu desarrollo.
Con la función “ERG” activada tu puedes poner 200 vatios y automáticamente el rodillo se colocará en la resistencia idónea para que puedas mover esa potencia de forma sostenida y controlada. Los rodillos son este sistema son ideales para hacer trabajo de series.
