Inicio Entrevistas Viviendo el sueño de Marcel Zamora

Viviendo el sueño de Marcel Zamora

El pasado 10 de diciembre tuvimos la oportunidad de asistir a la presentación de “Living The Dream“, documental que gira entorno a la figura de Marcel Zamora, ironman y actual dominador mundial de esta disciplina. Diez victorias en 20 IM disputados, 5 consecutivas en Niza, 4 en Embrun, considerado uno de los triatlones de larga distancia más duros del mundo y una en el Barcelona-Maresme. Descubrir como es el día a día de esta leyenda en activo es lo que nos ofrece el documental, con imágenes tan espectaculares como la trayectoria de Marcel Zamora, y también es lo que nos pudo contar él mismo durante la entrevista que mantuvimos horas antes del estreno de “Living The Dream“.

[BC] No abundan mucho los documentales sobre deportistas y menos aun sobre los que todavía estáis en activo, ¿cómo surge la idea de hacer “Living the Dream”?

[MZ] La idea surge de Win Sports Factory que toma la decisión de apostar por el tema de los audiovisuales y entonces decide que quieren hacer un film sobre el triatlón en el que el protagonista sea un profesional que muestre cómo es su vida, el día a día, la relación con sus sponsors, su equipo, la familia y como se prepara para el objetivo principal, intentar conseguir la victoria en la carrera más importante de la temporada. Entonces bueno, ellos apuestan por mí, me presentan lo que quieren hacer y a mí realmente des del principio me atrae la idea y me ilusiono con el proyecto, y así es como empieza todo.

Parece como si apenas hubieses tenido dudas, ¿no tenías miedo de que el proyecto pudiera interferir en tu preparación y concentración?

Sí, bueno… sabía que sería complicado compaginarlo con mi trabajo y con la preparación de mi objetivo, pero creo sinceramente que la apuesta que Win Sports Factory hace por mí es muy importante y además ésta es la primera vez que se hace una película con esta temática, sobre el triatlón y siguiendo la vida de un deportista. Tampoco es que me lanzara a ciegas, ya conocía a la gente de Win Sports Factory y era consciente de que ellos hacían un gran esfuerzo y yo tenía ganas de corresponderles y de aportar algo diferente al mundo del triatlón y bueno, creo que a cualquier deportista le hace ilusión que se haga una película sobre su vida, no? Sabía que tendría que compaginarlo y que no sería fácil, pero sí que es cierto que ya des del primer momento me hizo mucha ilusión y tenía ganas de que saliera una gran película.

¿Cómo has vivido el rodaje, lo has podido compaginar bien con la preparación de tu objetivo o has tenido que llegar a algún tipo de pacto?

No, la verdad es que lo he disfrutado mucho porque para mí suponía una nueva experiencia. Además, Together Studio, la productora que lo ha hecho, son equipo joven y muy dinámico y yo he disfrutado mucho con ellos. Incluso han estado viviendo en mi casa, en Banyoles y esto ha ayudado a que nos conociéramos mejor y ha permitido que en la película se refleje claramente el personaje de Marcel Zamora en todas sus dimensiones. Sí que han habido días más durillos, semanas en las que hacíamos muchas horas de grabación y otras que estaba viajando y casi no rodábamos. La verdad es que ha sido una experiencia diferente con algún momento durillo, pero en general me lo he pasado muy bien con ellos.

¿El hecho de que el hilo argumental de la película sea la preparación del EmbrunMan 2013 y su seguimiento, ha supuesto un añadido de motivación o, por el contrario, una presión extra? ¿Tenías la necesidad de darle un final feliz al documental?

Sí sí, evidentemente que esto suponía una presión muy grande. Yo creo que a todos nos gusta el típico guión de película americana en que al final todo termina bien, pero bueno, al final las circunstancias, las carreras y la realidad son como son. Me hacía mucha ilusión ganar, pero no sólo por la película, sino por mi carrera deportiva, por mi historial con el Embrun Man y por suerte al final conseguí bordarlo y que la película tuviera un final feliz. Pero claro, viendo esto, hay quien puede pensar que es fácil ganar estas carreras porque se hace una peli y al final el protagonista gana. Pero realmente detrás hay mucho, muchísimo trabajo y años de preparación antes de obtener la recompensa. Yo creo que las horas invertidas en el documental han merecido la pena si han servido para poder transmitir esto a la gente.

¿Qué quieres comunicar con “Living the dream”? ¿Qué idea te gustaría que se llevara la gente de ti y de tu deporte?

Bien, más que lo que yo quiero transmitir, sería lo que el director y la productora han querido transmitir porque yo sólo he sido el actor protagonista y lo único que he hecho ha sido hacer mi día a día, y en alguna ocasión adaptar algún momento a la película porque era algo que se quería plasmar. Yo creo que el mensaje consiste en ver todo lo que hay detrás de un deportista profesional. La gente nos tiene idolatrados, creen que somos como máquinas, robots, pero lo que la gente verá será a una persona normal y sobre todo conocerá a un Marcel que no es el Marcel Zamora, es un Marcel de puertas adentro, con la familia, los amigos, mi relación con los sponsors, que no es sólo un tema económico. Después también está todo el equipo que tengo detrás de mí, mi mánager, los fisios… Yo creo que es esto lo que quiere mostrar el documental, la parte que no se ve, que queda escondida, pero que sin embargo es donde está todo el trabajo. La gente normalmente sólo ve la línea de llegada, la foto, que todo parece muy fácil, pero en realidad hay todo un equipo y no un corredor solo.

La 2013 ha sido una temporada de números redondos: El veinteavo Iron Man y la décima victoria en un IM con la de Embrun. ¿Cómo la valoras esta temporada?

La 2013 yo creo que deportivamente, a nivel de títulos, quizá no haya sido como otras, pero sí que ha sido la que más he disfrutado a nivel personal. He viajado mucho participando en carreras, alguna carrera de MTB también, pero sobretodo he disfrutado porque creo que ahora me tomo el triatlón de otra forma, lo disfruto más que antes, no siento la necesidad de ganar como sea. Creo que ahora cada vez miro más por mí como persona y ya no tanto por si ese título es importante para Marcel Zamora personaje.

Una de las cosas que podremos ver en el documental es como vive y entrena un triatleta de élite. Conoceremos tu día a día, como te preparas, como te relacionas con tu entorno y que en este entorno no existe la figura del entrenador. ¿Cómo tomas la decisión de auto entrenarte? ¿Qué pros y qué contras tiene?

Los contras, pues que quizá uno a veces no es lo suficientemente objetivo consigo mismo y los errores los tengo que ver y solucionar yo. Quizá si tuviera entrenador las cosas serían de otra manera, más sencillas en este sentido. Pero yo creo que el hecho de no tener entrenador me ha dado mucha libertad. Escojo el calendario, entreno donde quiero y a las horas que quiero. Es una filosofía, una manera de vivir a la que estoy adaptado y a mí me gusta y me funciona. Si no me hubiese funcionado supongo que ya habría intentado encontrar un entrenador o un equipo para que me ayudaran a estar arriba. Pero la verdad es que yo le veo más pros que contras. Quizá con un entrenador hubiese mejorado más, pero he escogido este camino porque va con mi forma de ser y entonces no le doy demasiadas vueltas al hecho de no tener entrenador.

¿Nos puedes resumir en qué consiste tu rutina diaria?

Pues por las mañanas hago la sesión más dura, suele ser bici o correr, entonces, en función de la temporada y del momento en que estoy, van variando los entrenos. Si es pretemporada, hago unas 2 o 3 horas de bici, entonces cuando falta poco para el objetivo, los entrenos de bici pueden llegar a ser de 6, 7 o 8 horas. De correr al principio de temporada hago unos ¾ de hora o una hora, hasta entrenos de 2 horas cuando se acerca el objetivo. Por las tardes normalmente nado, y de natación sí que siempre hago más o menos lo mismo, unos 4 o 5 días por semana con sesiones de 3000 o 4000 metros. Lo que sucede es que con los años ganas facilidad y experiencia y ahora entreno menos, pero lo menos que hago es de más calidad. Luego, si estoy en Banyoles todo sucede a un ritmo más tranquilo y relajado que me permite descansar más. Si estoy en Barcelona o viajando, lo intento compaginar en función de las circunstancias del día.

¿Qué planificación sigues, cuantos picos de rendimiento buscas alcanzar a lo largo de la temporada?

Normalmente siempre han sido dos. Lo normal ha sido preparar Niza y después Enbrum. Este año será México en marzo y después Embrun en agosto. Los años que he hecho 3 IM, al tercero ya he llegado justito. Yo veo que me puedo preparar dos picos de forma, tanto física como psicológicamente, pero quizá más por lo físico que por lo psíquico, porque si me marcara 4 IM los acabaría haciendo, pero sé que a partir del segundo me cuesta mucho más recuperar y volver a ponerme en marcha. Dos picos para mí creo que es lo ideal.

¿Cómo son tus semanas/días previos a una prueba importante? ¿Necesitas probarte, programar aquellos entrenos que te dan seguridad de cara al objetivo?

Un mes antes del objetivo es cuando empiezo a programarme este tipo de entrenos que para mí son vitales. Con estos entrenos sé si me encuentro en ese punto, punto de caramelo lo llamo yo, que es cuando notas que estás para ganar. Y sí, tengo un entreno de correr y otro de bici que realmente me dan ese feeling, que me dice si estoy bien. A falta de un mes hago esos entrenos de bici de 6 o 7 horas, solo y a un ritmo alto y también la tirada de hora y media o 2 horas corriendo a ritmos muy altos, y si yo veo que estoy bien, me dan mucha confianza de cara al objetivo. Los domingos suelo aprovechar para hacer una transición con 3 horas de bici, más una hora corriendo a ritmo muy fuerte. Más o menos tengo tres o cuatro entrenos estipulados que sé que son los que me dan la garantía y la tranquilidad psicológica de que estoy preparado, aunque después en la carrera puede pasar de todo y se puede torcer en cualquier momento y que por muchos entrenos que hayas hecho, psicológicos o de test, y por más bien que te encuentres, en el triatlón intervienen muchas variables y en un ironman todavía más.

¿Cómo afrontas la siguiente temporada y cuándo y dónde la empiezas? ¿Habrá alguna novedad en el calendario?

Ya he empezado a entrenar y la verdad es que estoy muy ilusionado con la 2014. Ahora me voy a Chile y el día 12 de enero participo en un medio IM. En cuanto a los objetivos principales, seguramente que en marzo participaré en un IM en México y en agosto iré a Embrun para intentar ganar una vez más y conseguir “la manita” como en Niza. Siempre intento cambiar un poco el calendario, pero principalmente será Embrun, todo girará alrededor de Embrun. Se fija esta base, como en la temporada anterior, y luego en función de esto vamos haciendo variaciones, carreras que me hacen ilusión, compromisos con patrocinadores o surge algún sponsor nuevo.

¿Seguirás participando en carreras de MTB, por ejemplo? ¿Qué te aportan este tipo de competiciones, te ayudan para desconectar?

A desconectar y también me dan un punto de fuerza. Son carreras en las que disfruto mucho y que suelo compartir con mi hermano. La verdad es que soy una persona a la que le gusta hacer otras cosas a parte del triatlón y no solo vivir de eso. Me gusta compaginar mi trabajo con otras pruebas que me hacen ilusión y no quiero tener que esperar a retirarme para poderlas hacer.

¿Tienes una espina clavada con Hawaii? ¿Te planteas volver para mejorar tu resultado del 2007?

No, yo creo que no volveré a Hawaii. La verdad es que era una carrera que me hacía mucha ilusión, la intenté tres veces y ya vi que no era mi carrera. Es muy al final de la temporada, no se adapta muy bien a mis aptitudes físicas de rodar fuerte en bici y no, yo creo que no. Aunque nunca se puede decir que no al 100%, al menos hasta el día que me retire, pero hay un porcentaje muy bajo de que lo vuelva a intentar.

¿Hay algo que no te gustaría dejar de hacer como triatleta antes de retirarte?

Me hace mucha ilusión participar en un IM rápido e intentar bajar de las 8 horas. Yo creo que puedo conseguirlo y al fin y al cabo es algo que han logrado pocos triatletas y evidentemente a nivel personal no deja de ser un objetivo muy atractivo y sobre todo motivador. Luego también me gustaría participar en otras carreras que no han podido ser o porque me coinciden con Embrun o porque todavía no estoy recuperado, como Norseman. La verdad es que todavía me quedan cosas interesantes por hacer y creo que esto me va muy bien para estar motivado, con ganas de seguir intentándolo y para mantener viva la ilusión.


Suscríbete a nuestro newsletter

Recibe en tu correo lo mejor y más destacado de LBDC

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí