Amber Neben sigue agrandando su leyenda deportiva en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
La veteranísima ciclista americana de 46 años se quedó muy cerca de las medallas en la prueba de contrarreloj femenina. Escasos 11 segundos le apartaron de un bronce que habría sido absolutamente histórico.
Esta verdadera guerrera del ciclismo y de la vida ha disputado recientemente sus terceros Juegos Olímpicos.
Neben, es el claro ejemplo de la perseverancia que hay que tener en la vida y es que no debutó en unos juegos hasta Pequín 2008, con 33 primaveras.
En Atenas 2004 había sido elegida como reserva y en Londres 2012 consiguió una 7 posición.
Se perdió los Juegos de Rio 2016, pero le dolió tanto que unas semanas después se proclamaría campeona del mundo de contrarreloj por segunda vez.
La lucha contra el crono siempre ha sido su gran especialidad y lo volvió a demostrar recientemente quedando por delante de nombres tan consolidados como los de Elisa Longo Borghini, Ashleigh Moolman Pasio o su compatriota Chloe Dygert.
46 años dan para mucho, tanto como para tener que superar un cáncer.
Corría el año 2007 y a Neben le detectaron un melanoma en la piel. Un obstáculo duro pero ni mucho menos insalvable para una mujer que de muy pequeña ya estuvo cerca de perder la vida por culpa de una meningitis.
Luchó contra el melanoma en la que fue la contrarreloj más importante de su vida y la cosa salió tan bien que apenas unos meses después pudo competir en los Juegos de Pequín 2008.
La garra y el pundonor son las principales señas de identidad de una Amber Neben que lleva tiempo diseñando sus propias bicicletas.
Unas bicicletas que destacan por llevar siempre el mismo logo en el cuadro. “4XP”
Unas iniciales que no hacen sino definir su propio eslogan vital de las 4P. Perseverancia (Perseverance), Paciencia (Patience), Perspectiva (Perspective) y Fuerza (Power).
46 años y una quinta posición en unos Juegos Olímpicos, pero ante todo un ejemplo de como superar las adversidades en la vida.